El Reflejo De Tu Alma

Nuestro destino

-¡Neji-niisama! -Hanabi Hyuga se levantó de su mesa de estudio en cuanto vio a su primo entrar, de inmediato lo abrazó.

-Hola Hanabi - él correspondió el abrazo con una ligera sonrisa hacía ella- estás más alta.

-Tienes tanto que contarme, todo lo que hiciste con los cazadores por favor cuéntamelo todo -ella volteó hacía su profesor privado indicándole que se retirara y este obedeció dejándolos solos- dime, ¿lograste encontrarla?

La expresión de Neji cambió, cerró los ojos y negó con la cabeza.

-Nunca fuiste bueno para mentir Neji-niisama -ella bajó la mirada triste- todos estos años siempre supe que seguía con vida al igual que tú, pero en el fondo sabía que ella no regresaría.

-No pude convencerla para regresar, lo siento -Neji se inclinó hacia ella para disculparse- te fallé.

-No digas eso Neji-niisama - Hanabi le ayudó a levantarse- hiciste todo lo que estuvo a tu alcance para saber que está a salvo, ¿lo está verdad?

- Estará bien, es más fuerte de lo que recordamos y creíamos, la subestimamos.

-Lo sé -Hanabi le sonrió recordando a su hermana, derramó unas cuantas lágrimas que limpió de inmediato- ¿qué hay de mi padre?, ¿Te permitirá regresar a la guardia real ahora que eres un cazador?

-Lo convenceré de ello iré a verlo esta tarde, renuncié a los cazadores, tuve que hacerlo para poder encontrar a Hinata-sama.

-Estoy segura que eso es una historia que me encantará escuchar, tranquilo te acompañaré con mi padre para poder convencerlo -la menor sonrió hacia él saliendo de la habitación- pero primero no te muevas de aquí ansío que me lo cuentes todo, pediré té y galletas.

La menor de los Hyuga y heredera del trono salió de la habitación, Neji sonrió ligeramente al ver la energía de Hanabi y se alegró de estar en casa después de mucho tiempo.

Aunque al hacerlo comparó la sonrisa y energía alegre de Hanabi con otra, extrañó aquella presencia de la chica lobo que lo perseguía incluso en sus sueños cuando dormía profundamente.

Cuando sintió el leve toque en su rostro de inmediato se despertó alerta y se alejó de la persona frente a él gruñendo en advertencia.

-Sasuke tranquilo soy yo- Tenten se acercó viéndolo preocupada arrodillada frente a él, abrió los ojos sorprendido ligeramente- acércate déjame quitarte la mascarilla.

Él la vio de pies a cabeza cuando se acercó a él pasándole las manos atrás de la cabeza, lo limpia y alineada que estaba la chica, su mirada expresó molestia.

-¿Estás bien?, ¿tus heridas ya sanaron?, déjame ver tu espalda- Tenten se acercó a él y este se retiró bruscamente.

-¿Qué diablos estás haciendo Tenten?, deja de perder el tiempo y desátame para salir de aquí- dijo enojado.

-Sólo me dio la llave de tu mascarilla -Tenten bajó la mirada preocupada.

-Entonces tienes que romperlas.

La chica levantó sus muñecas en respuesta dejando ver los grilletes que le quitaban su magia.

-Tengo en mis pies dos iguales, la celda está cerrada y hay humanos con sedantes que nos rodearían rápidamente, lo lamento no podemos escapar, he pensado en todo, sigo haciéndolo.

-¿Qué es lo que está pasando Tenten?, ¿por qué tienes ese aspecto? -habló con desagrado.

-El humano que nos compró... hizo que me vistieran de ésta manera a la fuerza, aún no entiendo bien el por qué.

-¿Te ha hecho algo? -Sasuke se irritó aun más dirigiendo su mirada hacia la muñeca de la chica- huele a sangre fresca, te cortó...

-No, yo lo hice- se cubrió la muñeca- puedo sanar aún con los inhibidores de magia, estoy bien, le doy mi sangre a cambio de venir a verte todos los días.

Aquello que mencionaba Tenten hizo enfurecer a Sasuke más.

-Voy a despellejarlo vivo cuando salga de aquí.

El abrazo de Tenten lo sorprendió y al mismo tiempo logró romperle el corazón en pedazos cuando la escuchó llorar.

-Todo esto es mi culpa Sasuke -dijo entre lágrimas- lo siento mucho.

-Escúchame Tenten- la voz y la mirada de Sasuke se ensombrecieron de inmediato, habló tan bajo como un susurro esperando que solo Tenten lo escuchara- tienes que encontrar la manera de escapar sin importar que me dejes atrás.

-¡No! yo... - se separó de él y vio Sasuke negando con la cabeza y entonces calló y bajó la mirada comprendiendo que seguramente los estaban escuchando.

-Sobrevive -habló de manera rápida y baja.

Después de mostrar completa sorpresa ante la petición de Sasuke, entrecerro los ojos hacia él y negó con la cabeza decidida.

Los humanos entraron a la celda y Sasuke gruñó hacia ellos, se había acabado el tiempo.

-Sobreviviré, siempre y cuando tú también lo hagas- le sonrió antes de caer inconsciente en al suelo por los sedantes que los humanos les dispararon.

-Estas fiestas son siempre tan aburridas -Hanabi suspiró sentada en una silla especial para la heredera junto a la de su padre- lo bueno es que estás aquí Neji-niisama, ya no me aburriré sola.

-Tendrás que acostumbrarte a ellas son parte de negociaciones importantes con varias alianzas del territorio, te encargarás de todo cuando tu padre ya no esté- Neji se encontraba al lado de ella de pie como el encargado de la guardia real, tal y como lo había sido con Hinata.

-Menos mal que conseguí convencer a mi padre que te dejara estar a mi lado en tu antiguo puesto -sonrió con una mirada cómplice hacia él- para agradecerme por eso te espera una eternidad de fiestas que organizar.

-¿Qué es lo que sucede? -Neji miró con curiosidad como varias personas se acercaban hacia un punto en común rodeando a alguien.

-Ah seguramente es Sasori ya lo conoces siempre trata de destacar con lo que adquiere en sus propias rutas comerciales -Hanabi suspiró aburrida- lo sé odio a ese sujeto tanto como tú desde lo que te hizo, siempre quiere dar el espectáculo y ser parte de él como si se burlara de nosotros, parece que escuché algo sobre que había conseguido domésticar a su propio lobo de sangre pura, yo digo que son puras habladurías para impresionar a mi padre.

Neji no dejó de observar hacia el punto donde había varios nobles reunidos rodeando a Sasori y a la persona junto a él.

Ni dejó de observar cuando unos ojos castaños que reconoció a la perfección hicieron contacto directo con sus ojos aperlados, sorprendidos de la misma manera que él se encontraba.

No dejó de observar ni siquiera cuando Tenten desvío su mirada ignorándolo como a cualquier humano en el salón, y fue ahí donde se dio cuenta que ella ya no parecía sonreír como antes lo había hecho y le dio la inmediata impresión de que no lo había hecho en mucho tiempo.