El peor error de la princesa fue escabullirse del castillo, en medio de esa gran fiesta.
Donde Millie es una princesa y Finn un simple chico.
#18 en Fillie 10/01/20
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𝑪𝑯𝑨𝑷𝑻𝑬𝑹 𝑶𝑵𝑬 𝑀𝓎 𝓁𝒾𝒻𝑒
Millie
El vestido aún me quedaba demasiado ajustado, pero aquello no le importaba a nadie. Tenía que estar formal, el príncipe de Mónaco llegaría esta misma tarde y no podía arruinarlo como lo había echo con otras cosas.
—Es tu última oportunidad, no puedes seguir comportándote como una típica adolescente Millie. Eres una princesa, heredarás el trono de 'Inglaterra' o mejor dicho, tu futuro esposo lo hará.
Cada vez que Millie escuchaba esas palabras el estómago se le revolvía. A veces odiaba ser una princesa, no era nada lindo estar ahí parada como una muñeca para complacer a todos. Mucho menos tener que casarse con alguien que apenas conoce solo porque la familia real no consideraba a Millie una heredera capaz de llevar el reinado.
—Les e dicho miles de veces que no necesito a alguien para gobernar, soy totalmente capaz para hacerlo por mi misma —musito desesperada —Eh estudiado a mi reino por años, me preparé para esto. Sin ofender al príncipe André, soy mucho más capaz de llevar este reino que el, tan siquiera conoce Inglaterra.
—Así dicta el protocolo real. Cada una de tus acciones han causado que duden de tu astucia para poder llevar en alto la corona —ruedo los ojos.
—Solo rompí unas cuantas cosas, y si insulte y alguna vez golpe a algún paparazzi. Pero tú madre, sabes más que nadie que son insoportables.
—Eres una princesa, y debiste comportarte como tal.
Se levanta de el gran sillón arrastrando con ella su abrigo. Sus ojos me miran fulminantes justo antes de caminar hacia la salida. Pero antes de que pudiera salir grito.
—Me preguntó cómo eras antes de que mi padre te pusiera esa corona encima, antes eras una simple panadera, vivías con la gente a la que hora menosprecias...
—No la menosprecio, jamás lo haría. Fue duro el cambio de ser como dices una "simple" panadera a una reina. Pero me tuve que acostumbrar, aprender el protocolo y cambiar mis acciones, no entiendo que tan difícil puede ser para una adolescente que a vivido con el protocolo a su lado —exclama con una media sonrisa.
—No se que esperan de mi madre, pero estoy harta de ese estupido protocolo, y de todos estos esponjosos y hermosos vestidos —retiro de mi cabello la hermosa tiara de diamantes —Pero soy una princesa ¿no?
Vuelvo a ponerla sobre mi cabeza, ganándome una sonrisa de mi madre. Suspiro cuando la veo salir, acomodo el esponjoso vestido que cae sobre mis pies mientras salgo de mi habitación.
—¿A dónde tan elegante? —giro sobre mi cuerpo mientras sonrió como tonta a mi mejor amiga.
