La Curiosidad Mato Al Gato

Capítulo 25.

Trunks y Goten suspiraron resignados, ni el rey había podido ayudarlos, así que contra todo lo que ellos querían ahora estaban bajo el mando del príncipe y Freezer, no sabían cuando sería su siguiente misión y estaban rogándo a todos los dioses que surgiera algo más y no tuvieran que salir a asesinar personas inocentes.

Sus padres habían sido asignados sus antiguos equipos y ahora estaban fuera del planeta. Goku había colocado su mejor cara de malote pero los dos chicos sabían que en cualquier momento el Son saldría en ayuda de dichos seres. Sus abuelo había estado charlando con su padre antes de salir y por la cara de Goku tenía en esos momentos Goten podría jurar que se iban a ayudar el uno al otro.

Su tío Vegeta era harina de otro costal, tenía un rostro neutral y literalmente se había proclamando líder, aunque Turles dijera lo contrario.

En esos momentos estaban en casa de Gine, la mujer los veía con preocupación mientras preparaba el almuerzo, al otro extremo de la mesa estaba Raditz quién no perdía detalle de esos dos por órdenes de mini Vegeta.

-¿Que seguirá después?.- pregunto irónico Trunks. Goten pegó su frente a la mesa y murmuró algo así como "quiero hamburguesas", Trunks quedó con cara de wtf ante lo que escuchó, es decir, el estaba preocupado por su incierto futuro y su mejor amigo pensado en hamburguesas.

-... grasosa y deliciosa.- murmuraba el Son mientras un hilo de baba se deslizaba por si boca. Trunks se hundió en su lugar.

-¿Es mucho pedir que Goten sea más inteligente?.- pregunto al cielo.

-Escuche eso Trunks Brief, que conste que no te golpeo solamente porque aún tengo la imagen de la deliciosa hamburguesa que quiero comer.- le contestó el chico con la cabeza aún pegada a la mesa. Raditz se pregunto que demonios era una hamburguesa y si sería tan deliciosa como aquel chico decía.

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Goku tuvo cerrar los ojos mientras veía hacer el trabajo a su padre, aunque no servía de mucho ya que sentía cuando cada ki desaparecía, todo sería más fácil si pudiera buscar las esferas del dragón sin levantar sospechas, lastimosamente no se podían permitir el viaje a la tierra o ir en busca de las súper esferas del dragón por todo el universo.

-Todo listo.- la voz de su padre lo saco de su mundo de Buenos deseos. - Volvamos a la nave.- Goku asintió y siguió a su padre en donde el resto de su equipo lo esperaba con una sonrisa en su rostro. Entre felicitaciones y charla de lo fácil que había sido vencer a los seres de ese planeta subieron a las naves que los llevarían de vuelta a casa. El intercomunicador de Goku parpadeo varías veces antes de que la voz de Vegeta sonara.

-Kakarotto, ¿Como ha estado?.

- Como si todos los villanos que hemos derrotado me hubiesen pasado por encima, es más estoy seguro de que se están burlando en el infierno.- contestó Goku, y puede que no estuviera tan lejos de la realidad con eso último, después de todo quien no nos asegura que dichos villanos no están viendo las desgracias de Goku.

-Hablaremos una vez que estemos en el planeta Vegeta.- con esto último corto la comunicación entre los dos.

-Si, como si nosotros pidiéramos hablar tranquilamente solos sin llegar a ahorcarnos el uno al otro.- murmuró para si mismo Goku antes de echarse a dormir un poquito.

-Te escuche.- habló de la nada Vegeta haciendo que Goku pegara un potente gritó que todo el universo escuchó.

-¿Que demonio fue eso?.

-Parece como si estuvieran matando a un cerdo.

-A mi me suena a gritó de niña.

-Yo opino...

-Tu te callas.

-¿Alguien más se quedó sordo?. ¿No? A bueno perdón, ya me voy a de nuevo a mi rincón.
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Treinta y un años en el futuro.

Corporación Cápsula.

-Y es por eso que no debes volver a enojarte y lanzarle tu mochila a tus compañeros.- sentencio Bra, frente a ella su pequeña hija de siete años de edad la miraba desafiante y con una expresión que decía "no estoy arrepentida", al lado de la niña se encontraba un niño muy parecido a ella, este se mantenía de brazos cruzados y cerca de su hermana. Unos pasos más allá un niño de diez años miraba desafiante a su padre quien le impedía el paso.

-Esta bien mamá, no lo volveré a hacer.- contestó la niña después de varios minutos de silencio, el pequeño a su lado bufo.

-Te dije que debiste haberles tirado la mesa.

-¡Vegeta Son Brief, ¿Que son esos consejos?!.- gritó Bra, estaba muy orgullosa de sus tres hijos, Goku digna copia de su abuelo paterno era el más calmado pero bruto, al pobre no le entraban las matemáticas ni en reversa, Vegeta era más parecido al príncipe de los sayayin aunque su cabello fuera lila como el de su tío Trunks y por último estaba la gemela del anteriormente mencionado, la niña era una mezcla entre los dos, su cabello negro, ojos azules, su carácter era fuerte, era muy lista, a los ojos de Milk la pequeña sólo tenía un defecto, su amor desmedido por la lucha al igual que sus abuelos.

-¡Para empezar, ese mocoso no debió atreverse a tocarla!.- gritó Goku quien seguía intentando pasar de su padre para ir en ayuda de sus dos hermanos menores.

-¡Tiene razón!- gritaron a lo lejos Goku y Vegeta quienes jugaban piedra papel o tijera para ver quién se llevaba el último trozo de carné. Bulma y Milk se encargaron con un sartén de que sus maridos no se metieran en lo que no les importaba.

Goten se acercó a su esposa con su hijo mayor pisándole los talones.

-Ella ya dijo que no lo haría, ¿Verdad princesa?.- pregunto alzando a su hija. La niña asintió.

-Sara debería aprender a usar su ternura encontra de mamá y papá- habló Vegeta.

-Ella es demasiado buena como para hacer eso- Goku se acercó a su hermana y la abrazo por atrás.- No hay nada que no haría por ti Sara.

-¡Hey!, No intentes robarme su cariño diciéndole eso, yo moriría por ella también.

-Son los mejores, hermanos, del mundo mundial.- les dijo la niña abrazándoles a los dos. - Con que me incluyan en sus juegos todo está bien, no tienen que morir por mi.

Muajajajajajahahajaha
Que mala soy, ok no. Mi perro es más malo que yo. Jajajaha Jajaja se los juro.
😂😂😂😂

Ay ya matenme, o quitenme el poco Internet que tengo.