El ataque

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Pov Erza

Nos encontramos caminando hacia la ciudad de Magnolia, aparentemente la han evacuado para que no dañemos a los habitantes.

Bueno, eso es mejor. Sería una molestia tener que asesinar a inocentes, eso es muy ... molesto.

Suspire. Brandish y yo vamos por un lugar distinto al de los barcos voladores y la el ejército que viene por tierra ¿La razón?

Sencillo, las únicas que saben que yo soy un Springgan son Charle, Wendy y Lucy, y dudo bastante que ellas digan nada, así que a menos que sea alguien de las hadas dudo que me crean o que piensen que ha venido a ayudar por que sí.

Brandish y yo caminamos hasta llegar al bosque cerca de magnolia. Comencé a olfatear el ambiente y noté tres olores muy familiares. Alzack, Bisca y su hija, ¿Ehm? ¿Asuka era?
Aparentemente están acumulando muchisima cantidad de magia, esto me recuerda al cañon de Phantom lord.

- hay alguien aquí cerca, tu vete, yo me encargo de ellos - le ordené a Brandish la cual solo asintió con cara de aburrimiento. Giré sobre mis talones y me dirigí hacia donde provenía aquél olor. Ser una dragon slayer sirve de algo, a pesar de los mareos por los estúpidos vehículos.

Suspire al recordar aquélla vez que me vi obligada a viajar en un tren el cual traía información sobre Alvarez a Ishgar. Como odié esa misión.

- no los mates a todos, no quiero quedarme sin diversión - me advirtió Brandish. Como ya estaba de espaldas no la pude ver y simplemente alce la mano a manera de afirmación y seguí caminando.

Caminé por el bosque hasta encontrarme con la "gran familia feliz". Estaba a unos cuantos metros de ellos pero gracias a mi buena audición era capaz de comprender lo que cada una de las palabras que decían.

- ¡Joder Bisca, más te vale no joderla como siempre haces! - advirtió con ira Alzack. Parece molesto, su mandíbula está apretada mientras que no paraba de gritar obscenidades a su esposa.

 Parece molesto, su mandíbula está apretada mientras que no paraba de gritar obscenidades a su esposa

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- ¡Callate puto vago! ¡Tú no eres el que debe disparar! - gritó molesta Bisca. Ella no quitó su mirada dr donde estaba buscando para apuntar correctamente a la flota aérea que llegaba.

 Ella no quitó su mirada dr donde estaba buscando para apuntar correctamente a la flota aérea que llegaba

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La traición a la ReinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora