War To War

capitulo 6

Hoy me levante más tarde de lo que lo llevo haciendo durante todo este tiempo.
El día estaba fresco por las lluvias, no hacia ni mucho calor ni mucho frío, estaba perfecto

Hoy había decidido practicar con la ballesta, fue el arma que más problema me dio y solo por no saber poner bien la flecha en donde va.

Saco las flechas y las pongo en mi espalda mientras la Ballesta la cargo en mis manos.
Pongo varios blancos en donde tiene que caer la flecha, entrenamiento típico.

Saco una flecha del cargador y la acomodó. Cierro mi ojo izquierdo para que mi vista se enfoque más y la suelto.
La primera flecha cae en el blanco y comienzo a caminar disparando las demas intentando que caigan donde se debe. En sí eran siete blancos y sólo en dos falle, esas aterrizaron afuera del lugar correspondiente.

Las arrancó y las pongo de nuevo en la bolsa en la que vienen y de nuevo las disparó a los arcos.

Ya es sol desapareció y la lluvia esta empezando a caer. Estoy a unos cuantos metros de la cabaña así que no me molestó en correr. A lo lejos se escuchan pisadas grandes. Me detengo  y miro el lugar de donde viene ese sonido, esta vez se hace más claro y es el trote de un caballo. Sacó la espada que tengo en la mochila y la pongo justo en frente sin despegar mi vista.
El trote se aleja pero se siente el olor del animal, pura colonia fina.
De seguro era un caballo del Reino, el Castillo queda en toda la entrada al pueblo. Es blanco totalmente, la entrada es adornada con un arco relleno de rosas Rojas y blancas dándole un contraste más ordenado.
Dentro de esa entrada todo es vegetal, es un jardín a comparación del pueblo que es todo de tierra y cafe, aquí, ver esos colores es algo mágico la gente se sorprende cuando la puerta café leche se abre y deja a la vista este lugar. Todo allí es colorido todo más vivo.

Sin guardar la espada sigo mi camino, el olor a esa colonia se hace fuerte justo donde estoy, este lugar esta demasiado lejos del Castillo y es inseguro para cualquier persona que viva en el Castillo.
Escucho unos sollosos delicados, como una canción de cuna, tan suave que es difícil oírla.
Me asomó y veo un caballo blanco relinchando y levantando sus patas cada pocos segundos. Corro las hojas que impiden que vea más allá, lo primero que veo es un vestido rosado, un Rosa pastel. Con la mirada sigo el rastro del vestido y veo una mujer acostada en un pequeño tronco con sus brazos protegiendo su cara. Su cuerpo se movía de arriba y abajo rápido, de seguro llora.
No quiero problemas así que lo que hago es alejarme pero la mujer rubia levanta su rostro al escuchar como sin querer piso una rama que se rompió con mi peso encima.

La chica sólo me mira asustada puedo ver su rostro de reojo. Vuelvo mi cara al frente y camino pero su hilo de voz vuelve a detenerme

-conoces el bosque?-Pregunta. Yo niego- necesito salir-hace una pausa-Quieren obligarme a casarme con alguien que no conozco.

Hago como si no la escuchará y vuelvo a caminar. No muy lejos se oye un trote de varios caballos, de seguro la buscan.

La niña, porque es lo que es no le pongo más de dieciocho años, se levanta apurada y se sube a su caballo de inmediato, se que no debería meterme pero por lo que me pregunto se que si no le advierto puede morir, aquí hay muchas serpientes he insectos muy venenosos si no se fija podrían atacarla sólo por su apuro

Camino hasta el caballo y antes de que empezará a correr lo detengo

-Que haces?-Pregunta histérica

-Si sales corriendo ahora vas a morir, hay animales venenosos-La niña me mira molesta

-Ayúdame entonces-Niego con la cabeza-Entonces apartate-Golpea a su caballo para que empieze a correr. El animal de detiene de un tiro haciendo que la "princesa" casi se caiga. El caballo tenía otra cuerda con la que ella lo había amarrado y sin darse cuenta la había dejado en el suelo para que el la arrastrará, la tomé y lo amarre de nuevo al árbol.

La chica se bajo tal vez para juzgarme, pero se detuvo y rápidamente se escondió donde estaba segundos antes.
Visualize un hermoso caballo negro asomando su cara por las hojas que me tapaban, rápidamente me escondo más arriba que la chica. Se oye ya varios caballos, y varios armaderos hablando entre ellos diciéndose que era mejor encontrarla o el Rey "cortaría" sus lenguas.

Sin hacer mucho ruido camino a paso lento para tomar un atajo y salir de aquí rápido. Giré mi rostro hacia atrás y vi a la niña, estaba totalmente asustada. No podía ayudarla, si lo hacía al que castigarian sería a mi, y más no merecía.

Abrí el grande hojal que esta justo en frente y Di un paso largo para ni pisar el charco de lodo que estaba. Ya a unos cuantos pasos se escucharon los gritos de la chica pidiendo ayuda y diciendo que prefería morir antes que casarse con el Príncipe vecino.

Yo no tenía idea de que existieran más, según yo esos reinos ya no eran de tanta importancia.

Después de una hora de recorrido, entre a la Cabaña sintiendo el frío recorrer toda mi piel hasta ponerla China. Agarró uno troncos que están al lado de la pequeña chimenea y los meto para luego prenderlos y que así la sala entre en calor.

Entró a mi habitación y me cambió de ropa, una vez hice esto me dirigí a la cocina y corto varias frutas en un plato hondo.
Camino a la chimenea y me siento enfrente mirando el naranja del fuego

El agua se escucha demasiado fuerte, quiero callarlo pero es difícil hacerlo en un sueño, no recuerdo con exactitud que era lo que soñaba sólo quiero que el sonido del agua se calle para así dormir mejor. Empiezo a moverme y siento algo caliente cerca de mi pie... ¿donde estoy?... espera... ¿estoy en mi cuerto?, no recuerdo haber entrado a mi habitación.

Mierda!

Me levantó y miro serio la chimenea como si tuviera la culpa de que me hubiera dormido ahí, y en parte si, si no estuviera haciendo tanto frío no me hubiera quedado aquí.

Me levantó y camino a mi cuarto dejando el plato en la mesa, abro las cobijas y me meto hay y lo único que quiero es sentir el calor, pero no, sólo siento frío gracias a la lluvia. El ruido de la cascada es más silencioso aquí y si no hubiese sido por esa cascada estaría en la sala sintiendo el calor... ¿De que habló? Yo tomé la desicion de venir venir mi cuarto y acostarme en mi cama. Definitivamente tendre que poner mi cama al frente de la chimenea.