*Caso Real*
Comencemos por decir que el hombre que habló acerca del incidente apenas tenía 9 años de edad cuando ocurrieron los espantosos hechos. El hombre se dirigió al show infantil como "El show M", pero por lo que el contó se notaba claramente que se trataba del show infantil de los años 70' que tal vez sus padres recuerden. Candle Cove. El joven que habló no quiso dar su nombre, pero aquí lo llamaremos Andrew.
Andrew era un chico de 9 años proveniente de una familia normal. Disfrutaba, como cualquier niño de su edad, ver shows de televisión junto con su amiga, a la cual llamaremos, Jenny. Cierto día la hermana adolescente de Andrew vio un anuncio en una de esas revistas para adolescentes, el anuncio contenía un concurso de el show M; el concurso decía que debías contestar una trivia (la cual estaba en la revista junto con el anuncio) y lo enviaras junto con tus datos personales a la dirección que ahí decía. El premio sería un viaje a Disneylandia y ser miembros del club del Show M. Emocionados, Andrew y Jenny contestaron la trivia junto con la hermana de él y enviaron el sobre por correo. Todos los días ambos niños iban a ver el correo para saber si le llegaron respuestas del show, pero nada sucedía. La mamá de Andrew estaba algo extrañada que por televisión no hubieran anunciado nada. Semanas pasaban y Andrew ya perdía la fe en el concurso, pero Jenny seguía siendo una fan apasionada. Cierto día la madre de Andrew llegó con una sorpresa. Una contestación del programa donde decía que ambos niños eran parte del club de miembros del show M. Esto le renovó la fe a Andrew. Todas las semanas recibían cartas con fotos de los personajes, trivias, y las preguntas informativas de ¿Sabías que...? Un día recibieron una carta donde decía que los personajes visitarían su ciudad. Durante dos semanas Jenny y Andrew no dejaban de hablar de otra cosa que del show. Las fotos que se tomarían, lo que le dirían, Jenny inclusive se aprendió cada cosa de los personajes por si alguno de ellos le preguntaba algo. La noche del sábado la hermana de Andrew se quedó durmiendo en casa de una amiga, y los padres de la amiga la traerían de vuelta a la casa de Andrew. La mañana del domingo Andrew se levantó temprano e impacientemente esperó por su hermana quien no llegaba, al pasar el rato la madre de Jenny le preguntó a los padres de Andrew que si el niño se podría ir con Jenny y ella, pero los padres de Andrew se negaron diciendo que su hermana llegaría en cualquier momento. Andrew lloró e hizo berrinches, pero su hermana no llegó hasta dos horas después. El niño, furioso, se subió al auto de sus padres quienes condujeron hasta donde se llevaría a cabo la celebración solo para darse cuenta que se encontraban en el estacionamiento de un centro comercial. Andrew comenzó a buscar por todas partes, pero no había rastros ni de los personajes ni de Jenny, sin embargo encontró a su madre quien con lágrimas en los ojos dijo que los personajes habían llegado, pero solo estuvieron ahí por media hora para decirles a los padres de los niños que se llevarían a los pequeños a dar un paseo y filmar un episodio, con la promesa de que más autobuses llegarían para los padres y demás niños. La madre de Jenny fue una de los pocos padre que accedieron a que los niños se fueran en el autobús, porque llevaba el logotipo del programa y por eso le dio buena espina. ¿La mala noticia? Hacia dos horas que no habían noticias de Jenny. Andrew esperó, esperó y esperó, pero ningún autobús de El show M llegaba, a cambio, lo que llegaron fueron varias patrullas de policías.
Cuenta Andrew que él perdió emoción por el show, pero un día el personaje principal dijo a las cámaras que los niños llamaran a sus padres. Eso capturó su atención. Andrew se sentó con su familia y el personaje comenzó a decir que nunca hicieron ningún concurso y nunca prometieron los premios ni nada por el estilo. Los habían estafado...eso...rompió su corazón.
Ciertas semanas luego del incidente, a casa de los padres de Jenny llegó un sobre el cual contenía una cinta Súper 8, al verla, mostraba un video donde aparecían Jenny y los otros niños que subieron al autobús, Jenny aparecía sonriendo junto a un conejo y diciendo "Mamá, Papá, deberían venir, este lugar está genial."
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Creepypastas
HorrorColección de creepys que voy encontrando en la web. Que tengas dulces y torcidos sueños