La última canción (Jenlisa)

Volver a empezar

La reportera intentaba abrirse camino entre la multitud de jóvenes gritonas, seguida del pobre cámara, que apenas podía caminar sin llevarse algún golpe. El perímetro de la sede de YG estaba prácticamente inaccesible, repleto de periodistas y fans. Blackpink iba a volver. Era la noticia del año. El girl group más famoso de la historia, que consiguió cosas que sólo ellas pudieron hacer, volvía al foco mediático. La separación había pillado por sorpresa a todos, y absolutamente nadie sabía sus motivos. No tenía sentido. Estaban en el pico de la fama, en la cima del mundo. Sus canciones tenían cientos de millones de visualizaciones en YouTube, llenaban estadios en todos los países y todas las marcas querían sus rostros. Y de la noche a la mañana... nada.

- ¡Grábame aquí, Suho! - gritó la reportera, consiguiendo un hueco entre la multitud -. ¡Que se vea el logo de YG! - La mujer se arregló el pelo, se aplanó el abrigo y trató de hacerse oír entre el barullo una vez Suho terminó la cuenta atrás con sus dedos -. ¡Hola, estimados televidentes! Estamos aquí, en la sede de YG, en riguroso directo. Todos conocemos las circunstancias de esta compañía, y todos los medios de comunicación del mundo tienen su objetivo aquí hoy. Nos consta que hace un rato que Park Chaeyoung, conocida como Rosé, entró en la agencia sin dar ningún testimonio a la prensa. Así, ya son tres las miembros de Blackpink que han llegado, a falta de Lisa Manoban, la maknae de oro, que aún no ha aparecido. No se preocupen, que estaremos aquí para retransmitirlo. - La reportera hizo una pausa, recordando lo que tenía programado para rellenar tiempo, ya que no sabía cuánto tardaría Lisa en llegar. Miró mal a un grupo de adolescentes que cantaban pensando si perjudicaría el audio de la retransmisión. Aquello era muy importante. La de Manoban era la reaparición más esperada, pues era la única que había vivido lejos de la fama -. Vamos a hacer un pequeño repaso de la vida de estas cuatro chicas. Empecemos por Kim Jisoo, la visual del grupo, a la que todos estamos acostumbrados a ver por televisión. La mayor forjó una carrera como actriz secundaria y presentadora de programas de idols, haciendo gala de su carisma y sus habilidades sociales.

"Después tenemos a Jennie Kim, el rostro mundial de Chanel, modelo de numerosas campañas de publicidad, que ha llegado a realizar varios diseños para la marca. Todo lo contrario que Park Chaeyoung, Rosé, la única que ha seguido en el mundo de la música. La australiana se ha forjado una pequeña pero segura carrera como cantautora en su país, conocida como Roseanne. Muy lejos de la fama pasada, hace conciertos acústicos en pequeñas salas.

"Y después está Lisa Manoban. Desde luego, la que ha causado más expectación, ya que no podemos verla en dramas, en revistas, o cantando con una guitarra. La maknae de Blackpink se mudó a Los Ángeles meses después de la disolución del grupo, y formó una academia de baile para niños. Apenas la hemos visto en estos últimos años. ¿Qué tendrá que esconder la tailandesa?

La reportera giró la cabeza rápidamente al escuchar gritos en la multitud, esperando ver a Lisa Manoban salir de un coche, pero la gente gritaba porque Kim Jisoo se había asomado a la ventana.

- ¡Graba, Suho, graba!

Mientras tanto, dentro del edificio, Jisoo volvía a cerrar la ventana y bufaba. Suspiró.

- ¿Por qué tardará tanto?

Volvió a sentarse en el conjunto de sofás donde reposaban Jennie y Rosé. Las tres intercambiaron una mirada. Habían perdido un poco el contacto tras la separación, pero lo de Lisa había sido demasiado. No contestaba a los mensajes, ni a las llamadas, y había faltado a las dos últimas reuniones anuales. La más pequeña se había encerrado en su burbuja, al otro lado del mundo, y no dejaba a nadie entrar. Rosé era la única que había conseguido ir a visitarla, y luego le había contado lo ocurrido a las otras dos. Lisa daba clases en la academia durante el día, daba un pequeño paseo por la noche y se acostaba, y así un día tras otro. "Y ya no baila", había dicho Rosé, con cara de horror. "Le dice a sus alumnos como hacer los pasos, pero ella no baila nunca".