La canción era, en palabras de Jisoo, una jodida mierda. Demasiado mojigata, demasiado suave, con un tempo demasiado rápido para una melodía tan lenta. Muy pink y muy poco black. El baile podrían haberlo hecho niños de diez años, y el vestuario las hacía parecer adolescentes. Aquella canción estaba muy lejos de parecerse a su último comeback, de mujeres empoderadas, fuertes e independientes. Pero lo peor, la cosa más horrible con diferencia, era el título. Boys. Así se llamaba. Por si quedaba alguna duda que las chicas de Blackpink eran perfectamente heterosexuales y por supuesto nada interesadas en mujeres. Lisa bufó, la heterosexualidad de Rosé era la única que quedaba en pie, y a veces, incluso dudaba de ella.
Teddy, muy orgulloso, les había mostrado su creación con una sonrisa. ¿Qué había pasado con esos raps agresivos? ¿Y las estrofas melancólicas? ¿Cómo habían pasado de matar al amor a escribirle notitas a un chico? Y el concepto del videoclip... uf. Colegialas, sonrientes, inocentes, y muchos tonos pastel. Lisa estaba planteándose seriamente tirarse por la ventana.
- Esto no es Blackpink - zanjó Jennie, tirándose en el sofá de la casa. Había sido un día agotador, más que nada porque había estado luchando con sus instintos asesinos toda la jornada. Ella, que había rapeado sesenta y tres sílabas en ocho segundos, que había grabado subida a un tanque de diamantes o a dos cisnes gigantes, tenía líneas que parecían extraídas de MrWonderfull.
- Bueno - dijo Rosé, cayendo a su lado, intentando ser positiva -. Se parece a As if it's your last.
- ¡Y una mierda! - exclamó Jisoo sentada en un puf, jugando con Dalgom -. As if it's your last al menos tenía un poco de fuerza. Esto... parece que vamos a caernos un vientecito. - Gruñó, tirándole al perro su pelota con fuerza -. Qué vergüenza, qué vergüenza. ¡Vergüenza me daría ser Blink después de esto! Imagínate estar meses defendiéndonos y apoyándonos para esa porquería de canción.
Lisa asintió. La canción no era mala, pero no era para ellas. Necesitaban un poco de oscuridad para brillar, y ese tema era todo rosa y corazones. Ella siempre hacía cosas divertidas durante los videoclips. Le pegaba a puertas, la paseaban con un carrito de la compra, montaba en bici, tenía un loro... Pero ahí, nada. Todo era tan insípido... El momento más emocionante era cuando se levantaba y miraba a la cámara enfadada. Y ni siquiera era un enfadada de verdad, como en Kill This Love. "Enfadada pero mona", había dicho Teddy, y ella había tenido ganas de partirle la nariz.
- Supongo que los días de gloria de Blackpink acabaron - reflexionó Lisa, tumbada en el suelo, con la mirada perdida en el techo. Apenas reconocía a ese grupo de viejas que se resignaba a su destino. Ellas eran las que tiraban indirectas a la agencia en las entrevistas, las que hacían caso omiso a los guardaespaldas y corrían a coger los regalos de los fans, las que habían cogido una puñetera bandera LGTB delante de veinte mil personas -. ¿Os acordáis del Coachella?
Lisa no las vio, pero supo que estaban sonriendo.
- Fue grandioso - dijo Jisoo.
- Sobre todo para Rosie - rió Jennie -. I want everybody to dance, like it's your last!
Rosé rió, con las manos en la cara.
- Aún siguen haciendo memes de ese momento - se quejó, avergonzada -. Y todo por que se me olvidó que tenía que ponerme detrás de Lisa. Tuve que improvisar.
- Sí, pero allí a nadie le importaba - continuó Jisoo -. Nadie criticaba un paso mal dado, o una mala palabra. Les movía la energía.
- Oh, sí - asintió Jennie -. No sé ni cuantas veces dije bitch en aquel escenario.
- Lo mejor es que nadie nos conocía - opinó Rosé -. Pero todos bailaban y aplaudían. No por un estúpido reality show, ni por programas de entretenimiento. Por nosotras. Nosotras de verdad.
ESTÁS LEYENDO
La última canción (Jenlisa)
Fiksi PenggemarBlackpink tuvo el mundo a sus pies. El girl group más famoso de la historia. Llenaban estadios, cientos de millones de streams en YouTube, giras mundiales... Lo tenían todo, y un día, se disolvieron. Sin previo aviso, sin una explicación, sin que na...