Capítulo 23 "Malos presentimientos"

599 51 11
                                    

Capítulo 23 ya AHHHHHHHHH, perdonen por hacerla tan larga y dar tantas vueltas con la historia, solo espero que les esté gustando y les siga gustando, este cap va dedicado a una gran lectora Agus

---------------------------------------------------------------------

Narra Mérida

Mi vida ha cambiado demasiado desde que conocí a aquel dragón y a el chico que logró robarme el corazón. Nunca creí verme... Corrigo Sentirme, enamorada es como lo más raro que me ha pasado, aún estoy confundida con la actitud de Chris, es decir si el no sabía nada de Hipo pues... No se es raro.

Mi madre me llama para tener las aburridas clases de "PrincesaPerfecta", otra vez. Hace unos cinco minutos que he vuelto y no tengo ni un segundo de descanso. Bueno eso es todo...

Cerré el diario, lo escondí debajo de mi almohada y corrí hacia la clase de historia.

Llegué y mamá comenzó a regañarme, me senté en la silla y mi madre me dejó una pila de libros al costado de mi banco para que eligiera uno, leyendas, reinos... ¿Vikingos? Uhmm... Vikingos.

Agarré el libro y comenzé a ojearlo, antes de que pudiera leer algo mi madre me interrumpió:

─ Los vikingos, ¿Por qué no me sorprende? Yo hubiera elejido cualquier otra cosa, una princesa no usa fuerza bruta. Hija no te deberían interesar los vikingos ─ Comenzó

─ ¿A no?─ dije haciendo una mueca, estoy saliendo con uno.

─ ¿Qué?─ preguntó, yo negué con la cabeza en señal de que prosiga─ Bien, hija, los vikingos son rudos, brutos, malvados, agresivos, todo lo contrario a lo que deberías ser tú. Lee algo más interesante, algo que no sea tan... Agresivo.

─ Mamá, los vikingos no son agresivos─ dije ─ Es más, no todos son iguales, algunos son lindos, compasivos, tiernos...

─ ¿De dónde sacas esas ideas tan absurdas? ¿Acaso alguna vez has estado con uno?─ dijo en tono de burla.

"Siempre" pensé─ Supongo mamá que si dices que desde pequeña tenía un amigo vikingo tu debías haberlo visto diferente a otros─ dije.

Ella negó con la cabeza y rodó los ojos.

─ Mérida, los vikingos no cambiaron, ellos hacen cualquier cosa para ver sufrir a otros. Hipo era solo un niño, no tenía acciones vikingas de tan pqueño. Pero te aseguro que ahora el debe ser un matón, impulsivo y rudo que solo busca conflícto.─ dijo enojada─ Bien, por suerte ya no hay ninguna alianza con ellos y no pienso volver a armar una. Prosigamos, toma el libro de leyendas...

Rayos ¿Ahora qué haré? No puedo decirle, no aún, pero deberá ser pronto antes de que algo malo pase, tengo un mal presentimiento...

Narra Hiccup

Estaba en casa con Chimuelo aún no puedo creerlo ¡¿EN QUÉ ESTABA PENSANDO?! ¡¿POR QUÉ TRAJE A CASA UN DRAGÓN DE MÁS DE 25 METROS!? Aghh por suerte papá no está aquí y busca "El nido" de los dragones, hace más de 30 años que lo está buscando, no creo que lo encuentre.

Cielos, si descubren el nido deberé alejarme de Chimuelo, o quizá lo maten o me destierren, tengo tantos problemas dentro de mí que ya  no se que hacer. Entre mi padre, ser un vikingo, tener un dragón, la princesa...

Ya no puedo seguir con esta mentira, tengo que solucionar todo antes de que algo malo pase, tengo una vocesita en mi cabeza que me dice que algo está mal. Qué, es la pregunta.

*Tock tock tock*─ suena la  puerta. ¡Estoy frito! Si alguien descubre que tengo un dragón oculto aquí, MORIRÉ.

─ ¡Hipo soy yo Astrid, abre!─ escuché la voz de Astrid. Me tranquilicé, pues ella ya sabe de el dragón.─ ¡¿HIPO ESTÁS AHÍ?! ¡CONTESTA!─ Esta vez gritó, me sobresalté y corrí a abrir la puerta antes de que la parta al medio con su hacha.

Abrí la puerta y ella entró sin cortecía, nada.

─ Adelante, pasa─ dije irónico, cierro la puerta y me giro para ver lo que hacía.

Parecía que buscaba algo, sostiene su hacha con fuerza y tiene el seño fruncido. Si, ya lo he dicho, a veces me da miedo...

─ ¿Qué sucede Astrid?─ le pregunté, ella al parecer se sobresaltó y me lanzó el hacha hacia la cabeza, yo me agaché y esquivé el golpe, pero ésta dio a un cuadro rompiéndolo.─ ¿¡ESTÁS LOCA?!

─ Perdón, me asustaste─ dijo ella encogiéndose de hombros.

─ ¿¡Cómo que te asusté!? ¡Sabías que estaba aquí!─ dije casi gritando desesperado.

─ ¡NO ME GRITES!─ Gritó.

─ ¡YO NO GRITO!

─ ¡ESTÁS GRITANDO!

─ ¡TU ME TIRASTE EL HACHA!─ Grité subrayando el "EL"

─ ¡TU ME ASUSTASTE!

─ ¡N...!

─ No me proboques Haddock, ─ dijo amenazante tomándo con una mano el cuello de mi remera, luego me soltó bruzcamente. Siempre voy a admirar esa fuerza que tiene esta chica.─ Vine para que conozcas a alguien.

─ Oh, gracias, pero no tengo tiempo─ dije balbuceando.

─ No te pregunté si tenías tiempo o no, vas a conocerla.─ Dijo y me agarró del brazo.

Creo que me arrastró por casi toda la aldea hasta llegar a la cocina, donde siempre veníamos a almorzar luego de entrenar con los dragones.

Astrid me lleva hacia un grupo de chicos que estaban hablando animádamente, pero cuando ven a Astrid se quedan en silencio.

─ Hiccup, ella es Heather─ dijo Astrid mostrándome a una pelinegra de ojos entre amarillos y verde, impresionante.─ La nueva, quiere que le enseñes un poco Berk, tu eres el indicádo para estas cosas ¿Verdad?

Yo me quedé paralizado al ver a la chica, esto de verdad no me da buena espina Astrid de casamentera, el sueño de Mérida, y que de repente hay una nueva en Berk ¿Por qué me hace recordar tanto a lo que Mérida me contó?  ¿ Qué está tramando Astrid? pienso al ver la sonrisa maliciosa de Astrid.

Mericcup ¿Te amo o te odio? *corrigiéndose*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora