V E I N T I C U A T R O

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Y. G.

—¿Saldrás temprano ésta noche? —levanto la mirada de mi móvil cuando escucho a Jin, mi compañero, hablarme. Había olvidado que estaba en hora de trabajo. Niego, apagando mi móvil, y suspiro mientras guardo el mismo en el bolso de mi delantal.

—Quiero hacer horas extras, necesito el dinero para la universidad —explico. Él asiente con una sonrisa.

—¿Es tu novio? —su pregunta me confunde un poco, después me doy cuenta de que habla de tal vez, solo tal vez, porque vio la foto que raramente, estaba viendo justo antes de que me hablase. Aprieto los labios y niego.

—Fue mi amigo.

—Y te gustaba...

—Eh... Algo así...

—Ya —asiente, se recarga en la mesa detrás de él y cruza los brazos —¿Qué te hiso?

Rasco mi cuello algo nervioso y muerdo mi labio.

—Es una larga historia.

—Tenemos hasta las 11 de la noche, Yoongi —encoje sus hombros y se acerca a mi —; la jornada va a ser larga.

Pasan alrededor de cinco horas cuando termino de contarle todo, con detalles incluidos. Jin ni siquiera me dijo algo cuando comencé a maldecir por el aún reciente enojo, se dedicó a escucharme y aconsejarme cuando no necesité, y lo mejor de todo es que me sentía realmente bien al dejar salir todo lo que tenía dentro.

Por algo Jin y Namjoon eran una linda pareja.

Cuando menos lo pensé ya era la hora de salida, Jin y yo nos encaminamos hasta la parada del autobús, sin embargo unos minutos después Namjoon llega en su auto por Jin, y se ofrecen a llevarme a casa.

Tardamos alrededor de quince minutos en llegar.

Cuando me despido de ellos y entro a casa, mi celular vibra con un mensaje, pero no me tomo la molestia de abrirlo porque mis ojos están a punto de cerrarse, así que opto por lanzarme a mi cama sin siquiera quitarme la ropa del trabajo y me duermo.

Por la mañana cuando por fin logro abrir los ojos sin que la luz del día me ciegue, me levanto de la cama y me doy una ducha antes de desayunar y salir nuevamente a mi trabajo.

Hoy decido ir caminando solo porque me doy cuenta de que he despertado temprano y me ha sobrado tiempo, así que lo aprovecho para escuchar algo de música y relajarme.

Jin, como siempre que llego, me da una sonrisa antes de seguir tomando órdenes de los comensales mientras yo me dirijo a los lockers para tomar mi uniforme y delantal.

Comienzo tomando órdenes de los recién llegados y una que otra vez intercambio palabras con Jin, pero es solo cuando vamos a recoger una orden o cuando vamos a llevar platos sucios.

Me sorprende que no haya comentado más sobre el tema de ayer, pero una parte de mi lo agradece, no sólo por lo que dije, aún estaba algo apenado por las palabras altisonantes, sino porque aún había una espina de molestia dentro de mi, y no creía poder sacarla aún.

En la hora de nuestro descanso, cuando por fin puedo tomar asiento y comer algo, es cuando leo el mensaje de la noche anterior. En la bandeja de entrada aparece el nombre de Taehyung, y me toma mucha decidia abrirlo, no estaba enojado con él, sin embargo, una pizca de molestia sí estaba presente.

Abro el mensaje cuando Jin se distrae con su móvil, para ser más precisos; una llamada de Namjoon, y suspiro.

Leo:

Taehyung

Hola, Hyung, sé que debe estar dormido, o algo... En fin sólo quería decirle que lamento todo lo que pasó con Jimin. Acabo de regresar.
Ayer 11:25 pm

Me toma unos segundos para pensar en responderle o no, pero al final cedo.

Escribo.

No pasa nada, Tae, olvídalo. Para mí ese tema ya está vetado. ¿Cómo estuvo tu vuelo de regreso a Corea?
8:25 pm

Me alegra que no estés molesto conmigo. El viaje estuvo bien, fue divertido, traje algo conmigo ¿crees que pueda verte mañana?
8:27 pm

No lo sé. El trabajo me tiene muerto, el sábado lo uso para descansar, ¿por qué no nos vemos el domingo? A la 1:00 pm. Llega temprano.
8:28 pm

Me parece perfecto. Hasta el domingo, Hyung :3
8:29 pm

Hasta el Domingo, Tae
8:30 pm

—¿Con quien mensajeabas? —pregunta Jin mientras guardo mi celular en mi bolso.

—Taehyung.

—¿Ya regresó?

Asiento.

—Apenas ayer.

—Creí que estabas molesto con él.

—Eso creí yo también pero, vamos, es Taehyung ¿quién puede enojarse con él?

—Cierto, es un niño encantador —sonríe.

—Bueno —digo mientras me levanto —, hay que seguir.

—Sí, señor.

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DannyBL.


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