Uno, dos, tres

2.7K 130 1
                                    

2 años antes.

El sonido de un bello vals retumbaba en mis oidos, miré a mi alrededor y la gente sonreía, eligiendo a su pareja para acompañar a los recién casados en la clásica pieza de baile.

Suspiré tomando de un trago mi cortito de tequila, Cristiano y yo habíamos discutido y me había venido al matrimonio de mi tía yo sola, ahogando mis penas en pequeños tragos de alcohol.

"Concedeme esta pieza, Samira" el moreno llegó con un terno blanco, suspiré ante la belleza de aquel hombre... Me traía loca, de eso no cabía duda.

Largué mi último trago al seco y tomé de su mano para dirigirnos a la pista de baile.

"No sé bailar" rió Cristiano, hice una mueca como tono de burla y me dispuse a guiarle.

"Va, sigueme" me afirmé de su mano y su cuello, él entrelazó una de sus manos con la mía y la otra la depositó en mi espalda baja. "Uno, dos, tres"

"Te amo, Samira, siento a veces no ser lo que esperabas. Siento no ser lo que muchas veces te prometí"

"Uno, dos, tres" mordi mi labio, permaneciendo en silencio.

"Eres... Eres sin duda una mujer fantástica mi chica, eres única en cada puto aspecto de la vida"

"Uno, dos, tres"

"Siento que, cada minuto a tu lado es un motivo más para sonreír, me das la fuerza para levantarme cada día a pesar de cada situación"

"Uno, dos, tres"

"Cásate conmigo, Samira"

"Uno, dos..."

Suspiré, me solté de su agarre sin creer lo que había escuchado.

Negué.

"Te amo, Cristiano, pero no creo que sea lo correcto"

Narra Cristiano

2 años antes.

Puedo jurar que el mundo se me caía encima, una sensación que nunca antes había vivido apareció en mi cuerpo, salí de allí más rápido que nunca, esperaba que todo acabara y no volver a sentir ello nunca más.

Ahora.

Uno, dos, tres, ¿Es que el martirio nunca acaba?

Mi vista se nublaba, detuve el auto.

Caminé, corrí, me exalté, todo pasó tan rápido, tan rápido como decir uno, dos, tres. Tres golpes. No lo soportaba. Jr gritaba. ¿Junior?

"¿Qué haces aquí?" un grito me sacó de mí, me giré, yacía ahí Samira, como si anteriormente hubiese estado viviendo una alocada y apasionada relación

"Que puta eres, Samira" solté a James, cargué a Jr aún sin saber exactamente que hacía allí "Aún no se como te haz salvado de tanto, si no deberias estar aquí" me acerqué a ella, amenazante, intimidante, sintiendo como cada parte de su cuerpo se tensaba a cada paso que daba, suspité "Perdóname, ¿sí?" mordi mi labio, traté de aclarar todo lo que había pasado, no entendía, recurrentemente cada vez que ocurría algo así con Samira simplemente me trastornaba, no era yo, todo pasaba tan rápido.

Todo pasa tan rápido con ella a mi lado, tanto bueno como malo.


Maltratada (Cristiano Ronaldo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora