Confesión

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Región Qi, una semana después.

—Te agradezco mucho que hayas venido—dijo solemne la líder de la secta Xiu.—La verdad, mi temor era llamar la atención de otras sectas problemáticas como LanLing Jin o Qinghe Nie...

—Líder—llamó la chica a su madre al regresar junto al grupo de explotación que le habían asignado—La zona está limpia, al parecer el último que derrotaron era el que manipulaba a los demás.

—Perfecto, entonces creo que es hora de regresar, imagino que ambos están agotados por el viaje—señaló la mujer, dedicándoles una sonrisa amable a ambos jóvenes.

—Está bien, no es nada—respondió el menor de los Jade, inclinando apenas la cabeza. Pero lo cierto era que deseaba llegar pronto hasta las inmediaciones de la secta Yong Xiu.

—Vamos ya, quiero darme un baño con urgencia—pidió la chica al ver sus ropas llenas de polvo al haber perseguido a esa cosa casi toda la noche.

Ama...ama...espera—llamó YinFeng a su maestra—Aún hay algo más...

—Madre...—antes de poder hablar, su abanico se movió en una dirección en especial y lanzó un ataque de advertencia.

De entre los árboles y matorrales, emergió una figura blanca, con una espada en la espalda y un fuchen(1) en las manos, con el que había bloqueado el ataque. A su lado venía un cultivador vestido de negro, mirando amenazante al grupo que los había atacado.

—Oh, vaya, no reconozco esas ropas—comentó la líder de secta, mirando a ambos hombres—Están en territorio protegido, ¿qué hacen aquí?

—Mi señora, lamentamos haberles asustado—habló tranquilo el cultivador de blanco—Sólo estábamos de paso por la región, vinimos hasta aquí porque en el pueblo junto al río escuchamos que un monstruo asechaba la zona.

—Ya lo eliminamos—espetó la menor, siendo detenida por su madre.

—Nos hemos encargado ya, díganme algo, ¿pertenecen a alguna secta?

—Como puede ver, no vestimos ningún sello distintivo, somos "cultivadores errantes"(2) y estamos de viaje para fortalecer nuestro cultivo. ¿Puede decirnos dónde está el pueblo Yong?

Ama—llamó esta vez YinXing, con voz suave y tranquila—Ellos son los que salieron en la tablilla...No son malas personas...

—Oh...—la chica miró a ambos y buscó entre sus mangas la predicción que YinXing había hecho hace unas semanas, viendo en el dibujo una figura blanca y otra negra junto a otras inscripciones y dibujos—Madre...son ellos.

—De acuerdo, entonces sígannos, les diremos dónde está el pueblo de camino a nuestra secta—informó la mujer dando media vuelta para comenzar el regreso.

****************

Secta Lanling Jin, misma fecha.

—Mo-kun—llamó sonriente el japonés al llevar entre sus manos dos manzanas rojas, perfectas y brillantes, ofreciéndole una al chico que leía un manuscrito de la secta con algunas cosas elementales—Ten, la traje especialmente para ti.

—Pe-Pero...—negó varias veces, ya le habían amenazado con lo que pasaría si continuaba juntándose con él como si fueran amigos. Su hermano GuangYao específicamente le dijo que no debía hablar con los extranjeros ni nadie más que no fuera él.

—Nada de peros, la traje para ti—dijo al dársela en la mano—Llevas dos días evitándome y ni siquiera sé qué hice, ¿es que acaso te molesta que golpee a esos idiotas que te molestan? Porque si es el caso, entonces prefiero que te enojes más, no pienso dejar de defenderte.

What if? [MDZS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora