Con un vistazo (Ghiralink, AU)

Capítulo XIV

Mi corazón se detuvo. No podía ser...

–¿De verdad creyeron que los dejaría escapar tan fácilmente?¿Que los iba a dejar solos para que corrieran por ahí?– dijo entre pequeñas risas crueles –No, no y otra vez ¡No! Tengo cámaras por todo el lugar, supe de inmediato cuando te soltaste de las ataduras. No creía que pudieras hacerlo, y mucho menos que abrirías la puerta.

Mi mirada se clavó en la puerta. Estaba enfrente mío. La libertad, tan cerca y tan lejos.

–Si lo sabías– comencé, pero, para lo que iba a preguntar, ya sabía la respuesta, la cruel y cruda verdad –¿Por qué me dejaste ser?

–¿Qué por qué?– preguntó de forma maniática –Porque estaba jugando contigo, ¡obviamente!– Ilian comenzó a reír de forma incontrolable.

Cerré los ojos con fuerza. Por supuesto. No me iba dejar ir tan fácilmente como la primera vez que estuve aquí. Lo peor es que, esta vez, arrastre a Grahim conmigo.

–En serio que eres divertido– dijo –E intentaste salvar al hijo de esos inútiles buenos para nada.

–¿De qué...?– comencé, pero Grahim me interrumpió.

–Idiota, ¡¿Crees que dejaré que le hables de esa forma a Link, o que insultes a mis padres?!– gritó.

Ilian presionó la punta de la pistola contra mi nuca.

–Yo tendría más cuidado con mis palabras, después de todo, soy yo quien tiene el arma, además, estoy apuntando al cráneo de tu novio, ¿o acaso quieres que le vuele los sesos?– preguntó con tono burlón, Grahim resopló pero no dijo nada –Bien, ¿Qué tal si nos sentamos? Debes estar muy cansado Grahim. Date la vuelta– me indicó.

Hice lo que me dijo y dí la vuelta lo más lento que pude, con cuidado de no lastimar a Grahim. No podía verlo a la cara, todo ésto era mi culpa.

Ilian tenía una pistola en mano, era negra y algo pequeña, un arma de bolsillo, eso seguro. Me apuntaba a la frente y su mano sujetaba firmemente el arma, no temblaba, eso me hacía pensar que no era la primera vez que apuntaba a alguien con ella y, seguramente, también ya la había disparado.

¿Sería posible que haya matado a alguien antes?

–Sígueme– dijo. Caminamos hacia los muebles y sillones en donde, al llegar, un guardia de seguridad tomó a Grahim y lo separó de mi.

–Oye...

–No te quejes si no quieres que dispare– dijo Ilian.

El guardia, un zora, llevo a rastras a Grahim a un sillón individual, mientras que Ilian hizo que me sentara en un sofá y él se sentó a un lado mío, manteniendo la punta del arma de mi sien.

El guardia se mantuvo a un lado de Grahim.

–¿Qué es lo que quieres?– preguntó Grahim a Ilian, este último lo miró con desdén.

–De tí, nada. De él– dijo señalandome con la cabeza –mi venganza, pero de tus padres– comenzó a subir de a poco el tono de voz –quiero el negocio, las ganancias, la publicidad, el crédito, entre otras tantas cosas. Tus padres ya saben que estás aquí, de hecho, mientras estabas inconsciente, les mandamos una foto tuya, estoy seguro que no harán nada estúpido.

Grahim puso los ojos como platos.

–Tu... ¡Infeliz ¿Qué hici-?– con su brazo libre, Ilian había rodeado mi cuello y me pegó a él. Me estaba costando respirar.

–¡Vaya! En serio que no entiendes. Déjame te lo explico para que lo entienda tu diminuto cerebro. Si no te comportas, él muere– dijo aumentando su agarre en mi cuello. Con mis manos intenté quitarmelo de encima, pero, por la falta de oxígeno, me estaba quedando sin fuerzas, por no mencionar que él tenía mucha más fuerza bruta.

Volté a ver a Grahim, parecía que quería pararse y venir a ayudarme, pero ambos sabíamos que eso solo nos causaría problemas. Por lo que solo apartó la mirada.

Ilian me soltó.

–Exelente– dijo.

–Entonces– dije con la voz algo ronca, ambos voltearon a verme –cuando fuiste ayer a hablar con los padres de Grahim, ¿los estabas amenazando?– pregunté, ésta, sin duda era una oportunidad.

–Claro que no, intenté negociar por las buenas– dijo fingiendo sentirse ofendido, mientras hablaba me veía directo a los ojos y sentí la necesidad de apartar la mirada, pero no podía –Les dije que si no trabajaban conmigo, cosas malas podrían pasar, incluso mandé a uno de mis amigos a que intentará recopilar información del nuevo proyecto, pero alguien –dijo mirando de reojo a Grahim –no se lo permitió.

–¿El señor Lavoisier?– preguntó Grahim con sorpresa.

–Claramente, no se dieron cuenta de que trabajaba conmigo.

–Alto– dije, en mi mente se había formado una idea –¿que no el señor Lavoisier trabaja con tu padre, pero el lo despidió poco antes de morir?

–Ah, eso– Ilian seguía sin apartar la mirada de mi. Era tan incómodo –Cuando Lavoisier fue despedido, yo lo busqué, teníamos las mismas ideas, metas y, lo más importante, una gran odio hacia mi padre.

Me quedé helado. ¿Podría ser...?

–¿Qué qu-quieres decir?– pregunté, temeroso de la repuesta.

–¿Acaso no es obvio?– preguntó, acercándose a mi rostro con una sonrisa macabra dibujada en su cara –Trabajamos juntos para... matar a mi padre y yo tuve el honor de disparar el arma– dijo con gran felicidad.

Sabía que estaba loco, pero esto...

–U-un segundo– interrumpió Grahim –¿Por qué confesaste tan fácilmente?

–Bueno, cuando lleguen tus papis, ustedes tres dejarán de ser un problema... y tú– volteó a verme –¡te irás con ellos!

Otro guardia se acercó y entre los dos intentaron llevarse a Grahim.

–Caminen– dijo Ilian.

Era ahora o nunca.

–¡CHICAS!

Grité con todas las fuerzas que me quedaban. Ilian levantó una ceja pero en seguida se congeló en su lugar al ver como del techo caían varios policías, al igual que entraban por las ventanas y la puerta.

De los que entraron por la puerta, en frente de todos, estaban ellas, nuestras salvadoras y mis mejores amigas, Zelda e Impa.

–Es él oficiales– dijo Zelda señalando a Ilian –De está no te salvas, lo grabamos todo.

Dioses!!!
Se lo juro, creí que había perdido para siempre esta historia!!!
Me la pasé todo el santo día pensando que era el fin!!

Literal estaba escribiendo el testamento cuando apareció de repente otra vez la historia... En fin.

Estoy tan feliz de haberla recuperado :DDD

Lo siento si asusté a alguien con todo el drama que arme.

Gracias a:
-escritora_vaga
-NP19_SFM-BBOY
Por comentar en el aviso, también a todos los que votaron.

Me ayudaron a tranquilizarme.

Gracias.