Comía mi hamburguesa a muerte, y a pesar de que había estado perdiendo mucha sangre, aún no me desmayaba y dudaba demasiado de que eso me sirviera de algo; tenía que ir al hospital.
Me terminé la hamburguesa, mi refresco y conduje hacia un hospital que creí haber visto cuando pasaba. Efectivamente ahí estaba con sus miltuples ventas "asesinas" sus instrumentos de torurs y su sonrisa engreída. He odiado los hospitales desde que tengo memoria literalmente.
Lancé las llaves a uno de los arbustos por allí, mantuve la cabeza baja y le dije a la recepcionista todo lo que pasaba en cuestión con la herida de bala.
- el doctor la atenderá al instante - me dijo señalándome una cama a mi lado derecho.
Sonreí - gracias - dije
No podía esperar. Se supone que soy una fugitiva que debería estar muerta y en cambio estoy aquí para que me chequen la maldita herida, irónico.
Daemon sabrá donde encontrarme, lo hará. Sin embargo, yo tambien sé parte de su psicologia psicópata.
El no era mal chico, digo si le quitabas lo mandón, egoísta, egocéntrico, presumido... Bien, si era mala persona.
- hola - entró el doctor
- hola, ¿cuanto tiempo se tardara esto? tengo que ir a estudiar- le mentí rápidamente.
El doctor sonrió y se miró aun mas joven de lo que ya era.
- he tenido pacientes adolescentes por 10 años... - me explicó al momento de quitar la banda que cubría la herida - ..creo que sé identificar cuando alguien solamente quiere salir de aquí para embriagarse y bailar - me chantajeó. Mi corazón se calmó y con ello mi inquietud de estar aquí.
- mm... Cierto... - le dije
- la recepcionista me dijo que tienes 18 ¿es cierto? - preguntó mientras cocía la estúpida herida. Punzadas de dolor me stravesaban el cuerpo y creo que el doctor solo quería distraerme. Le seguí la corriente.
- si yo.. Auch - dije. Suspiré - tengo diciocho años
- y ¿como te hiciste esto, eh Jessica?
- estaba en un lugar en el momento menos indicado - mentí.
- bien, creo que necesitas cuidarte más, Jess - me aconsejó.
...
Salí con una banda en mi hombro y la indicación era: no hacer movimientos tan bruscos. Espcifico TAN. El doctor me dió una gran idea, no me he embrigada o siquiera tomado un estúpido vaso de tequila desde mi "renacimiento" como sea, no recordaba muy bien el sabor pero era algo que seguramente debí de haber hecho, las malas costumbres, por desgraciad jamás se olvidan.
Caminé sin dirección por unas cuantas calles. Llegué a un bar llamado "Boos" y entré.
Las personas bailaban, y por decir bailar me refiero a moverse sin sentido por la pista, las personas se besaban, tomaban y se embragaban con sus seres mas queridos.
Encontré una silla disponible.
- hola preciosa ¿que te ofrezco?
- un tequila - le pedí.
Me dió un vasito, lo alce y puse en mi boca. En cuanto levanté la cabeza para que el líquido entrara por mi garganta fué algo twn fuerte y tan débil que nunca imaginé, sentí todo el recorrido, desde mi boca hasta mi estómago.
- vaya, un paso a la vez - me aconsejó el barman
- créeme jamás harás nada en la vida si te tomas tu tiempo, amigo - le dije molesta. El asintió y se fué.
No tenia nadie con quien hablar o bailar, asi que me dispuse a tomar. Pedí dos tragos más, miré mi reloj y me topé con las 1:00 am. Demonios.
Dejé un billete arriba de la mesa y me dirigí a la salida.
No sentí ningun signo de mareos o asco.
Necesitaba llegar al hotel antes de las dos de la mañana. Necesitaba dormir.
Necesitaba recargar energía.
Necesitaba mas armas.
Necesitaba un plan.
Necesitaba demasiadas cosas, por lo que entré por un callejón.
Faroles estaban muy alejados de mí como para poder ver al 100%, mi instinto de supervivencia me dijo que ncesitaba regresar.
Sentí algo en mi nuca seguido por una voz masculina.
- dame todo el dinero que traigas
Me petrifiqué. No ahora.
- te dije, dame todo tu dinero - repitió lentamente. Levanté las manos al momento en el que me daba la vuelta para encararlo.
Llevaba una gorra negra y me impedía verle muy bien la cara.
- ¿quieres mi dinero? - pregunté. Todo por lo que he estado odiando, escondiéndome, negando se me vino a la mente. Incapaz de procesar toda la información.
- al menos que quieras una bala en tu cabeza, te sugiero que me des todo el dinero que tengas- dijo enojado.
- no - le dije.
- ¿no?
- no - repetí
Su arma quedaba en mi cabeza, quitó el gatillo. Le torcí la mano, pero el me respondió devolviéndome el acto, le pegué en la pierna, pero no se cayó, me pegó en el estómago y me sacó todo el aire. Su arma se había caído y hacia el intento por recogerla. Cerré los ojos, reuní todas mis fuerzas y agarré la estúpida arma. La situé enfrente de su cara.
- ¿quien es la princesa ahora? - lo reté. Sonrió en burla.
Una presión mas en mi nuca.
- creo que tú. - respondió otra voz. Demonios. ¿Que no se acababa?
Quitó el gatillo y el primero respondió.
- dispárale - ordenó.
No paso nada y los ojos del chico al que le tenía el arma en la narices se llenaron de miedo.
Escuché un golpe, despues otro un disparó y actué. Le pegué en la rodilla haciendo que cayera al piso, en la cabeza y quedó inconsciente.
Sujeté el arma y en cuanto me volteé quedo justo enfrente de la del otro chico que también había derribado al otro. Su pecho se movía de arriba a abajo, su musculoso pecho, sus brazos, su cuerpo, llevaba una camisa blanca con unos pantalones negros... No podía ver su cara.
Todo en mi cuerpo se intensificó, mis ansias por salvar a ese chico se intensificaron, mi voluntad, mi pasión, mi bondad... Lo supe por la forma en la que sostenía el arma, como si fuera mi propia destrucción. Levantó las manos y se acercó a mi. Daba un paso atrás conforme el avanzaba.
- aléjate de mí - le dije bruscamente. Su cuerpo se petrificó por unos segundos antes de avanzar nuevamente. - Dije que te alejes- repetí
- no... - creí escuchar, su voz me dió escalofríos pero una curiosidad inmensa. ¿Quien era este tipo?
La luz estaba a un paso de él. Y cuando avanzó, su cara se convirtió en sorpresa y lástima.
¿Lastima?
¿Sorpresa?
Disparé.
****
Hola, hola. Soy yo de nuevo. Este capítulo está largo porque me inspiré. Dedede. Los quiero, chicos.
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¿Inolvidable? |temporada 2| COMPLETADA
Fanfic|| Es recomendable empezar por la primera temporada, ya que en caso de no ser así contiene muchos spoilers|| Ahora las cosas han cambiado desde que conocí al hermano de Raymond: Daemon Crawford, mis perspectiva de un hermano mayor siempre había sido...
