Te quiero, o eso dicen los fanfics.

CHAPTER 4

SI SUPIESÉIS LO CABREADA QUE ESTOY CON INÉS ESTOS DÍAS... No puedo más con sus tonterías, de verdad. Pero aquí estoy, a ver si me purifico por dentro. 

¿Qué pasa si le pido opinión a @drunkines para el capítulo? Pues que acabo meándome de la risa creando escenarios de lo más absurdos con ella. Muchas gracias, mi santa. Estar tan positivamente loca tiene sus ventajas. Muchos credits a ella. 

A ver qué os parece este capítulo. 

Besazos. 

CHAPTER 4

POV Inés

¿Pero qué hago? ¿Por qué le he dado mi número a Irene? Es que cada día estoy peor. Mis 38 años ya me están afectando y eso que los acabo de cumplir. Pero es que Irene me sigue el rollo y a los 5 min me habla por WhatsApp.

-¿Has elegido aposta este número de teléfono? 😵

+No sé de qué me hablas.

-Eres demasiado friki, de verdad.

+Espera que habla la otra.

-Bueno, ¿no querías que te felicitase en condiciones? Aquí tienes mi regalo. 😉

Me envía un enlace y me dispongo a abrir lo que pienso que es un fanfic de estos. El título de la historia es El cielo en tus ojos y el capítulo que me ha enviado se llama Feliz Cumpleaños. Como no tengo nada mejor que hacer y Xavi ya duerme porque lo escucho roncar, decido echarle un vistazo. Por lo que veo, Xavi aquí se ha olvidado de mi cumple, y qué casualidad que en la vida real también. Se lo he tenido que recordar yo a la hora de comer. ¿Las Irenés estas son videntes o algo?

Sigo leyendo y aparece Melisa y todo. Joder, qué real es esto. La Irene ficticia me envía flores sin pensárselo dos veces y por poco nos pillan. En la vida real, Irene es igual. Parece un espíritu libre al que no le importe nada lo que piensan o digan de ella.

Abrió el sobre y encontró dos entradas para un concierto de Extremoduro... Cuando leo esto, los ojos y mi boca se me abren de sopetón. No lo puedo creer. En mi vida Xavi me ha regalado una cosa así. ¿Cómo es posible que todo el mundo sepa que me gusta Extremo y él me regale dos entradas para un concierto de la Rosalía? O debería decir, la Rusalía, porque la canción esa tan cutre que ha sacado en catalán... En fin, ni Loquillo, ni Extremo, ni unas sevillanas, no. ROSALÍA.

Irene en la vida real seguro que me llevaría a un concierto así. Ella sabe que me gusta Extremo, por lo de la entrevista de Salvados, y yo sé que le gusta Marea. Me gustaría ir a un concierto con ella, sinceramente. Parece ser que en esta historia Irene nos las regala a mí y a Xavi. Cómo se nota que no lo conoce, porque él no sale de los himnos ingleses. Al final, vamos las dos juntas a Toledo a ver ese concierto. La verdad es que la narrativa es muy bonita e incluso da envidia la conexión que tienen.

Cada vez que la besaba sentía que todo lo demás dejaba de importar, sentía que se paraba el mundo, y se estaba volviendo adicta a ese sentimiento, a sentirse... así de viva.

¿PERO QUÉ COJONES? ¿ME ESTOY LIANDO CON IRENE MONTERO EN EL CAPÓ DE UN COCHE, POR LA NOCHE, Y EN TOLEDO? NI CON 2 LITROS DE RATAFÍA EN EL CUERPO HARÍA ESO. Aunque hace tiempo que no me siento así, no sé qué pasa con Xavi últimamente pero cuando me besa noto una sensación de cariño y no de pasión. Sin embargo, me he acostumbrado a una rutina y comodidad con él y eso es lo que más bien me hace sentir.

Pero como siempre, la realidad era otra cosa.

Cuánta razón. Acabo de leer el capítulo y tengo como ganas de llorar y de reírme. Más de la primera, porque me hubiese gustado que mi cumpleaños fuese así de verdad. No besándome con Irene, pero sí en un concierto de Extremo. Aunque tiene unos labios preciosos. Pero estando con Pablo Iglesias no tiene que ser buena amante, me la juego. El tonto ese debe de darle unos besos horribles. Este fanfic me lo tengo que leer entero.