The Boy

003

La chica llegó al instituto con una gran sonrisa plasmada en sus labios, y su felicidad no podía ser menor al haber estado todo un fin de semana hablando por mensaje con la castaña, hasta habían acordado verse otra vez.
Tarareaba una canción mientras caminaba con tranquilidad por los pasillos.

Llego al aula y se sentó en el mismo lugar de siempre. Poco a poco las personas se hiban sentando en sus respectivos lugares.
El profesor no tardó mucho en aparecer y comenzar su clase.

La rubia con desinterés comenzó a dibujar en su cuaderno, y de vez en cuando escribir el nombre de la castaña, una sonrisa se plasmó en sus labios cuando pensó en todo lo que conversaron el día anterior.

Nisiquiera se dio cuenta cuando la campana tocó y la castaña se acercó a hablarle.

-Lalisa...

La de mayor estatura se sobresaltó y cerró su cuaderno de golpe dejando sorprendida a Kim.

-Je-Jennie ¿por qué...? Yo...

-solo... quería saber que días tendrás libre para hacer el trabajo

-¿trabajo...?

La rubia frunció su ceño con confusión y hiso un puchero inconscientemente.
La castaña soltó una risita divertida al ver lo nerviosa y tímida que actuaba la Tailandesa.

-el trabajo que nos asignó recién el profesor de historia, no me digas que no prestaste atención a la clase

Se acercó más hacia la contraria y se inclinó un poco al estar esta sentada en su pupitre.
Manoban se sonrojó y miró los ojos de la chica con inseguridad, Kim sonrió al no recibir respuesta alguna y se separó despacio al sentir que sus mejillas de a poco se calentaban.

-¡oh! No lo esperaba de ti, Lalisa. ¿Como es eso que no prestas atención en las clases? Eso está mal, pequeña

-¿pequeña...?

Hablo esta vez con una sonrisa agrandandose de a poco.
Jennie sintió algo removerse en su interior y sus mejillas se tiñeron de rojo al ver esa hermosa sonrisa que le otorgaba la de mayor estatura.

-si, yo... supe que eres menor que yo

-solo por meses... además, tu altura no te ayuda

Dijo con diversión en su hablar mientras se paraba de su lugar quedando ambas frente a frente viendo que claramente la Tailandesa era más alta que ella por varios centímetros.

-bu-bueno. Cambiando de tema ¿cuando tienes tiempo para juntarnos en la biblioteca después de clases?

-mañana tengo libre

-oh, genial. Nos vemos mañana, Lalisa

-nos vemos mañana, Unnie

Hablo la rubia haciendo énfasis en la última palabra, para luego tomar sus cosas e irse.
Jennie posó una de sus manos en su pecho específicamente sobre el corazón sintiendo como este latía con fuerza y extrañada por aquel sentimiento tomó sus cosas y optó por irse a su hogar.