Capítulo 2

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Cuando volví a casa tras acabar las clases estaba cansada,  mi hermano decidió quedar con un amigo,  aún estaba enojado por lo del accidente del café esta mañana.

Decidí coger mi celular y entrar en instagram, la verdad, estaba muy aburrida.
Un ratito después me fui a dar una ducha.

Estaba con mi portátil mirando si había alguna  plaza de trabajo cerca,  también estaba buscando un piso,  pero primero iba el trabajo, un trabajo a tiempo parcial. Ya que aún no tenía los dieciocho, es decir era menor de edad,  y no quería comprometerme a un trabajo de "honra" es decir,  algo que no sea de compromiso, aun tengo que sacar mis estudios.

Me pasé un buen rato buscando, hasta que encontré una plaza,  era trabajar en un supermercado.

De la nada empezaron a sonar pequeños golpes en un cristal,  eran leves,  nada bruscos. Sonaba en el balcón de mi habitación. Al ver quién era me quedé petrificada,  también algo enojada.

Me dispuse a abrir la puerta del balcón, era Jayre. ¿cómo entró?  ¿por qué lloraba? ¿cómo supo donde vivo? ¿DE DONDE SALIÓ?
Un millón de preguntas inundaban mi cabeza.

Cayó al suelo de rodillas. Sus lágrimas corrían por sus mejillas su pelo estaba despeinado, sus ojos rojos de llorar...

Me puse en el suelo delante de él. Nuestras miradas se cruzaron sin decir palabra, era incómodo pero a la vez me partía el corazón verlo así. Me dispuse a cerrar la puerta y Jayre me tomó del brazo sin dejar que me levantara. Me abrazó con fuerza,  pero sin hacerme daño, se lo devolví, era un abrazo cálido y reconfortante.

Sus lágrimas aún caían pero no tantas como al principio. Cuando me fije que mas o menos se había calmado lo mire, nuestras miradas se volvían a encontrar.

Me levanté para cerrar la puerta y me di cuenta de que él se sentó en mi cama. Le sonreí de una forma cálida,  me la devolvió.

-¿Que pasó Jayre? - Le pregunte sentándome en la cama. Su mirada no tenía el brillo de esta mañana,  se puede decir que su mirada estaba apagada, jugaba con sus manos nervioso.

-Esto... Pro-problemas- respondió tartamudeando y bajando la mirada. Estuvimos en silencio durante lo que me pareció una eternidad.

-¿Por qué cerraste con seguro? - me pregunta rompiendo el silencio. No quería responderle.

-¿Cómo sabes dónde vivo? - Le pregunté para evadir su pregunta.

-No me respondiste- Pude ver como se puso serio y me miraba,  por dios esos ojazos me volvían LOCA, espera... ¿Que mierda acabo de decir?

-Jayre... Te lo digo si salimos de aquí- Se dio cuenta de que no estaba cómoda y miró hacia donde estaba mi portátil y no dijo nada.

-Eres misteriosa Tiff-Me sonríe de una forma en la cual desprendía confianza.-Aun así no tienes que decirme- me vuelve a sonreír

-Es complicado... me puedes esperar aquí un momento, no tardo.-Salí de la habitación y me asomé por la escalera, mi padre estaba dormido, con cervezas a su alrededor,  cómo esta mañana.

Tenía que salir de ahí con Jayre antes de que despertara mi padre. ¡que frustrante!

Volví a mi habitación y le hice una señal para que viniera conmigo.

Al pasar al lado de mi padre Jayre se dio cuenta el porqué de la habitación, y me cogió de la mano,  como muestra de afecto,  le sonreí.

Nos fuimos a un parque para poder hablar.

-Siento que hayas visto aquello- Baje la mirada. Lo dije con un tono... ¿desganado? ¿un tono deprimido? No sé la verdad.

Jayre me cogió del mentón haciendo que lo mirara.

-Tranquila Tiff-Me sonrió y se fue acercando despacio. Sin darme cuenta nuestros labios se estaban rozando fundiéndose en un beso,  un beso cálido con necesidad.

Nos separamos despacio,  no me imagino lo roja que estaba, él sólo me miró con una sonrisa.

-L-Lo siento- me disculpe

-¿Por qué te disculpas si fui yo quien te ha besado?

-No... No lo sé- El sólo rió. - Jayre... Respóndeme a la pregunta que te hice.

-¿Cuál muñeca? - Me guiña un ojo y se acerca un poquito más

-¿Como supiste donde vivo? ¿Cómo llegaste a mi balcón? ¿Porqué me besaste? ¿que intenciones tienes? -

-Joder Tiff,  parece un interrogatorio-. Reímos

-No evites mis preguntas-El me sonríe. Y me agarra de la mano.

-Tiff, se donde vives porque tu hermano me lo dijo, llegué allí porque mi balcón da justamente delante del tuyo. No tengo malas intenciones contigo Tiff.

-Ah... Eso explica varias cosas... No me has respondido a lo del beso.- Jayre se acerca un poco más,  aún agarrándome de la mano.

-Tiffani... Me gustas.- Me sonroje cuando me dijo eso.-Y... Si me dices de tu vida yo te digo... El porque lloraba.

-Jayre...  Podemos ir a alguna parte que... Sea mas tranquila.- me mira y asiente.
-Vamos a mi casa,  ahora no hay nadie.-Asiento con la cabeza.

Cuando llegamos a su casa,  vamos a su habitación y ahí empezamos a hablar.

-Venga Tiff,  di-Me sonríe y me agarra la mano, le sonrío.

-Emm... Mi madre nos abandono cuando tenía mas o menos 3 añis,  desde entonces siempre me cuida mi hermano y mi padre sólo bebe,  y es muy... Bruto...-Jayre me aprieta la mano,  pero sin hacerme daño.-Y pues estaba buscando un trabajo a tiempo parcial para poder mudarme... Ya no lo aguanto.- Jayre se queda mirándome sin decir nada.

-Lo siento no sabía-.Se disculpó Jayre.

-Bueno,  tu turno,  ¿por que llorabas? - Me acerco a el.

-Bueno... Es que...  Mi madre,  ha muerto.-Me quedé helada.

Cuando me di cuenta estaba Jayre llorando; me senté en su regazo y se podia ver cómo se sorprendió.

-¡Vaya! Señorita.-Dijo con un tono burlón. Alcé la vista al cielo.

Noto como alguien entra en la casa de él. Y su mirada se apaga.
¿quien sería? Jayre  me abraza,  yo solamente me apoyo en su hombro.

-Tiff,  vamos a saltar a tu balcón.- Me mira decidido.

-¿estas de coña no?-Le miro asustada.

-No,  solo agárrate.- Me sube a su espalda y se prepara para saltar.
Cerré los ojos ya que tenia miedo. Me deja en mi cama y se sienta al lado.

-Entonces qué hacemos-Me pregunta mirándome a los ojos.

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⏰ Última actualización: Jul 08, 2019 ⏰

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