-Y por todo este cariño que te tenemos, Finn-dijo mi padre, radiante con su traje negro que fue hecho especialmente para esta ocasión -queremos que formes oficialmente parte de esta familia. Así que este es nuestro regalo de cumpleaños,la mano de nu...
-¡Papá, me casare con Adelaine! -gritó Asher mientras corría con mi pequeña de la mano y sosteniendo una rosa en la otra, Lucas los seguía desde atrás con un marcado ceño fruncido. Asher, al ver a su padre movió los brazos con energía y botó un vaso con bebida, derramando todo sobre el mantel nuevo.
-Asher, mira lo que hiciste -le regañó Lux. Era divertido ver cómo Jack se comportaba como un niño al lado de su hijo, haciendo enojar a Lux.
Hoy era el cumpleaños número 5 de los gemelos y Asher, el hijo de Jack y Lux, había llegado temprano para poder jugar con ellos toda la mañana.
Era extraño estar todos juntos. Al final, Sadie seguía con Caleb, Lux casada con Jack ante un impulso, Sophia era muy amiga de Jaeden aunque todo el mundo sabía que había algo más, y Millie, mi querida prima, al final había logrado vencer la timidez y se quedó con Noah. Era estupendo saber que mis mejores amigos estaban juntos, todos, y que ahora nos visitaran junto a mis padres y mis hermanas en el cumpleaños de Lucas y Adelaine.
-¡Papá! -volvió a gritar Asher y esta vez lanzó un pedazo de pastel contra el rostro de Jack. Finn estalló en carcajadas, agradeciendo que Adelaine fuera un poco más calmada y no una revoltosa como Asher.
-¡Asher Grazer! -exclamó Jack. Su grito provocó que la pequeña pareja que teníamos delante diera un pequeño brinco hacia atrás y soltaran sus mano que antes estaban unidas.
-Lo siento, yo solo quería...- comenzo Asher apenado, sin embargo Lucas no lo dejo terminar.
-¡Intente detenerlos!- bramó enojado. -pero Ade dijo que ella también se quería casar con el-.
-¿Ya ves lo que haces, Jack? -le regañó Noah-. Eres un desconsiderado, acabas de arruinar la boda de tu hijo y tú sobrina.
-No seas tan cruel, Noah -replicó Jack.
Mientras ellos seguían discutiendo, me dedique a observar a mis pequeños hijos. Adelaine, seguía teniendo sus mejillas sonrojadas como la primera vez que la ví, y unas pequeñas pecas se comenzaban a asomar en ellas, Lucas por otro lado, tenía un cabello muy rizado, igual al que tenía Finn de niño. Era sorprendente como cada vez ambos se parecían más a Finn.
Eran demasiadas coincidencias, e incluso llegué a preguntarle a Finn si no me había engañado con alguien, porque los gemelos eran su vivo reflejo. Pero siempre él me respondía que jamás se atrevería a mirar a otra mujer cuando estuvo más de la mitad de su vida enamorado de mí. Podrían pasar los años, pero ese lado cursi y romántico de Finn, me temía, que no se iría jamás. Aunque en parte me alegraba, eso significaba una discusión diaria, y una reconciliación también.
P
ero sin duda, lo que más me gustaba, era cuando al final él me decía que no tenía ojos para nadie más porque me amaba demasiado, y también a sus hijos, y no se atrevía a destruir la felicidad que tanto le costó construir.
Era un romántico sin causa ni solución.
-¡Las velas! -gritó de pronto Isabella. Ver a mi hermana pequeña, ya adolescente casi adulta, era divertido, porque aún no podía quitarme de la cabeza esa vez que nos ayudó a mí y a Wyatt a saber que Finn estaba celoso. Extrañaba esos años, pero también estaba emocionada por los que vendrían. Si me ponía a recordar, habíamos cometido demasiadas locuras jóvenes, más jóvenes que ahora.
Era una exageradad e histérica, me arrepiento de haberme comportando tan fría el cumpleaños de Finn y mostrarme diferente ante su declaración, me arrepentía demasiado, por eso, trataba de hacer lo mejor para él siempre. Porque le amaba y nunca me había sentido tan segura de algo.
Colocaron las velas en el pastel y cantamos el cumpleaños feliz, Adelaide no parecía emocionada, seguía algo asustada por todas las personas a su alrededor, ella estaba acostumbrada a mi presencia la mayor parte del día, a Finn por las tardes cuando llegaba del trabajo y de Nana y Asesino, nuestras mascotas. Sin embargo, Lucas parecía que amaba ser el centro de atención, tenía una amplia sonrisa y daba pequeños saltitos al ver a toda esa gente frente a el.
Ambos soplaron las velas al mismo tiempo, y Jack estampó el rostro de Finn en el pastel. Lux estaba al borde del colapso, Wyatt y Noah no hacían más que reírse, mientras Caleb intentaba limpiar a Finn.
Dejé a los gemelos con Asher para que jugara, Adelaine y el se llevaban bastante bien y eso no le agradaba para nada a Finn, consideraba a Asher como una amenaza. Decía que cuando creciera el sería quien le quitaba tiempo de su hija. Un padre celoso y esposo también.
Miré a todos mientras comían pastel, y de repente, Finn me atrapó en sus brazos y me apartó hasta nuestra habitación.
-¿Qué sucede? -inquirí, sentándome en la cama.
-Sabes, no lo hacemos tan mal como padres, ¿no lo crees?
-Pff... tú eres un súper papá, así que supongo que no -sonrió de medio lado y se arrodillo frente a mí.
Me besó en los labios, con dulzura y me recordó esa vez en que me besó el día que comenzó todo esta locura. La diferencia, es que la primera vez me obligué a reprimirme por la rabia que sentía, pero ahora, dejé que mis labios respondieran por mí y se fundieran con el aliento de Finn.
-Estaba pensado... que los gemelos se podrían sentir algo solos... -murmuró contra mi oído cuando nos dejamos de besar. Lo miré por unos segundos y sonreí como tantas otra veces. Sabía de lo que estaba hablando.
-Bien, pero que esta vez no se parezcan a ti, o de verdad comenzaré a sospechar que me engañas -el río por lo bajo y me volvió a besar, esta vez, como si el mundo se fuera a acabar.
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Hey.... -se esconde, pues sabe que no ha actualizado en meses y probablemente las lectoras estén molestas- Lo se, lo sé. Eh estado desaparecida estos meses y la verdad es que no tengo una escusa, solo quiero decirles que lo lamento y que a partir de ahora estaré más activa y vendrán más historias.
En fin, ¿Les gustó el capitulo? Espero que sí :'))
PMM ESTA APUNTO DE TERMINAR.
Asdfghklñ, bueno nos leeremos luego mis preciosas lectoras.
