Heterosexualidad ── MinKey (Pausada)

❛ Capítulo XVII ❜

        
          
           
             
          
         
—Yoon-Ah —le llamó el moreno, observando con atención la linda figura de la chica.

Ella alzó la vista para verlo, invitandolo a sentarse y este obedeció, colocándose frente a la castaña.
Le pasó el menú, pero MinHo negó de un lado a otro con su cabeza, ya que está sería una salida breve, porque ya estaba decidido.

—Solo quiero hablar contigo —su voz fue tan seria, que la joven no dudo en poner su total atención sobre él.

—¿Ha ocurrido algo, Minnie? ¿Estás bien? ¿Tú familia está bien? —de inmediato lo lleno de preguntas, mostrando su expresión llena de angustia.

YoonA siempre se había preocupado por él y por supuesto que Choi la adoraba, pero ya no cómo antes.
Se odiaba internamente por tener que hacer esto después de tantos años junto a ella, porque de verdad era una chica maravillosa y sus recuerdos no los cambiaría por nada, pero no podía seguir pretendiendo ser el mismo hombre enamorado.

MinHo negó de un lado a otro y liberó un suspiro, por otro lado, las delicadas facciones de la castaña se relajaron en un instante.
Los labios del moreno se entreabrieron, intentando pronunciar las palabras correctas y formando diversas oraciones en su mente, porque a pesar de todo, no quería herirla, porque ella no merecía eso bajo ningún motivo.

—No es eso. Tiene que ver conmigo, YoonA —torció sus labios y apretó las manos, ganándose una mirada confundida por parte de ella—. Yo...

—Quieres terminar, ¿No es así?

La deducción tan rápida y repentina por parte de su aún novia lo tomó por sorpresa a él, tal vez cómo si fuera Yoon-Ah quien estuviera a punto de dejarlo.

Sus palabras se atoraron en su garganta y no supo que decir, limitandose a dar un asentimiento mientras ella mostraba una sonrisa suave, sosteniendo su taza de café.

—Últimamente estabas algo distante y hablábamos poco —su sonrisa era suave, pero era posible apreciar lo triste que se hallaba su dulce mirada—. Es imposible que tú estuvieras engañandome, así que lo más obvio era que ibas a dejarme, Min. Tal vez suena a una deducción apresurada, pero te conozco lo suficiente.

Su manera de decirlo era dolorosa y de algún modo le hacían sentir culpable, pero sabía que la chica jamás diría algo con esas intenciones.
Se reciminó mentalmente por hacerle eso, ya que la castaña no lo merecía en absoluto, pero no podía seguir fingiendo que aún la amaba cuándo no era así, porque nada podría ser igual.

—Lo siento, yo...

—Está bien —le cortó de golpe y él agachó la vista—. Oye —rio cómo pudo pese al dolor en su pecho, haciendo que la mirase de nuevo—. No te odio, Min.

MinHo hizo el mejor intento por sonreír, enseñando una sonrisa débil y suave. Los ojos de la joven brillaban en un intento de tragarse el llanto, porque no deseaba derramar lágrimas delante de él hombre que ama con todo su corazón.
Su pequeña mano apretó la morena, intentando demostrarle seguridad y una especie de tranquilidad que Choi no pudo tragarse tan fácilmente.

—Yo aún te amo, pero las relaciones jamás funcionan si no es mutuo; si tú dejaste de sentir el mismo amor por mi, es justo que no sigamos más.

Dolía, dolía mucho escucharla decir aquello por alguna inexplicable razón, porque era sincera y tenía toda la razón en cada palabra que salía de sus rosados labios, pero no era la reacción que MinHo esperaba por parte de ella o la reacción conocida por todos.
Cualquiera hubiera imaginado que tal vez haría un gran drama, una rabieta o lloraría a todo pulmón, pero solo estaba ahí, sonriendo con suavidad y resistiendo sus lágrimas que amenazaban con caer.