Dreams

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"Another one Bites The dust" resonaba por la sala de la casa de la familia Amajiki, ambos chicos se encontraban en la alfombra de la sala con la vista al techo, con sus cuerpos apuntando hacia distintas direcciones pero el rostro al lado del otro para poder oír bien lo que decían, con un par de caricias en el rostro y besos en las mejillas entre medio, nada que no hubiesen hecho antes como amigos.

— Entonces trabajarás en la compañía donde está Fatgum al terminar la escuela — El pelinegro asintió jugando con la mano de su rubio amigo. — Es un buen plan ¿Red Riot también?

— Creo que si, aunque quizás Kirishima-kun quiera conversar sobre eso con su novio, no lo sé — Los dedos de Mirio se abrieron capturando la mano de Tamaki. — ¿Que harás tú?

La canción cambió, un piano que Tamaki reconocería en cualquier parte y que fue la escusa perfecta de Mirio para cambiar el tema.

When i was

A Young boy

My father

Took me into The city

— ¿Sigues escuchando eso? Creí que tú etapa emo había pasado — Soltó una corta risa, el rostro sonrojado de su amigo se giró a una distancia que cualquier otra persona pensaría era demasiado corta pero que para ellos ya era más que habitual. — Además llevan años separados

— Que no era emo, además su música es buena — Hizo un puchero con los labios. — Y no me cambies de tema, es importante

El rostro del rubio era indescifrable, una mezcla entre pánico y tristeza, gesto que normalmente Tamaki tenía, se veía tan extraño en el. El pelinegro sabía porqué evitaba hablar de ello, desde que había perdido su quirk parecía estar a la deriva totalmente.

— No lo se, Tamaki, no lo sé — No sabía si era su imaginación o algo parecido pero Amajiki sintió que el agarre en su mano se hacía más duro. — Tenía mi vida planificada desde hace tanto años, tenía todo bajo control, solo debía apegarme al plan y estaría bien, ahora no sé qué haré, no se a que me dedicaré y es que... — Se tomó un momento para desviar la mirada y tomar una profunda respiración. — Si no soy un héroe no soy nada... 

El azabache sintió como su corazón se estrujaba al oír aquello, era como ver rasgos propios en una persona tan brillante que realmente no quedaba bien, le dolía percatarse de que su sol se estaba apagando. Tamaki se levantó quedando sentado con la espalda recargada en el sofá junto a ellos, Mirio le siguió a los pocos segundos recargando su cabeza en su hombro.

— Tengo que comenzar todo desde cero, dieciocho años de expectativa derrumbados, dieciocho años de planificación, como haber sacado el final malo de algún juego — Mirio volvió a buscar la mano de Tamaki para tener algo en lo que aferrarse. — Comenzar todo de nuevo me tomará tiempo, mucho tiempo— Sintió el peso junto a él irse al mismo tiempo que veía a Tamaki ponerse junto a él tomándole firmemente del rostro con una determinación tan poco usual en el. — ¿Tamaki?

— Lo se, es aterrador derrumbar todas las bases que tenías y comenzar con algo completamente distinto... P-Pero — El pelinegro parecía trabarse con sus propias palabras, su nerviosismo innato y repentina vergüenza al notar lo que hacía no le ayudaban en nada. — Eres tú, sin importar si eres un héroe o no tienes un futuro prometedor y... Y juro que sin importar la decisión que tomes estaré contigo, además, la esperanza no está completamente pérdida, el héroe puede regresar y brillar como siempre has hecho

Esas palabras fueron el detonante para que Togata estrechara el delgado cuerpo de su mejor amigo en sus brazos, sabía que podría contar con el sin importar que tan estancado esté, maldición, Tamaki siempre decía lo brillante de era, pero no estaba consciente de que no podría lograr nada sin él, sólo podía dar lo mejor porque su mejor amigo estaba a su lado.

— Te quiero, te quiero tanto — Su voz se escuchaba ahogada contra el pecho de Tamaki (el cual estaba en pánico al creer que Mirio podría oír los acelerados latidos de su corazón).

— Yo también, te quiero tanto que siento que voy a morir — Murmuró con voz algo temblorosa, dejar en claro sus sentimientos no era algo a lo que estuviese acostumbrado. Además se que la canción anterior había terminado dando lugar a una que no escuchaba hace tiempo, pero que le dejaba algo avergonzado por la letra.

Daft punk no era de mucha ayuda.

— Tamaki

— ¿Si?

— Estoy enamorado de ti

El azabache parpadeó un par de veces ¿Había oído bien u otra vez se estaba dejando llevar por sus delirios? Ante su silencio Mirio se separó del abrazo tomándolo por los hombros con una mirada firme, muy distinta a la que tenía segundos antes.

— ¿Acaso dijiste que...— El rubio asintió con una gran sonrisa en el rostro, Tamaki sintió el suyo arder.

— Dijiste que sin importar la decisión que tomara estarías conmigo ¿No es así? ¿Porqué no hacer la espera un poco más llevadera? — El menor jugó un poco con un mechón de su cabello sintiéndose repentinamente pequeño y avergonzado. — Quisiera tenerte por siempre conmigo pero quiero saber qué opinas tú

— La luna no puede brillar sin el sol ¿Verdad?— Amajiki seguía sin mirarle a la cara cosa que, lejos de ponerlo inseguro, le daban más ganas de insistir con su propuesta. — Siempre soñé con poder estar contigo, siendo sólo tu compañero o amigo, pero esto, es más de lo que imaginaba

— ¿Y eso es malo? — Tamaki negó varias veces.— Mi sueño de ser héroe todavía no se derrumba, siempre y cuando tenga a mi SunEater conmigo se que estaremos bien — Sin dejar que el azabache respondiera le robó un corto beso en los labios y ambos se fundieron en otro abrazo, mucho más íntimo que el anterior pues sus corazón ya se hallaban resueltos y con mucha más tranquilidad sobre su futuro.

— Hey Tamaki, si te dedico esta canción ¿Serías mi novio?

— ¿"Something about us"? ¿Por qué? — El rubio rodó los ojos y se puso de pie jalando del brazo a Tamaki para que lo siguiera, una vez ambos se levantaron Mirio pasó su brazo por la cintura del menor y juntó ambas frentes.

La letra se explicaba sola, para un par de adolescentes con sueños volviéndose a formar no había mejor canción para sellar el momento.

Bueno, quizás la respuesta de Tamaki mató un poco el romanticismo, un fuerte "Si" y ambos cuerpos volviendo a caer al suelo porque el menor se había arrojado a los brazo de su nuevo novio. 





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Por alguna razón no estoy del todo conforme con este

Idilio #MiriTama week 2k19Donde viven las historias. Descúbrelo ahora