2 | 10 | Comencemos

64 6 0
                                    

Se escuchó el sonido de un celular. Mis ojos y los de Jace se detuvieron en su celular sobre mi cama.

El nombre "Geo" estaba en la pantalla.

—¿No piensas contestar? —le pregunté a Jace.

—Claro. —Jace presionó el botón verde y después tomó el celular para ponerlo en su oreja—. ¿Sí?... No estoy en casa... Te los puedo entregar mañana durante práctica... Ya te dije que no. —Cortó la llamada y guardó su celular en su bolsillo. Sus ojos me miraron y sus cejas se elevaron un poco—. ¿Cuál es tu idea?

Mi corazón comenzó a acelerarse. Pronto comencé a sentir mis manos sudar de lo nerviosa que estaba. Aún no sabía cómo hacer esto. Ni si quiera estaba segura si él estaría dispuesto a ayudarme o no.

—¿Qué dices si dejo que tú ganes esa apuesta?

Lentamente Jace fue frunciendo sus cejas—. ¿A qué te refieres? —Me quedé en silencio pensando en la mejor manera de explicarle mi plan—. ¿Quieres que seamos novios?

—Algo así. —Aparté la mirada de él para ver mis manos y distraerme un poco—. ¿Te molestaría pretender que somos novios? —Levanté la mirada para ver su reacción.

Jace me miraba sorprendido pero relajado a la vez. Sus ojos se desviaron de mí para ver hacia otra parte de mi habitación.

—¿Piensas regresar con June? —me preguntó sin mirarme.

—No lo creo. —Suspiré—. Blaise tiene razón. Si regreso con June y él continúa poniéndose celoso de todo mundo, no creo poder soportarlo. Desde lo que sucedió con Brayden, June ya no confía en mí y hemos tenido problemas con eso. Si esto continuará en el futuro, no tiene caso seguir juntos.

—¿Estas segura? —Yo asentí. Jace suspiró. Su dedos pasaron por su cabello para acomodarlo en su lugar y después comenzó a rascar su nuca un tanto nervioso—. No lo sé, Rayne.

—Si no quieres, está bien. Yo entiendo que puede ser difícil fingir amor por alguien al que ves como a tu amigo o amiga.

—Eso es lo de menos. —Volvió a suspirar—. Te digo que yo no quiero ese dinero. No me interesa ganar. Te estaría usando y yo no estoy de acuerdo.

—Jace, ambos nos estaríamos usando pero sería para poder darle fin a esa apuesta. Si hay alguien en quien confío para acercarse a mí y pretender ser mi novio eres tú. Te conozco de hace un mes y sé que es muy poco tiempo pero al menos es mejor que nada. Yo no sé quiénes son esos otros chicos y lo lejos que estarían dispuestos a llegar con tal de ganar ese dinero. Sabes que yo no confío en nadie. Es más, desde el momento en que te conocí me dió mucha seguridad saber que tú no estabas interesado en mí como los demás. Hasta Blaise y los chicos confían en ti y es por eso que te hemos aceptado en nuestro círculo de amigos.

Jace se tomó unos segundos para pensar antes de responder—. Bien. Pero yo no quiero ese dinero para mí.

—Podemos pensar en qué hacer con él luego. Ahora lo que necesitamos hacer es pensar en lo que haremos para que mi plan funcione. No podemos llegar a la escuela mañana y decir que ya somos novios. Todos sospecharán que algo anda mal.

—Entonces vayamos lento. Poco a poco podemos hacer creer a los demás que tú me estás dejando acercarme más y más a ti.

—Y no podemos decirle a nadie, ni siquiera a mis amigos o los tuyos, que estamos pretendiendo. Si alguien llegara a escucharlos hablar sobre nuestra relación fingida, la noticia se esparcirá por la escuela y entonces seremos el nuevo tema de qué hablar durante un largo tiempo. Además de que la apuesta podría no terminar.

The Truth Behind LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora