curiosidad.
(Del lat. curiosĭtas, -ātis).
1. f. Deseo de saber o averiguar alguien lo que no le concierne.
2. f. Vicio que lleva a alguien a inquirir lo que no debiera importarle.
(...)
4. f. Cuidado de hacer algo con primor.
5. f. Cosa curiosa o primorosa.
Ejm: "La curiosidad mató al gato"
---
Michael,
Tu cabeza descansaba sobre mi pecho. Habíamos acabado los dos tumbados sobre la hierba, mirando como la luz se colaba entre las ramas. Estuvimos en silencio un rato, y solo me di cuenta cuando vi la brisa revolver tu pelo. Sería que ya estaba demasiado acostumbrado. Eso me hizo pensar que hacía mucho tiempo que no oía el sonido del viento. Hacía mucho tiempo que no escuchaba nada. Así que quise escucharte a ti.
"¿Y tu?"
Levantaste la mirada. Torciste un poco la cabeza y ronroneaste un "¿Hmmm?" devolviéndome la pregunta.
"Quiero saber algo sobre tí."
"No hay mucho, la verdad. Tengo 18 años, mi nombre completo es Michael Gordon Clifford y antes de que lo digas, no, no pienso teñirme el pelo de rojo... Otra vez." Dijiste incorpórandote.
"¿Y que porque estas aquí?"
"Estoy aquí porque tengo que estar aquí"
"¿Qué se supone que significa eso?"
"Significa que pertenezco aquí. Mi familia me quiere aquí, los medicos me quieren aquí... A nadie le importa una mierda lo que yo quiera. Pertenezco aquí."
Sabía que no debía seguir presionando. El tono de tu voz estaba creciendo más y más irascible, pero la curiosidad pudo conmigo.
"¿Entonces no te pasa nada?"
"No, nada" Dejalo, Luke.
"¿Nada de nada?"
"Nada. De. Nada." Tu tono de voz me gritaba que me callase. Te habías cruzado de brazos y fruncido el ceño. No pude evitarlo.
"¿Qué te diagnosticaron?"
"Bueno, ¿Y a tí? ¿Preguntitis aguda? Que sepas que para estar sordo (Encomillaste con los dedos) hablas por los codos."
Lo soltaste sin más. No era para tanto, ni mucho menos, pero me dolió de todas formas. Sonaste tan... Despectivo. Me hizo sentir vulberable. Te había hecho enfadar, igual que hacía enfadar a todo el mundo.
"Eh, oye, no lo decía enserio" Añadiste al verme. Había bajado la vista porque no me atrevía a mirarte. Debía de parecer idiota, como un niño pequeño al que le han quitado un juguete.
"Anda, ven aquí" Dijiste más calmado, acercándote a mí y abrazándome. "Ya está bien de preguntas clínicas, ¿vale?, que para eso están los médicos."
Hay gente que sabe abrazar y gente que no. Tu eres el rey de los primeros.
Fue un abrazo de oso.
Espachurraste mi mejilla contra la tuya y me rodeaste con los brazos. Te miré y vi que tenías los ojos cerrados y que sonreías por la comisura de los labios. Se te veía feliz, como si no quisieses soltarme nunca. No quería que me soltases nunca. Pero lo hiciste.
Aflojaste el abrazo, abriste los ojos y apartaste nuestras mejillas. No me había dado cuenta de que había empezado a hacer frío hasta entonces.
"¿Gatos o perros?"
"¿Como dices?"
"Te estoy preguntando que prefieres. ¿Qué?, no es una pregunta clínica"
Sonreiste un poco, yo te sonreí de vuelta y entonces tú sonreiste todavía más. Negaste con la cabeza y apoyaste tu cabeza en mi hombro. Te revolví un poco el pelo. Estuvimos callados durante un tiempo hasta que me acerqué a tu oido y te aparté el pelo. Levantaste la mirada y enarcaste las cejas. Sonreí y me incliné para susurrarte. Podía haber dicho tantas cosas... Me gusta la manera en la que ne miras. Me gusta cuando me sonries. El pelo revuelto te queda especialmente sexy. Pero al final me decanté por la más importante de todas:
"¿Entonces gatos o perros?"

ESTÁS LEYENDO
HEAR ME OUT // MUKE
Fanfiction"Estoy sordo, Michael. Estoy sordo y sin embargo puedo oir tu voz. Puedo oirte gritando mi nombre. Puedo oir el aire escapar de tu boca cuando suspiras. Michael, puedo oir el ritmo de tu pulso. Y además estoy sordo. Como es que puedo oirte a tí, y s...