Un día en la piscina

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Tumbada en una tumbona, tomando el sol escuchando música tranquilamente, cerca de la piscina lo único que no hacía perfecto ese momento era tener que escuchar y ver como Erik se besuqueaba con la loca de su novia, lo peor de todo es que la bruja se había querido poner en la tumbona de enfrente.

- ¿Lidia no te cae bien verdad? –me preguntó Maddy que se había colocado en la tumbona de al lado.

- No –le respondí instantáneamente.

- Ya pues no eres la única

- ¿Cómo?

- A mí no me cae bien se cree la mejor del mundo o algo así y siempre que me habla es para contarme lo genial que es, encima solo es amable con Erik, si te soy sincera no se que ha visto mi hermano en ella

- Maddy, las brujas siempre te hechizan pero no te enamoran.

- Ya pues Erik parece estar enamorado de ella... -tal vez Maddy tenía razón y Erik estaba enamorado de Lidia pero yo en el fondo sabía que no era así.

- Bueno pues no te vas a creer lo que me ha dicho en el baño la psicópata esta, me ha amenazado. Porque no le gusta que pase tanto tiempo con Erik, según ella dice que yo jugueteo con él, pero es que yo soy monísima y juguetear me sale solo.

- Te tiene miedo...

- Lo sé, la cabrona no sabe donde se ha metido –dije y sonreí maliciosamente.

- Sabes me encantaría que tu salieses con mi hermano y no ella.

- ¿yo con tu hermano? Sería una relación curiosa –dije y me reí.

- Pero muy bonita -dijo y me sonrío.

- Yo no lo veo –dije y miré a Erik, este se separó de Lidia y se dio cuenta de que le estaba mirando y me miró.

Me levante y fui a donde Bob estaba con la barbacoa, que bien olía, en Irlanda no hacemos barbacoa casi nunca. Bob ya tenía unas hamburguesas preparadas, perritos calientes y ahora estaba haciendo costillas.

- Bob ¿falta mucho para comer?-le pregunte mientras jugaba con la pajita se su mojito.

- No, pero si quieres puedes ir cogiendo esto y dejarlo en la mesa, dile a la parejita que te ayude- eso ultimo note que lo decía con un poco de rabia.

- Bob no te conozco prácticamente, pero sé que, lo de parejita iba con segundas.

- Veras es que Lidia no me cae bien, es una desagradecida y una pija –dijo mientras doraba las costillas con una salsa.

- Uy..., Bob esa boca que la novia de tu hijo –dije con tono de autoridad.

- Lo siento pero no me cae bien ni a mí ni a nadie.

- ¿ a Clara tampoco? –pregunte divertida.

- A clara leda asco –dijo y se rió.

- ¿ y qué hace aquí? Si a nadie la cae bien, mira Bob no te lo tomes a mal pero eres un blandengue- dije y le di una palmadita en la espalda, me dirigí a los novios y paré delante de ellos –parejita, me ayudáis a llevar la comida a la mesa.

- Luego –dijo Lidia.

- Cariño, no era una pregunta, así que mueve tu mini culo y coge una bandeja de comida –dije como si fuese una madre, Erik se me quedo mirando igual de sorprendido que Lidia – Y tu Erik levántate ya-dije y me marche a por una bandeja de hamburguesas, las deje en la mesa del comedor y me fui a tumbar en mi tumbona, pero alguien me agarró de la muñeca.

Mi amor de intercambio(Cooper#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora