Sophie es una chica Irlandesa de 17 años , que vive con sus 2 padres en el centro de Dublín. La relación que mantiene con su madre es mediocre.
En su último año de instituto sus padres deciden mandarla de intercambio a Australia . La idea no le conv...
Ya se había hecho de noche y los padre de Erik y Maddy aun seguían de viaje de negocios, con lo cual para cenar Erik invito a su novia Lidia y a su mejor amigo Alex, la cena iba a estar intensita y Maddy se iba a traer a su "amigo" James Rey. Yo por mi parte invite al señor de las pizzas para que nos hiciese la cena. Esta familia a veces me estresaba de una manera...
Primero llego la repelente de Lidia, que como el perrito faldero que es Erik fue a abrirla nada más que sonara el timbre. Luego llego James Rey que para mi sorpresa era bastante guapo, tenía el pelo rizado rubio no my largo ,unos ojos color avellana y unas pecas por la zona de la nariz y como era de esperar era bastante alto.
Maddy lo invito a sentarse en la mesa donde estaban las pizzas y cuando le vi más de cerca deje el móvil ,le mire y le dedique una sonrisa picara, este me miro y nervioso aparto la mirada de la mía. Me dieron ganas de vacilarle así que...lo hice.
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- Hola guapo –dije y me senté encima de la mesa con cuidado de no tirar nada- tu debes de ser James Rey.
- Si y tu...eres... -empezó a decir algo nervioso.
- Sophie Cooper.
- Si lo sabía todo el mundo empezó a hablar de ti en la fiesta y aparte Maddy ya me había hablado de ti.
- ¿A que soy mucho más guapa en persona?
- Em...no se
- ¿es que no te parezco guapa?-le pregunte de forma exagerada.
- Si o sea..si eres guapa.
- Oye tu que a ti te gusta mi amiga, aunque es normal q
- Pero
- Calla, déjame terminar, decía que es normal que una chica como yo te parezca guapa-suspiro – bueno y que eres el nuevo novio de Maddy
- SOPHIE –grito Maddy al oír eso.
- Dime cariño-dije sonriente
- Puedes ir a abrir la puerta que acaban de llamar
- Claro que si –dije y le di un toquecito en la nariz.
Con paso ligero fui hacia la puerta y la abrí para mi sorpresa bueno en verdad no...era mi lengua larga Alex.
- Hombre...cuanto tiempo Alexitoo-dije y le di un abrazo y dos besos él se quedo parado en la entrada de piedra mirándome impactado –vas a pasar ¿o qué?
- Si ya paso –dijo y entro corriendo.
Como ya estábamos todos comenzamos a cenar, ya era hora porque tenía un hambre de mil demonios. La cena fue super divertida...na es broma todo fueron silencios incómodos.
Terminamos de cenar todos y fui yo la que me decidí por romper el hielo.
- ¿Qué os parece si hacemos un Karaoke?-dije levantándome de la mesa.
- Qué buena idea Sophie voy a por el –dijo Erik.
- Te acompaño-dijimos Lidia y yo a la vez, Erik nos miro desconcertado.
- Ve tu Lidia –dije y la sonreí
- Si insistes –dijo y se fue del brazo de Erik a por el karaoke.
- Sophie podemos hablar -me dijo Alex al oído, asentí. Me llevo fuera del comedor, cogió aire y bajo la mirada de mis cara al suelo.
- ¿Qué pasa?¿el suelo hoy está muy estrellado?-dije con ironía, entonces levanto la mirada.
- Sophie lo que paso en la fiesta no volverá a pasar te lo aseguro.
- Yo si que te aseguro que no volverá a pasar.
- Entonces...volvemos a empezar de cero.
- Alex yo no soy de ese tipo de chicas, eres un chico muy mono pero con pocas luces, perdiste tu oportunidad ahora estoy interesada en otro.
- No puede ser ese tal James Rey si yo soy más guapo.
- No idiota, yo me refería a tu amigo del alma Erik
- ¿Quéeeee? No...es broma ¿no?
- No .
- Pero, bueno si tiene novia y yo estoy soltero y soy más guapo.
- Lo sé, y en todo lo que has dicho tienes razón.
- Bueno...¡puedo seguir luchando por tu amor?
- Si, si no le cuentas nada a Erik
- Vale –dijo sonriendo –puedes...va es una tontería
- Venga dímelo ya.
- ¿me das un piquito en los labios?¿o me dejas dártelo yo a ti?
- Mejor te lo doy yo a ti que tú tienes la lengua muy larga.
Me acerque a él hasta que nuestras narices chocaron, así de cerca podía sentir la respiración agitada de Alex, me acerque un poco más de forma que nuestros labios se rozasen me incline un poco y Alex cerró los ojos, le di un pico corto pero bien dado, me separe de él y vi que sonreía como un niño pequeño. El beso solo se lo había dado para que dejase de sentirse mal por lo de la fiesta y para asegurarme de que no le contaría nada a Erik. Lo que yo no sabía era que no solo yo y el habíamos estado presentes en el beso...
