One-Shots. © ~Gochi~

~Gris~

"Te necesito"

El sonido de los truenos retumbaban entre las paredes de su habitación, las gotas de agua dulce se deslizaban por el vidrio de su ventana hasta caer en el vacío. De la misma forma en que lo hacían las lágrimas en su rostro. Sus ojos oscuros ya no emitían ningún brillo, y sus labios, en ese momento incapaces de formar una sonrisa. Y el sonido de la lluvia invadía el silencio de aquella solitaria Mansión.

El cielo estaba gris, igual que su corazón.

Se sentía sola, el amor de su vida se había ido a quien sabe donde, la había abandonado. Y todo por su culpa, por su maldita indecisión, por haber dejado que sus dudas e inseguridades la dominaran y no escuchar lo que su corazón gritaba, por tener miedo.

Ahora él no estaba para consolarla, para darle un abrazo como solo él sabia darlos, y el escucharlo decirle que todo estaría bien porque él estaba a su lado. Pero no era así.

Se encontraba sola en aquella casa donde había vivido toda su vida, aunque su familia era muy pequeña, aquella casa siempre había estado plagada de alegría. Y ahora, solo era un lugar vacío y triste. Sin su padre ya nada volvería a ser lo mismo.

Los dos hombres de su vida ya no estaban con ella.

Había llegado hace algunas horas, después de haberse quedado toda la mañana en aquel cementerio donde apenas el día anterior le habían dado la santa sepultura a su padre, la luz de su vida, su confidente, mejor amigo y madre. Se sentía devastada, y el único que podía consolarla no se encontraba allí.

Estaba sola.

Se alejo de la ventana y se recostó en su cama, abrazada a su almohada mientras derramaba más lágrimas.

Había pasado algunos minutos cuando tocaron a la puerta.

-- Señorita Milk. Tiene una visita.

¿Visita? ¿A esa hora? ¿Y con el clima que había afuera? Eso era extraño.

-- No quiero ver ni hablar con nadie, Rubén.

-- Pero Señorita, dice que es por un asunto muy importante. Y que no se irá si no habla con usted.

-- ¡¡No me importa si es importante o quien quiera que sea!! ¡¡Dile que se largue!! ¡¡No quiero ver ni hablar con nadie!! --contestó firme mientras se aferraba más a la almohada.

Solo hubo algunos segundos de silencio cuando escuchó el sonido de la puerta abrirse.

-- Ni siquiera conmigo. --su corazón se aceleró, y un nudo más grande que el que ya tenía en su garganta se formó, de tan solo volver a escuchar su voz causo un estremecimiento que recorrió todo su cuerpo.

Despacio, se levantó de la cama y lo observó a los ojos, le había dado igual entrar a su recámara sin permiso. Más lágrimas cayeron al verlo ahí de pie, con su cabello igual de desastroso, sus ojos oscuros como obsidiana que la observaban con ternura y tristeza, y la saludaba con una sonrisa leve en sus gruesos y rosados labios, vestido de traje negro donde se notaba un poco de humedad en sus hombros a causa de la lluvia.

Sollozó y se lanzó hacia él, el joven la envolvió con fuerza entre sus brazos mientras que ella se desahogaba en su pecho.

Le dolía verla en ese estado, estaba pálida, sus ojos rojos e hinchados por tanto llorar, y sabrá Dios desde cuando no se alimentaba bien, estaba más delgada de lo normal.

Supo en ese instante que no debió haberse alejado de ella, pero su orgullo y enojo había podido más que su voluntad, además, ella le había pedido tiempo y fue lo que hizo, darle tiempo y espacio para que pudiese pensar bien las cosas, al igual que él. La miró a los ojos una vez que ella se calmó y le acarició la mejilla para deshacerse de la humedad que había quedado en ella.

-- Volviste. --murmuró apenas en un hilo de voz.

-- No debí irme, perdón por...

-- No --interrumpió-- soy yo quien debe pedirte perdón. Por no haber tomado una decisión, por dejar que mi inseguridad...

-- No Milk, tu no tienes la culpa de nada. Tenias razón en dudar, quizás y si era algo precipitado, pero nada de eso justifica mi idiotez. No debí irme y abandonarte cuando más lo nesecitabas...

-- No, eso no, ninguno de los dos sabía que esto pasaría.

-- De verdad, lamento lo de tu padre, me enteré apenas ayer por la noche, empaqué lo mas rápido que pude y tome el primer vuelo para acá. No quería dejarte sola...

-- Da igual, lo importante es que estas aquí ahora.

-- Y no volveré a alejarme de ti nunca más. Aún si no aceptas casarte conmigo, no me voy a alejar de ti. --prometió mientras juntaba su frente con la de ella.

-- Tenia miedo en ese momento, no estaba muy segura de estar lista para dar ese paso... Pero si hay algo de lo que estoy completa y totalmente segura es de que, Te amo con cada fibra de mi ser, Goku.

-- Y tú lo eres todo para mi, Milk. Sabes que por ti daría mi vida si de ser necesario. Te amo.

Sin decir más, ambos juntaron sus labios, sellando ese momento con un beso que había sido tan necesitado como agua en el desierto.

~Gris~

Simboliza la indecisión y la ausencia de energía, expresa duda, melancolía y pasividad. El gris neutro es también signo de equilibrio. Es el centro de todo, y suma valores entre el blanco y el negro.

Editado. ✔✔