XV
MORGAN
Tanta información, tantas cosas. La forma en la que Everild hablaba de Shadow era como si estuviera describiendo a alguien completamente diferente y lo era. Aún me resulta increíble como pude enamorarme del cascarón falso que él creó, aún puedo recordar su sonrisa y sus palabras dulces. El Shadow Purasangre parecía tan real para mi. Suspiro y me recuesto contra un árbol.
—¿Mucha información, no?— la voz de Aidan me toma desprevenida, y aparece al otro lado, me sorprende que su rostro es el mismo Aidan de siempre, no Galen, —supuse que te sentirías más cómoda si seguía usando esta apariencia, además, no puedo exponerme por completo por ahora.
—La apariencia no es lo que me importa, ¿quién eres tú realmente, Aidan? ¿El líder mi clan? ¿O un Purificador que debo empezar a conocer desde cero?
Él aprieta sus labios.
—Supongo que soy un poco de ambos. Eso no cambia el hecho de que tú sigas siendo alguien muy importante para mí, Morgan.
—Claro, porque soy la esperanza de derrotar a ese idiota.
Aidan da un paso a mi y sacude su cabeza.
—No— sus ojos azules buscan los míos, —eres alguien importante para mi porque lo eres y punto, no tengo motivos secundarios.
—Eso es tan difícil de creer cuando tantas cosas han sido falsas a mi alrededor. Cada vez que pienso que he llegado a un punto estable donde sé lo que pasa, todo se derrumba de nuevo.
Él se acerca y toma mi mano, entrelazando mis dedos con los suyos. Tenerlo tan cerca me recuerda a todas esas veces que habría muerto porque él se acercara a mi de esta forma en el pasado. Aidan aprieta mi mano.
—Yo soy real.
La seguridad de su voz y el brillo de sus ojos me deja sin aliento un segundo antes de que pueda organizar mis pensamientos.
—Lamento la desconfianza, es solo que el único Purificador que he conocido resultó ser un desgraciado mentiroso, eso ha manchado mis expectativas de acuerdo a Purificadores.
—No todos somos como él.
—Y, ¿cómo somos?— le pregunto porque ahora me doy cuenta de que por primera vez estoy frente a alguien de mi misma especie sabiéndolo. Aidan da un paso atrás y me jala con él al centro del claro entre árboles.
—Mira.
Él me suelta para estirar sus brazos a los lados. Abro mi boca al observar como raíces empiezan a emerger a nuestro alrededor y crecer hasta convertirse en árboles inmensos y frondosos, pasto verde cubre el suelo por completo.
—Somos creadores, Morgan— él me dice al bajar sus manos, —somos una especie buena. Fuimos creados para ayudar, para mejorar este mundo.
—También debemos eliminar criaturas masivamente, no olvides esa parte.
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