El chico que deseaba enamorarse

Cristales y rosas

Un jarrón se cayó de la mesa esparciendo por el suelo las 7 rosas. Oh no. Alguien ha muerto.

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Terminé de rellenar todos los documentos que quedaban para guardarlos en carpetas y guardarlos en el cajón.

Estire mi espalda y apague la luz de la lámpara. Hoy había acabado a las 2 de la mañana , así que me quedaban 4 horas de sueño.

Me levanté y vi el reflejo de alguien en el pasillo. Pensé que sería Jimin por lo que no le di mucha importancia, quizás vaya a la cocina por algo de comer después de un tiempo en aquel estado.

Ahora que recuerdo, hace mucho que no he realizado otra obra. Quizás tenga que esperar un poco para que no vuelva a suceder lo mismo.

- Yoongi ,¿Puedes venir?

La voz de Jimin me resultó raro por un momento, parecía que no tenía miedo de pronunciar mi nombre y mucho menos mandarme algo.

Salí del cuarto y lo vi con una lámpara, como cuando iba por la noche hacia su escondite para que no le pillará su padre. Ahora el llevaba una camisa larga de un color claro que le llegaba hasta sus muslos.

- Quisiera que vinieras para hablar contigo sobre algo.

- Está bien, de que quieres hablar.

- Aquí no será.- el se dio la vuelta  dándome la espalda.

- En que lugar lo haremos entonces.

El se paró y me miró sobre su hombro, con una sonrisa en su rostro.

- Tu ya lo sabes. 

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- Una noche muy hermosa,¿No crees sobrino?

El chico castaño se sentó al lado de su tío y miró hacia el cielo.

- Si tío, perfecta para descansar de tanto jaleo.

- Otra vez tus padres se han peleado- el chico asintió triste.

- Papá llego tarde a casa y mamá se enfadó con el porque casi no está en casa. En una de las veces que papá y mamá discuten escuchó varias veces la palabra infiel y me asomo a la puerta sin que lo noté para ver a mi mamá moviendo una camisa de papá con una marca de pintura.- Su tío lo miraba con pena e intento consolar al niño con unas suaves caricias en su pelo.

- Cuando ocurra eso , solo tienes que ir corriendo a tu cuarto, ponerte tu música favorita y pensar en cosas buenas. A veces estar mucho tiempo en la realidad te agota y tienes que tener una vía de escape. Es lo único que puedo aconsejar te.

- Pero podrías hacer algo más.

- ¿El qué?- miro a su sobrino intentando adivinar lo que le diría.

- Podrías llevarme contigo y así jugar mas.- el pequeño lo miro con ojos brillantes pensando en que su tío aceptaría la propuesta .

- Lo siento, pero no puedo hacerlo,- la mirada del chico cambio de alegría a desilusión en cuestión de momentos.- Sabes que yo no puedo , estoy muy ocupado por causas de mi trabajo y con el poco tiempo que tengo vengo a jugar contigo y lo sabes.