Capítulo 8. 4/4 [Fin del Maratón]

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–¡Yo quiero dos platos de Jjajangmyeon!

–¡Yo tres!

–Jungkook, Jimin, luego no se acaban la comida.

–Pero siempre la llevamos y la comemos después, Jin Hyung. 

–No es cierto Jimin, luego he visto que se la dan a Yeontan, ¿creen que soy tonto y no me doy cuenta o qué?

–Hyung, déjalos. Yo supervisaré que se acaben todo y que no le den nada a Tannie.

–Mmm, no sé si me preocupa más la comida o que tú los supervises, Hobi. 

–¡Oye eso me ofende!, Aunque sea cierto…

–¡Pues sí es cierto no deberías ofenderte Hyung!

–Oye menso, no te metas, ¿no ves que nos está defendiendo?

Y así, comenzaba otra cena normal entre los miembros de BTS, el líder sólo sonreía al escuchar todas las ocurrencias de sus amigos. ¿Cómo podía querer tanto a una bola de babosos?, ¿A caso ARMY alguna vez se preguntaría porqué apoyaban a semejantes seres humanos?, Tal vez…

Mientras los miembros seguían en su rollo, Namjoon alejó a la mesera de la mesa de manera muy sutil y con su bella sonrisa para ordenar por todos, ya que seguían peleando. La chica totalmente hipnotizada no hizo caso alguno de los famosos que hablaban en voz muy alta y muy rápido, ella sólo se fijaba en el famoso guapo y alto que le sonreía tanto. Era bellísimo.

Después de ambos anotar los platillos y las bebidas, la chica trajo las bebidas y los platos en un carrito, sirviendo primero al líder el cual, claro estaba que la ponía demasiado nerviosa y sonrojada.

Todos se dieron cuenta al parecer, menos Namjoon pues se moría de hambre. Después de unos largos minutos y una diferencia notable entre una de las bebidas (que era de tamaño jumbo) los chicos se encontraban comiendo. 

–¿Creenqjdhde quejejfks Taehjyduing esté biensnjgsde?

–Jungkook, ya te dije que no hables con la boca llena, no se te entiende nada y te puedes ahogar. 

–Además que me estás escupiendo todo, torpe. 

–Perdona Jimin-Ssi, es que ésta comida está deliciosa – dijo el menor de todos antes de volver a llenar su boca con el pollo picante y los fideos negros que tanto le gustaban.

–¡Y no usas honoríficos!, ¿Desde cuándo este niño se hizo tan rebelde?

–Desde que se crió con nosotros, Jin Hyung – contestó Hoseok en forma burlona, pues tenía razón. 

–Agh, esto es culpa de los menores, no mía. 

–¿Quién lo ha consentido tanto, Jin Hyung?

–Obvio tú no te salvas Jimin, le permites todo con tal de que se deje molestar y mimar por ti.

–¡Es que mira esos ojitos! 

Jungkook sólo miraba a sus mayores con los cachetes a reventar y gesto de satisfacción.

–Voy al baño. – Jin se levantó de la mesa y caminó apresurado hacia el baño, sin embargo encontró unas escaleras al lado de las puertas, éstas llevaban al segundo piso del restaurante, menos concurrido gracias a su mala arquitectura; Jin estaba a la mitad del camino y ya estaba fatigado, los escalones eran muy altos y angostos y eso fatigaba más al que los subía, pero a Jin no le importaba, pues se sentía de mal humor y hasta el hambre se le había ido, sólo quería un momento para respirar y poder regresar con el semblante feliz con el que sus miembros lo conocían. 

BTS: Chicos a prueba de confusiones. {YoonTae Y NamJin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora