Cada año [Completa•]

Capitulo 22

Harmony

Llegamos a la empresa puntuales, cosa que nunca había pasado en mi vida y es curioso porque solamente vivo a cinco cuadras. Saludamos a Rosse, y fuimos directo al elevador

Harry, insistió acompañarme hasta mi piso aunque a mi me daba igual si venía o no.
Me estaba contando una anécdota graciosa que apenas oí pero me reí para seguirle la conversación, desde otro punto de vista podíamos vernos como pareja por como íbamos.

Mi sonrisa se fue al instante en cuanto vi a Christian, nos estaba mirando con confusión y desagrado a la vez. Lo podía ver en su rostro, sin embargo no entendía porque podría estar molesto. Saludé rápidamente a Harry, para poder hacerme la tonta y correr mi vista de Christian, que me estaba apuntando con su mirada como si se tratase de un rayo láser.

Apenas me senté visualicé la silueta de Christian, en frente mío, levante mi vista para mirarlo y aún seguía tan serio como antes —Ven a mi oficina, por favor —me dijo apenas en un susurro. Hice caso y me metí apenas él entro

—¿Qué pasa? —pregunte sin ánimos

—¿Ya estás saliendo con él? —pregunto mirándome serio desde su silla y yo lo mire con confusión sin entender el porque de dicha pregunta.

—¿Y eso a ti que te importa? —escupí. Se sorprendió con mi tono de voz y respuesta. ¿Cómo debería de hablarle después de que me ignoro por completo?

—Claro que es importante Harmony, ¿Aún somos amigos cierto? —aquello me hizo reír de forma sarcástica. Él me miro con más confusión que antes y yo estaba preguntándome si realmente había dicho esas palabras.

>¿Tendrá demencia? Yo creo que si<

—¡No deberías preguntarme eso tú, debería preguntártelo yo! —hable casi gritando.Él estuvo apunto de hablar pero se callo, pensando en lo que diría seguramente —En este tiempo has estado ignorándome por completo, ni la mirada me dirigías y mientras tanto yo estaba preguntándome que había echo mal. Pero llegue a la maldita conclusión de que no soy yo el problema, eres tú, y tu egocentrismo, ya tienes lo que querías ¿No? Para que iría a servir yo ahora en tu vida —intente mantener mi postura y tratar de no llorar. A veces me enojaba conmigo misma por ser así, tan sensible y estupida, lo primero que me enoja me hace llorar con facilidad pero ahora tenía que tener un poco de orgullo y intentar no llorar por nada.

>No llores por favor, piensa en gatitos estornudando< Lo intento. Lo intento. Realmente lo hago.

—Har... Yo-yo lo siento —Apenas articulo sus palabras pero yo no pude decir nada —Bella, me pidió que me distanciara de ti porque nos veía algo cerca y acepté porque pensé que no te importaría. Realmente lo siento Har, soy un idiota, yo... pensé que no te iría a importar. Se que no te cae bien Bella, y pensé que en el primer momento que me vieras con ella me dejarías, entonces decidí distanciarme un poco, lo siento —termino por decir. Se acercó a mi y sus ojos celestes brillaban más que antes, tan abrumada que estaba solamente me salieron lágrimas y aunque me había repetido que no lo hiciera, lo hice y eso hizo que me odiase más.

Me aparte antes de que intentase abrazarme. —¿Cómo pudiste pensar eso? Claro que me importas maldita sea, no iría a dejarte por ella. Lamento haberte dado una idea tan errónea de mi, no soy así, has estado por mi tantas veces ¿Cómo iría hacer eso? Y quizás sea algo correcto que lo hayas pensado, no te culpo, apenas nos estamos conociendo pero yo no soy así, Christian —él bajo su vista al suelo, algo avergonzado. Pensé que no iría hacer nada, pero en un segundo sus brazos estaban rodeándome, era tan fuerte en la forma que me sostenía que no podría  safarme de él