día 34

183 16 10
                                    

4
___________(meses después)___________

¿Engaño? Part. II

Tiré otra flecha a la cabeza del muerto caminante.
En estas fechas cercas de otoño suelen a ver mucho más caminantes. Muchos más en los bosques, es como si pudieran oler los árboles crecientes o sentir la brisa fresca de los vientos del este.

Tobias preparaba un par de cosas para nuestra expedición de hoy. Nuestros anteriores refugios no resistieron mucho tiempo despejados.

Al despejar un poco el área me acerco a Tobias.

-hay más caminantes que hace unos días - comento.

Posa su mirada en mi y asiente sin nada que decir.

-debe ser el frío y la oscuridad del bosque. Pero no estaremos aquí en unas cuantas horas.
Nos preparamos y salimos de las entrañas maléfica del sombrío bosque que se alejaba al compás de nuestro avance.

A lo largo de estos meses Tobias y yo nos convertimos en muy buenos amigos, nos protegemos las espadas y cuidamos de nosotros.
Tampoco hemos detenido la búsqueda de Tom, y más ahora que Tobias sabe muchas más cosas sobre mi como yo de el.
Caminamos por algunas horas más, hasta que encontramos el inicio de la carretera.

Tres caminantes aparecieron de sorpresa, uno de ellos a unos cuantos metros de nosotros.
Enseguida solté una flecha a la cabeza del bicho más próximo.

Tobias corrió hacia el resto y los acabado con solo un roce de su cuchillo.
Hace una señal para que continuemos y le persigo hasta llegar a su lado.

También me ayudó a usar el arco, fue un buen maestro y ahora después de cuatro meses me había convertido en toda una Robin Hood.
Caminamos por la calle baldía hasta una plaza cercana, donde una tienda local se presentó ante nosotros.

Entramos y al paso de observar los anaqueles notamos una farmacia.
Tomamos todo lo que pudimos, entre comida, agua y Kits de primeros auxilios que nos serían muy útiles en medio de todo este caos.
Guardamos las cosas y salimos victoriosos por nuestra búsqueda, finalmente algo bueno después de meses muriendo de hambre.

Llegamos a un pueblo pequeño, cerca de una zona de residencias muy codiciosas en el mundo de antes.
Caminamos un poco más, la tarde había caído en todo su fulgor, como el sol penetrante que quemaba nuestras pieles.

-Entremos por aqui- señala Tobias.
Llevándome nuevamente a la entrada del bosque.
No avanzamos mucho desde la entrada, y nos detuvimos en un espacio abierto, perfecto para poner nuestra casa de campaña. Una vieja y gastada casa de campaña que encontramos hace unos meses en una casa de casería que encontramos. Y también donde pude obtener un buen arsenal de flechas de arco para casería, indicados para mi estilo de arco.

Conforme pasaban los meses, las esperanzas de Tom se comenzaban a agotar.
Cada noche me imaginaba los lugares posibles donde pudiera estar. Y marcaba en nuestro diminuto mapa los lugares que quedaron descartados.
Sabía que lo encontraría, pero ahora no me cuesta mucho trabajo ahora imaginar que el estuviera muerto. Pero aún me duele con todo el peso del sentimiento.

Terminamos de poner la tienda y de poner unas trampas a unos metros de nuestro campamento.
Encendimos una fogata y nos sentamos al fuego a conversar.

-¿estás bien?
Pregunta Tobias.
Notando mi cuerpo estremecido por el frío.

-nada. Hace frío - reí. Entrelazando mis dedos para poner un poco de calor entre mis manos.

-si. Es por la hora. En el bosque suele hacer más frío que de costumbre -.
Se levanta de su lugar.
Camino hacia la casa de campaña que estaba justo detrás de mi. Y con sus manos coloco una cobija cálida que puso sobre mis hombros. No sin antes soltar una sonrisa ligera.
Regreso a su lugar frente a mí y se sentó nuevamente en el tronco hueco.

tom hiddleston y tu : The Walking DeadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora