°•.ɴᴇᴇᴅɪɴɢ ʏᴏᴜ《ʜᴏᴘᴇᴍɪɴ.•°

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Un abrumador silencio se hizo presente dentro de aquel auto, las manos del menor estaban inquietas jugando con su camiseta mientras que su mirada viajaba de la venta a Hoseok y viceversa.

Las calles se encontraban completamente vacías debido a lo tarde que era, estaba bastante oscuro, mas Jimin podía notar como paseaban en medio de una leve neblina.

La ventana de Hoseok se encontraba levemente abierta, por ende, el frío nocturno lograba entrar por este espacio y abrazar la delicada piel de Jimin, cosa que causaba escalofríos en este.

La mirada de Hoseok subió al retrovisor y notó como el menor se abrazaba a sí mismo en busca de calor. Sin pronunciar palabra alguna, estiró su brazo y cerró la ventana, seguidamente, encendió el aire acondicionado.

El menor, al notar esto, suspiró aliviado.

ㅡMalagradecido. ㅡHabló Hoseok rompiéndo el silencio al notar como no recibía respuesta del menor, aún mirándole a través del retrovisor.

ㅡG-gracias. ㅡSe apresuró a decir nervioso mientras sentía la penetrante mirada del mayor encima suyo, mas no tuvo la valentía de devolverle la mirada.

ㅡAsí que... ¿Cuántos años dices que tienes? ㅡPreguntó el mayor de ambos devolviendo su mirada a la vacía carretera.

ㅡ17, Señor... ㅡRespondió en voz baja intentando que su voz sonara tranquila, a pesar de que él no lo estaba.

ㅡNo me llames señor, tengo 28 años. ㅡDijo haciendo una mueca de desagrado.

ㅡLo siento, señ- ㅡRápidamente negó con la cabeza.

ㅡDios, sólo llámame Hoseok.

ㅡEstá bien, señor Hoseok. ㅡEl mayor de ambos suspiró mientras negaba con la cabeza a la vez que el menor en la parte trasera del auto se avergonzaba y bajaba su cabeza.

El viaje continuó en silencio hasta que finalmente Hoseok frenó el auto estando frente a un grande y llamativo portón, el cuál se empezó a abrir dando paso al auto.

Mientras entraban, los ojos del menor estaban fijos en la ventana, viendo el bonito camino de piedra con árboles a los lados que los guiaba hasta la gigantesca casa en la que vivía Hoseok.

Grande, lujosa, cara, impresionante y muchas características más eran las que Jimin podía darle a la casa en la que ahora viviría.

Sin esperar nada, abrió la puerta y salió del auto para apreciar mejor la casa; sus ojos brillaban con emoción mientras que involuntariamente sonreía, no obstante, el fuerte frío azotó contra su piel haciendo que otro escalofrío viajara por toda su espalda.

ㅡEntremos. ㅡOrdenó Hoseok empujando suavemente la espalda del menor instándole a caminar. Este impensadamente empezó a caminar de manera rápida hasta la grande puerta principal, donde dos mujeres algo mayores les dieron la bienvenida con una venia.

ㅡBienvenido, señor Jung, bienvenido, joven Park. ㅡSaludaron ambas al unísono con una leve sonrisa, recibiendo por respuesta una sonrisa de Hoseok y una cara de confusión por parte de Jimin.

ㅡ¿Cómo saben- ㅡPreguntó antes de ser interrumpido por Hoseok.

ㅡYo les avisé. ㅡJimin asintió levemente aliviado hasta que un bostezo salió de su boca, estaba realmente cansado.

ㅡ¿Dónde dormiré yo, Hoseok? ㅡSe precipitó a preguntar mientras frotaba sus ojos con sus pequeños puños.

ㅡEllas te van a guiar. ㅡHabló refiriéndose a las dos mujeres, las cuales asintieron levemente. ㅡMañana te quiero en la cocina a las 8:00am para desayunar, sé puntual. ㅡHabló demandante, Hoseok era un tipo que odiaba a las personas impuntuales. ㅡEn tu habitación hay una pijama, quizás te quede algo grande. ㅡDijo rascando su nuca ya que, desde el escenario, Jimin no se veía tan pequeño a como en realidad era. ㅡY si necesitas el baño, pídele ayuda a alguna de ellas, yo iré a dormir. ㅡDijo para seguidamente darse la vuelta y empezar a caminar rumbo a su habitación sin despedirse ni dar las buenas noches.

ㅡBuenas noches, Señor Jung.ㅡ Pronunciaron ambas mujeres antes de que Hoseok desapareciera de sus vistas. Finalmente, la mirada de ambas se colocó sobre Jimin. ㅡJoven, lo guiaremos a su habitación. ㅡUn suave "gracias" fue lo que recibieron por respuesta antes de empezar a caminar.

Los ojos de Jimin miraban ansiosos cada parte de la casa, no dejaba pasar ni la más escondida esquina, su departamento no era ni la mitad de la sala, era tan pequeño que apenas se podía caminar allí dentro, por lo que esto se sentía completamente irreal. Habían tantas cosas que ni siquiera tenía la más mínima idea de para qué se usaban, pero igual se le hacían totalmente geniales.

Finalmente, las mujeres se detuvieron frente a una puerta, una de ellas la abrió dejando ver una espaciosa y bonita habitación. La cama era gigante ante sus ojos, se veía mucho más cómoda que aquél sofá viejo en el que solía dormir. La habitación incluso contaba con pequeños cuadros que Jimin no entendía, no obstante, eso no significaba que no le gustaran.

ㅡLa pijama está en la mesa al lado de la cama. Tenga una plácida noche, Joven Park. ㅡDijeron al unísono antes de retirarse de ahí.

Casi corriendo, Jimin entró a la habitación y cerró la puerta tras de sí. Sus pequeños pies tocaron la suave alfombra que decoraba el suelo, sus ojos y manos estaban ansioso por explorar toda la habitación, y así lo hizo.

Finalmente y después de un rato de explorar su nueva habitación, el de cabellos dorados se acercó a la mesa en donde se encontraba la pijama, al ponérsela notó que sí, le quedaba gigante. Apagó la luz y se subió a la cama con algo de dificultad ya que esta era algo alta. Suspiró por lo suave y cómoda que esta era, a la vez que imaginaba lo bien que pasaría la noche

ㅡBueno, ¿qué tan malo puede ser? ㅡPensó el menor ya más confiado de que todo iría bien, solo tenía que ser obediente, eso no era difícil, o al menos eso creía Jimin. Finalmente, Jimin se hizo bolita en medio de la cobija y cerró sus ojos hasta quedarse profundamente dormido.

ㅡ으ㅡ

Por otro lado, Hoseok, quien hace rato había dicho que iba a dormir, se encontraba sentado en su oficia firmando una inmensa cantidad de papeles.

ㅡAh, pero tenías que hacerle caso a Namjoon y salir en vez de terminar tu trabajo. ㅡSe maldijo a sí mismo mientras leía papeleo con cosas que realmente no le importaban. Cuando finalmente estuvo aburrido, le escribió a Namjoon.

[De: Hoseok. 11:48pm]
Si esto sale mal será totalmente tu culpa. ¿Qué se supone que haga con el niño?

[De: Namjoon. 11:50pm]
Bueno, no sé de qué te quejas, fuiste tú el que cedió a tus impulsos cuando vistes al niño bonito en el escenario.
Y yo que sé, coger¿¿ fuiste tú el que lo compró, no me lo preguntes a mí.

[De: Hoseok. 11:55pm]
¿Cómo me voy a acostar con él si nisiquiera lo conozco?

[De: Namjoon. 11:58]
Bueno, de eso va esto, ¿no? Ahora déjame dormir, te hablo mañana.

Frustrado por no tener idea de qué hacer, Hoseok bloqueó la pantalla de su celular para volver a tomar el lapicero y seguir firmando papeles.

¡Hola!

Después de algún tiempo, les traemos el segundo capítulo.

Esperamos que sea de su agrado, tengan un bonito día.

ㅡLTM.