Los vitoreos y alabanzas se entremezclan con la música, animada y elevada para celebrar la gran victoria de un partido en el que he destacado lo suficiente como para recibir ovaciones a modo de gritos.Holly sujeta mi mano con fuerza, mientras no puede dejar de sonreír. Satisfecha y orgullosa de haber llegado a la fiesta conmigo. ¿Qué hubiera ocurrido si no llego a marcar ni un triste punto?
Agradezco que haya sido al contrario por qué lo habría tenido muy difícil para mis objetivos siguientes, no te impacientes Skyler, serás el Objetivo número 2.
Me enteré de la historia de esta con Alek Deidrick , gracias a una conversación que escuché en el vestuario, tras un entrenamiento. No fue muy difícil adivinar qué pasó entre ellos cuando el tono que empleaba él para hablar de sus encuentros era subido de tono.
La música está lo demasiado alta para aturdidme un poco, no soy del tipo de deportista que lo da todo en un partido para después ingerir todo el alcohol posible mientras rompe sus tímpanos.
-Voy a por algo de beber-. Me informa la pelirroja sin bajar la comisura de sus labios. -¿Quieres algo?-.
A decir verdad, no le he prestado atención desde que hemos llegado. Simplemente he dejado que agarrase mi mano y me condujera por un camino de aclamaciones.
Niego con la cabeza, para después acercarme a ella y depositar un beso en sus labios.
Algo que no deja indiferente entre los presentes, y hace que ella enrojezca sus mejillas.
-Enseguida vuelvo-.
Me dedica una mirada pícara para luego perderse entre la multitud.
-Buen partido-. Comenta O'Brian al acercarse a mí.
Su tono parece más desanimado de lo normal, algo raro ya que yo mismo pedí que me acompañara en mis jugadas y abandonara el banquillo.
-Lo siento por eso-. Digo señalando en la dirección de Holly, haciendo referencia al beso que debe haber visto.
-Estoy hecho de acero-. Bromea, golpeándose el pecho.
Desvío mi atención hasta la puerta de la entrada, donde hace su aparición Lucifer, con una mirada merecedora de poseer el infierno.
Amer puede expresar su maldad con palabras pero jamas llegarán a reflejar todo el odio que dice con sus ojos.
-Te quiere muerto, y no se molesta en ocultarlo-.
El moreno tiene razón, ella ha sido la única lista en percibir mis intenciones y si no actúo rápido puede que ella lo haga antes.
Tal vez, si descubriera algo de lo que ocultan podría jugar con ello a mi favor. Skyler quiere huir de ellas, eso me descoloca. ¿Tiene miedo de su propia líder?
-Tienes que robar el móvil de Amer-. Digo, suspirando.
-¿Qué?-. Emite, como si no me hubiera escuchado.
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Juego de Cuatro.
Teen FictionCuatro chicas. Una regla. Ellas mandan. No puedes pretender cambiar las reglas y mucho menos cambiarlas a ellas, y Jess lo sabe por experiencia. Nueva, ingenua y sedienta de poder, planea dar un golpe de estado y hacerse con el control, pero no tie...