Pitiless (PAUSADA)

Capítulo 12

Leah

Fruncí el ceño molesta y mire mal a Aitor.- A que te refieres con que aún no has encontrado nada más- apreté los dientes y cerré mis puños intentado retener mi rabia- ¡llevo más de un puto mes junto a tú hermano y me estas diciendo que estamos igual que en un principio!- grite molesta y el aparto su mirada a otro punto de la habitación.

Me levanté molesta del sillón y golpee con mi pie este.

-¡esto es una mierda! ¡una jodida mierda!- dije agarrando de mi cabello desesperada.

-relájate Leah, no todo está tan mal como parece- me respondió intentando tranquilizarme.

-como no va a estar tan mal, si me dijiste que nos obtenido ni una mierda más de información con respecto a Jude y mi puto historial- no me detuve y seguí recriminándole- ¡Jude es tu maldita mujer y no te he visto hacer ni intentar nada por encontrarla!- grite enojada sabiendo que mis palabras lo lastimarían.

-¡lo sé! Y créeme que sí lo he intentado, he buscado en cada puto sector en el que Caneck la podría tener y no tengo nada ¡no tengo nada Leah! ¿Crees que yo no estoy desesperado? No se de ella desde hace ya cuatro meses, estoy desesperada Leah ¡estoy malditamente desesperado!- grito levantándose de su asiento, su rostro estaba rojo por la rabia y su mandíbula estaba tan marcada que llegaba a preocuparme el hecho de que sí la apretase un poco más se rompería.

-en definitiva esto es una mierda...- dije y me tiré nuevamente sobre el sillón al que anteriormente había golpeado.

Aitor suspiro y empezó a calmar su respiración hasta tranquilizarse y también volverse a sentar.

-¿a qué hora dijiste que volvía mi hermano?- me pregunto y bufe molesta.

-dijo que regresaría después de una junta, salió al medio día así que seguramente no tardará en regresar ya- respondí mirando el reloj digital en la pared del hotel.

16:54

-bien, me voy, intentaré seguir buscando, hace poco me contacto uno de los trabajadores del hotel en el que estuviste junto a Erick, quizás y el tenga un poco de información útil respecto a esa noche.- dijo volviéndose a levantar- te contactare ante cualquier cambio, por favor no dejes que Amelia se le acerque a Caneck, esa zorra está planeando algo grande.- dijo por último y salió de la habitación con un portazo.

Suspiro y mire a la ventana de la habitación, en esta los grandes edificios de la ciudad de Miami se reflejaban. Me acomode mejor en el sillón y cerré mis puños molesta.

Por dios, está situación era horrible. Mientras mi amiga seguía desaparecida yo me revolcaba con el enemigo en una habitación de lujo en la ciudad de Miami.

Y peor aún, no teníamos nada, absolutamente nada que me ayudará a hundir a Caneck.

Aitor había entrado a la habitación una hora después de que Caneck saliera a su junta, entró como si nada y empezamos a hablar de la situación en la que nos encontrábamos, para finalmente enterarme que lo único que teníamos eran sólo unos pocos datos de los bares que frecuentaba más seguido Amelia, y unas grabaciones de  los días anteriores a la desaparición de June, vídeos que claramente no nos aportaban nada de información respecto a su paradero.

Y en cuanto a las pruebas de mi inocencia, de las cuales Aitor en un principio me había mentido, puesto que no tenía nada más que las fotografías que le habían enviado a Caneck y de la ubicación del hotel en el que había estado esa noche, esa era la única puta información que teníamos hasta el momento, nada que me sirviera como el había dicho a demostrar  mi inocencia.

A parte ineficiente, también es mentiroso el imbécil, por eso detestaba a los Faure.

Sí quería mi venganza y encontrar a Jude era mi turno de actuar.

Mire la caja fuerte de la habitación y sonreí.

Me acerque hasta está y probé la combinación con la fecha de cumpleaños de la madre de Caneck y frunce mi ceño molesta al ver que no cedía. Volví a probar está vez con la fecha de cumpleaños suya y nuevamente no se abrió, por curiosidad probé con la mía y alce mis cejas sorprendidas al ver que está finalmente cedía.

¿en serio guarda papeles tan importantes bajo mi fecha de nacimiento?

Como es que alguien tan malditamente calculador como el se le ocurría semejante estupidez, eso era para los tipos cursis y románticos no para alguien como Caneck, quien de dulce y romántico no tiene ni una pizca.

Saque todos los papeles y el maletín que se encontraba dentro de esta y los deje sobre la cama.

Primero abrí del maletín y lo cerré aburrida al ver que sólo había una gran cantidad de dinero dentro de esto, nada que por el momento me fuera útil. Quizás y en un futuro no muy lejano le robaría mucha más que eso.

(***)

Guarde nuevamente todo en la caja fuerte y la cerré con mi fecha de nacimiento.

No había encontrado nada relevante en los documentos, sólo había información de las últimas ventas en su empresa y uno que otro dato de poca importancia en estos momentos.

Cerré mis ojos por un breve momento y recordé la caja fuerte de la mansión en París. Esa era la más importante reserva de dinero que tenía Caneck ante cualquier situación peligrosa, demás de ser la ubicación perfecta para guardar asuntos importantes como datos  de la empresa o algún indicio de la ubicación de Jude, y quizás quien sabe y ella se encuentra en esa mansión, era una de las más protegidas y también de las que pocos conocen su ubicación.

Ahora que recuerdo ni siquiera Aitor sabe de la ubicación de esta, Caneck dijo que no quería que nadie de la familia Faure se enterara de este lugar cuando empezó la construcción.

Sonreí satisfecha, ya sabía dónde podía estar June.

Y justo en ese momento entra Caneck a la habitación, su ceño estaba fruncido y sus puños fuertemente apretados, la tensión en su cuello era tanta que se marcaban sus venas en este.

-¿que hacía Aitor a solas contigo en la habitación?- pregunto furioso.