Te Amo a ti (Completa)

Parte 17

Las voces que provenían de abajo la despertaron, eran las voces de una mujer con un hombre, no, era la voz de Andrew con una mujer, había escuchado esa voz antes, pero aun no lograba localizarla del todo. No podía percibir exactamente qué era lo que decían, pero si podía asegurar que esa charla no era una simple platica sino más bien era una discusión.

Tomo su bata y se la puso, bajo hacia el lugar que propiciaba ese ruido, claro, ahí estaba, Isadora estaba con Andrew, ella se aferraba a su cuello como si estuviera al borde del precipicio y estar pegada de esa manera a él le salvaría. Aquellos protagonistas de aquella discusión fueron consciente de su presencia, apenas hubo alguna respuesta de aquellas personas porque ella no les dio tiempo de que hubiera tal, todo aquel acto había solo causado un gran malestar en su estómago, eso y los vómitos mañaneros que siempre estaban ahí, sin fallarle, solo sintió venir aquel líquido y salió corriendo hacia la entrada de la casa, el frío de afuera la golpeó pero eso no evito que sus rodillas hicieran contacto con el frío suelo y posteriormente desechar todo aquello que no estaba en su estómago porque no tenía ni la menor idea de que era lo que su estómago desechaba.

--¿estás bien? - escucho por detrás mientras sentía una mano en su espalda, solo asintió ¿Qué más podía hacer si su boca estaba aún sacando cosas?

Isadora era todo menos tonta, de inmediato supo lo que pasaba y eso hizo que su sangre hirviera ¡era una maldita¡! Una maldita mosca muerta¡, no solo le enfureció verla ahí, sino que le enfureció deducir el por qué ella había regresado. Tenía que hacer algo, todos esos meses que había intentado meterse hasta en la respiración de Andrew sin tener éxito alguno, claro estaba porque justo antes de que Ellen apareciera él estaba diciéndole que nada entre ellos podía pasar, ahora sabía por qué, pero... no iba a ser vencida tan fácilmente, no, esa mujer no lograría lo que ella había deseado por tanto tiempo: a Andrew.

----¡no puede ser!! - - exclamo sorprendida, tanto Andrew como Ellen quien ya se había parado un poco recuperada la voltearon a ver—estoy tan feliz por usted—Andrew la miro extrañado con la clara pregunta en su rostro—Andrew ¿es que no te has dado cuenta? - - este siguió extrañado—nuestra hermosa Ellen está embarazada!! -- Ellen quiso morir, Andrew también, no por las mismas circunstancias, era obvio --- tu novio debe estar feliz de saber que va a ser padre, ¡oh por dios! Es obvio que estos meses que han estado juntos han sido totalmente aprovechados—

se llevó unas manos a su boca y fingió timidez. Ellen quería morir ¿Cómo diablos había dicho esa mujer? ¿Su novio? ¿Qué novio?, todas sus preguntas se fueron al fregadero cuando vio como Andrew la miraba ¿Qué había en su mirada?: Nada, no había algo que le dijera si estaba enojado, molesto, feliz, triste, ella que iba a saber, ni siquiera tenía pensado el cómo decirle que estaba embarazada, primero quería ver la manera de obtener el divorcio y después vería que hacer y ahora, ahora no solo sabía de su embarazo, sino que se había dado a entender que su hijo era de alguien mas, y ¿Qué podía hacer ella? Si justo le había hecho creer que había otro hombre, se quedó callada, porque no sabía que contestar ante aquella falsa acusación.

--Isadora—dijo Andrew de manera fría, seca y ronca--- podrías dejarme a solas con la Duquesa--- no era una petición, era una orden.

Ésta sonrió por dentro, lo había logrado, había logrado meter la duda en Andrew, lo sabía porque sus manos estaban cerrados en puños, lo sabía porque las venas de su cuello y brazos podrían explotar en cualquier momento y lo sabía porque la cara que tenía en ese momento le decía que quería moler a golpes cualquier cosa que tuviera enfrente de él, hizo caso a la orden de Andrew, y salió de aquella casa, aunque había triunfado esa pequeña batalla aun no había ganado, así que continuo con sus planes, tenía que quitarla de en medio, incluso si eso significaba matarla.

Isadora se había marchado, y en esa grande sala que ahora para Ellen parecía pequeña y asfixiante solo se encontraba ella y ese hombre de mirada fría y rostro serio. A Ellen le hacía falta el aire, quería explicarse, pero algo no le permitía, pero por otra parte ¿Por qué debía hacerlo? Si él era el que había fallado primero, era él quien tenía una amante y era él quien la había lastimado su indignación volvió a hacerse presente en ese momento

----¿Es verdad? ---- pregunto Andrew rompiendo el silencio escalofriante que se había acongojado en ese lugar, fue una pregunta que incluso hacia que la mujer más fuerte temblara, no grito, pero no fue necesario que lo hiciera porque su tono de voz y sus palabras sonaron tan frías y afiladas que habían penetrado hasta el fondo del alma de Ellen, pero Ellen ya no estaba sola, ahora había algo por lo que tenía que luchar, y lo haría, verdad de Dios que ella pelearía hasta el final

--¿Que? --- preguntó con la misma frialdad

Andrew esbozó una sonrisa irónica y soltó un bufido cansado, a paso lento se acercó a ella, pero ella no retrocedió, no se amedrentó, no se acobardo

---¿estás haciéndote la ilusa? ¿quieres jugar a que no entiendes mi pregunta? —le preguntó, tomando con su mano el brazo de ella y apretándolo con fuerza, sin quitarle la mirada de encima, esa mirada que la estaba matando. Su perfume y su sola presencia cerca de ella la hacían bailar, pero aun así fingió fuerza y estabilidad

---¿jugar? ¿yo?, jamás --- se separó de él sin mostrar miedo y dio un tirón para que éste soltara su brazo--- solo quiero que quede clara la pregunta para que yo pueda dar una respuesta correcta

---¿Qué no hay de claro en mi pregunta? --- dijo aun irónico

---Todo--- contestó calmada--- si usted está preguntando si es verdad que estoy embarazada mi respuesta es sí, lo estoy; pero si su pregunta es si este hijo es suyo o de otra persona entonces yo le responderé que tal pregunta es algo que no deseo responder--- Ellen mantuvo la cara en alto, siempre le sostuvo la mirada y jamás dejó ver un rastro de las ganas de quebrarse que tenía en ese momento.

Andrew por su parte estaba... estaba.... Él no sabía ni cómo demonios estaba, primero había estado feliz por tenerla ahí, después con las afirmaciones de Isadora le vino celos y enojos repentinos, pero ahora con la respuesta de ella, estaba acabado, esa mujer tenía ese poder sobre él, podía traerlo a la vida y hacerlo el hombre más feliz y dichoso en un momento y al otro simplemente lastimarlo hasta el punto de que quisiera morir, pisotearlo y no dejarle ni siquiera dignidad que salvar, eso podía hacer Ellen con él, el títere que podía manejar a su entera conveniencia.

---Entonces... ¿A que ha regresado? ---- preguntó aún con la sangre hirviéndole y con la duda en su cabeza

--- A pedirle el divorcio--- contestó contundente y segura, o era lo que trataba de aparentar

Silencio, eso fue lo que hubo después de la respuesta de ella, porque con aquella afirmación el corazón de ambos se achicharró. Dolor, eso era lo que había en ese matrimonio tanto uno como el otro había experimentado el dolor sin ser conscientes que ambos estaban estúpidamente haciéndose daño, tal vez, simplemente ambos tenían que dejar de construir esas paredes de autoprotección y orgullo y simplemente decir la verdad, solo eso, si hablaban honestamente con la verdad las dudas de cada quien se irían al caño y solo quedarían ellos y el gran amor que se profesaban. Pero no lo hicieron, las armas siguieron en posición y la guerra continuó.