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Hui.
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Debía admitir que estaba HASTA LA MADRE.

Desde que Hyo había abandonado la escuela, y después de que nuestro grupo de amigos se uniera con la chusma de pentagon, nada era lo mismo. No estaba mal, pero tampoco estaba bien.

O bueno, quizá lo ÚNICO que no estaba bien, era que me hubiese tocado con el Otaku mugroso de Wooseok en el taller de cálculo.

La escuela había dicho que pentagon ya no podía ser un club, así que debíamos de tomar otros para solventar sus puntos extras, además de tomar deportes. Estabamos en la segunda mitad del ciclo escolar. Ya estabamos por irnos a la verga (excepto los menores aka, la maknae line) y aún así nos pedían los puntos extras del club.

¡Qué molleja, factoreame esta profesor Park!

Mire a mi cuaderno, y luego a mi compañero de banca. Wooseok me miraba sin una pizca de discreción.

—¿Soy o me parezco?
—Pareces pendejo.
—Pendejo tú—no quería caer en su juego. Pero vaya, era tan desesperante.
—¿Un pendejo que ganaría en piedra papel o tijera?
—No puedes hacerlo.
—Try me bitch.

Bueno, quizá estaba callendo en su juego. Le di una madriza en el piedra papel o tijera, pero él seguía de pesado tratando de obtener mi atención.

—¡Cómo chingas!

Del otro lado del salón, en la parte de atrás, HyungGu y ChangGu sentados juntos. Por alguna razón, las cosas habían cambiado radicalmente. Quizá porque había vivido la evolución de nuestra relación con pentagon, pero ahora, veía las cosas diferentes.

Desde la ausencia de Hyo, hasta la partida de YanAn a china por problemas de sus padres.

Kino y Yeoone, peleaban por la atención de Shinwon. Resulta que desde que se fue su novio, Yeo buscó al primer pendejo con actitudes tiernas y se agarró a Shinwon como consuelo. Obviamente esto ocasionaba inconformidad en Kino cochino, quién solo buscaba escusas para darle en su madre, aparte de que no lo quería mucho desde que en anteriores meses, habían tenido una épica batalla de baile.

Al otro extremo del salón, Hongseok y Yuto andaban de muy amikes. Bueno, es entendible, ellos se conocían de años, por eso JinHo no debía estar molesto de que su ahora novio se llevara tan bien CON SU AMIGO, pero el enano era un celoso de mierda, y los miraba con rabia acompañada de una toxicidad peor que Chernobyl.

Suspiro, enfadado. Se suponía que debíamos estar unidos, nos habíamos hecho amigos de esos babosos porque JinHo salía con el que parecía su padre, pasando automáticamente a ser la madre de este pentagon renacido, pero con una madre tan ojete, mejor ser huérfanos.

—Oyes— susurró Wooseok después de un rato. ¿Acaso no entiende este estúpido— ¿Nos damos una madrina o qué?
—¡Ya te dije que me dejes!

El wey sacó un lápiz grandote. Pinche inmaduro. Cree que porque soy mayor no tengo un lápiz igual de perrón. Se equivocó. Saque mi propio lápiz, y como no, nos dimos una buenas luchitas de espadas.

Nos veíamos ridículos, pero a algún genio se le ocurrió que el profesor Taemin sería perfecto para dar el taller de cálculo, por eso no había nadie, le andaba dando las de atrás al director, obviamente.

—La neta esto está bien aburrido, y peor aún me tocó sentarme contigo.
—Tampoco es como que me agrade— respondí al titán ese— ya déjalo.

Me aburría a madres, pero no tenía mucha opción. Era mi compañero de lugar. En la parte trasera, Shinwon todo jetón, soltó un ronquido haciendo más miserable nuestra escenita de lapizasos. Cómo extrañaba a mi novio, él me mantendría menos gruñón, pero se había ido. Sus padres se habían enterado de lo nuestro y lo cambiaron de colegio. No servía de mucho pues Hyuna nos encubría y teníamos citas prohibidas, pero lo extrañaba en clase.

—Hey, psss...—tragame tierra y escupeme en la chingada que estaré mejor que con este idiota— ¿Sabes por qué eres tan aburrido?
—Ni idea— dije como si me importara.
—Porque prefieres Shingeki no kyojin que Naruto.

Cada que se le acababan las ideas para hacerme la vida imposible, Wooseok sacaba esa mamada a la luz, para comenzar a debatir de animes. Si bien, él era mega Otaku, yo más bien friki, teníamos ciertos gustos en común.

—Ya hablamos de eso. Ya te dije que Naruto tiene mucho relleno y que Shingeki es una obra maestra, nos da una perspectiva diferente desde los puntos de la guerra, cada quien tiene sus razones para hacer lo que hace...
—Sisi, ya a la chingada.— me interrumpió—Naruto me enseñó a que despegues la vista de la Sakura de tu vida, que te estanca y no te corresponde, porque al final va a esxistir una chichona como Hinata que te quiera de verdad.
—No me hagas reír. Las parejas finales son mega forzadas, mejor Naruto se hubiera quedado con Sasuke.
—En eso coincidimos.

Lo que parecía ser el inicio de una conversación bastante más civilizada de lo que acostumbraba a tener con ese menso, pero como buenos chismosos, nos detuvimos al notar que JinHo estaba siendo sostenido del cuello de la camisa por su novio y por Yuto. Quizá había dicho algo no muy grato, típico del enano.

—¡No lo vayan a romper!— gritó HyungGu burlón. Quise defender a mi amigo cuando ChangGu se me adelantó.
—Cierra la bocota grandísimo tonto, esto es serio. Podrían lastimar a JinHo.
—Como si te importara.
—¡Claro que me importa, es mi amigo!— gritó exasperado el mayor— lo que pasa es que todavía no superas cuando te humilló en el almuerzo frente a toda la escuela.
—Y tu no superas que tu novio ya no te quiere y por eso andas pegado como sanguijuela a Shinwon.

Ambos se habían puesto de pie mientras discutían, sus pasos fueron dirigidos hacia donde el pobre Koh sin culpa alguna, fue interrumpido de su quinto sueño mientras esos dos revoltosos lo levantaban a sacudidas para que los defendiera. Kino alegando que era su novio y Yeo diciendo que por favor le llamara la atención al molesto del bailarín.

Después de ser tasajeado por ambos estudiantes, Shinwon se levantó. Hasta yo me asusté pues parecía bastante molesto, sin reparar en lo que ocurría los separó con sus largos brazos y les pidió que se tranquilizaran.

—¡Detenganse por favor, hay papas fritas para todos!— bueno, no faltó su comentario raro, pero en sí él era raro.
—¡Él me está molestando!— se quejó Yeo.
—¡Él comenzó!— replicó Kino.
—¡Ambos cierren la boca!

Shinwon los miro claramente molesto. Wooseok y yo dejamos escapar un audible: uhhhhhhh. Después de darnos cuenta de lo sincronizados que estábamos rodamos los ojos de desagrado.

—¿Por qué lo defiendes?— se quejó Kang con su novio. El tragón suspiró.
—No lo defiendo HyungGuggie, es mi amigo. Y no entiendo cómo se pueden llevar tan mal.
—Yo no entiendo cómo puedes andar con este— se quejó Yeo.

Iban a discutir de nuevo, pero Shinwon los interrumpió de nuez.

—¡Stop!— pidió— no voy a aguantar más sus discusiones. No me van a hablar hasta que se lleven bien ¿Entendido?
—¡Pero...!
—¡¿Entendido?!

Ambos chicos asintieron con la cabeza gacha.

Bueno, al menos algo de diversión me debía traer este tiempo.








;RACHELRED♡

ℋ𝓊𝓂𝓅𝒽!♡ 「pentagon」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora