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Kino.
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Bien, siendo sincero, no pensé que JinHo fuera a hacer algo así. Pendejo no es, de eso estoy seguro, pero exagerado si que si.

Había ido a disculparme por lo del beso. La verdad es que lo hice por impulso. Vi que Hongseok se acercaba y me quise mentir a mi mismo diciendo que lo haría para causarle celos al moreno y ayudar a Ho, pero muy en el fondo, sabía que esas no eran mis intenciones.

Bueno, el chiste es que después de madrearme, JinHo me dijo que se había arreglado con Hongseok pero que ahora por mi culpa todo estaba mal. Le conté a Shinwon y me dijo que tratara de arreglarlo, así que le saqué la dirección del chaparrito al Chango y fui a verlo. Según sus indicaciones, su madre trabajaba mucho fuera del país así que estaría solo. Cuando llegué no me dijo nada del tema, no me reprochó ni me volvió a agarrar a putazos, si no que me arrastró hacia su habitación para que lo ayudara en algo.

Ese algo: un club.

JinHo al parecer, trató de explicarle las cosas a Hongseok sin que este lo escuchara, como su orgullo es mil veces más grande que el sol, le dijo a Yang que no lo quería ver nunca más. OSEA, ¿ASÍ O MÁS DRAMÁTICO?

El club era justamente para sustentar todos los puntos que deportes y cálculo y no tener que estar viendo la cara de Seok más, y para asegurarse de que no pudiera entrar, el único requisito era no medir más de 1.75m. Obviamente esto se lee muy discriminatorio, así que lo hizo un club de modelaje para gente baja, argumentando que las personas altas tienen mucha más ventaja en este mundo, así que por eso no podían entrar al club.

Un plan maestro. Lástima que siempre usa su ingenio para ser un jodido maníaco.

Me puso a llenar formularios y a ayudarle a pintar el cartel. Nos llamaríamos el world top model club, y todo bien, ya había hablado con Hui y le había mandado un mensaje a ChangGu. No preguntándoles, AVISANDOLES, que serían parte de su club porque necesitaba al menos un fundador y tres miembros. Obvio a mi también me metió sin preguntar, pero tampoco era como que me podía negar, era lo menos que podía hacer.

Tardamos alrededor de TRES HORAS organizando todo. Al día siguiente entregaríamos los papeles y podríamos iniciar justo al otro día las actividades, que eran:

-Hacernos pendejos.
-Chingarnos una botanita.
-Seguir haciéndonos pendejos.
-Y llenar la bitácora del club.

Al menos en dos de las actividades somos expertos.

El día pasó rápido, ya iba a llegar la noche y yo no tenía los hijos bien puestos para pedirle perdón a JinHo. Tan patético soy que fue él quien sacó el tema, mientras comíamos chetos en la sala y veíamos caricaturas.

-Tú...- empezó. De repente, la mejillas se le tiñeron de rojo. - ¿Por qué me besaste, HyungGu?

Me sonroje yo también. Aunque había estado tratando de hablar justamente de eso, hacerlo de verdad y no en mi mente, era mucho más vergonzoso. Tomé aire porque debía de hablar.

-Shinwon dice que los besos sirven para reconfortar a las personas. Yo pensé que...
-Haste wey- me interrumpió. Ya se le había ido lo tímido al parecer- no necesitaba que me reconfortas. Tienes una razón aparte ¿Cierto?

No tuve la fuerza para debatir. Simplemente asentí mientras bajaba la vista.

-Quería herir a Hongseok- admití- desde que soy novio de Shinwon, no puedo evitar compararme una y otra vez con ese bato. Me refiero a que...Shinwon lo tiene en un pedestal, lo ha idealizado y lo tiene como una de las personas más importantes de su vida. Es como si cada vez que intento acercarme a ese lugar, Shinwon me aleja y limpia la imagen de rey que tiene de ese pendejo. ¡Lo detesto!

Ya me estaba poniendo intenso, pero bueno. Mejor lo deje antes de ponerme mal de veras.

-Esta bien- me consoló el chaparrin- te entiendo. Yo también me ponía celoso de vez en cuando- (por no decir que siempre pero pues no sé lo iba a comentar)- yo...te quería preguntar algo... ¡Es solo por curiosidad! No quiero sonar mal, o metiche.

Apenas me estaba advirtiendo y ya sonaba mal y metiche. Yo lo miré espectante. No le podía negar nada en esos momentos, pero tampoco es como si lo fuese a ayudar a hacer un pacto con satán. Estaba rezando porque no me pidiera nada que no estuviera escrito en la biblia.

-¿Ya lo has hecho?- dijo no rojo, lo que le sigue.

Alcé la ceja.

-¿Hacer qué?- pregunté.

YA LO SÉ, ERA MAS QUE OBVIO PERO SOY LENTO ¿OK?

-Y-ya lo sabes...e-eso- yo negué y el frunció el ceño- ya sabes, el sin respeto, el muele carne, el delicioso, el mete y saca...

Me daba palabras que no entendía. Si que era algo guarro.

-¡echar pata, darle cran al alacrán, echar pasión, matar la rata a palos, a remojar la brocha, rellenar el pavo, empujar la tripa!

Por más vulgaridades que lanzaba, mi mente obviamente no lograba conectar las ideas, hasta que JinHo se desesperó.

-¡COJER, FOLLAR, COITO, SEXO, ¿QUÉ SI AÚN ERES VIRGEN?!

Me quedé sacadisimo de pedo. ¿Cómo porque me preguntaba si ya había despeinado la cotorra? Obviamente mi mente viajó a muchas posibles explicaciones...y todas eran muy comprometedoras, así que solo fui sincero, cuidando mis palabras.

-Aún lo soy- contesté- en realidad no tengo prisa.

Él suspiró aliviado.

-Pensé que era el único virgen- lo ví limpiarse el sudor el ridículo ese- da igual, ahora que el estúpido de Hongseok me dejó, no tengo esperanza de que algún día alguien me destape el corcho.

Dios, no me podía sentir mal cuando soltaba ese tipo de expresiones. Joder, da igual. Había sido mi culpa y él parecía realmente agobiado. Debía intentar convencerlo de hablar de nuez con hyung, quizá aún no era tarde.

-Vamos, no creo que haya sido tan malo-comencé a hablar, pero JinHo hizo un puchero, como si en cualquier momento fuese a llorar, así que mordí mi labio incómodo- Me refiero a qué... ¿Si se enojó mucho?
-¡Ni modo que me hiciera una puta fiesta!
-¡Estoy tratando de ayudar!
-Ayudas más cuando te callas el osico.
-Chinga tu madre entonces.

Ya habíamos comenzado a pelear fue nuevo. Era una persona TAN DIFÍCIL DE TRATAR. JinHo era impredecible, grosero, impulsivo e irritante. Y lo peor, era que lo había logrado lastimar. Le había hecho daño y me sentía con el deber de ayudar a una persona así.

-Perdón- dije apartando la mirada. JinHo me miró con sorpresa.
-¿Qué dijiste?
-¡Que me perdones, a la verga!

¿Por qué tenía que ser tan difícil pedir disculpas?

-No te perdono- me contestó y yo lo miré molesto, hasta que lo ví sonreír.

No una sonrisa sádica y de loco, si no una sonrisa genuina y sincera. Comenzó a reír y después de darme cuenta que era un chiste. Le seguí el juego y reí junto a él. Quizá nunca me podría llevar bien con él, pero sin duda, aquel día nos unimos de manera especial.

Mientras terminabamos los chetos, hablamos sobre nosotros. JinHo estaba siendo amable y ahí supe que dentro de él (MUY DENTRO) había un chico que solo buscaba amor, Comprensión y dulzura. Decidí entonces que no lo ayudaría en lo que yo pensara que fuera lo mejor. Yo lo ayudaría en lo que él quisiera, y estaría a su lado, no sólo para remediar mi error, si no porque sería algo de lo que Shinwon se enorgullecería de mi.










;RACHELRED♡

ℋ𝓊𝓂𝓅𝒽!♡ 「pentagon」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora