¡Dije que no!

483 30 0
                                    

Cuando llegue a casa me lleve la sorpresa de encontrar a mi amigo Alfred.
-Que más colega, que haces por aquí a estas horas. - dice mi amigo un poco impresionado ya que no es muy común estar antes de 6 pm en mi apartamento.
- Estoy un poco estresado y decidí salir temprano de la oficina.
-Bueno mucho mejor, vine a traerte ésto-  me entrega un sobre con la invitación del cumpleaños de su hija Adriana quien en unos dias cumplirá su primer año de vida.
-gracias precioso por invitarme- le digo por el sobrenombre q lo llama su esposa y le giño un ojo….
- de nada solterón- dice porque aunque ya tengo 31 años no se me ha pasado por la cabeza casarme.
-hey! Hoy fue la arquitecta a mi oficina, es muy mona- lo digo sin mayor importancia
-mona, esa mujer es una preciosidad, ya te lo digo yo.
Me molesta que se refiera a ella en esa forma, un momento… siento unas irrefrenables ganas de ahorcarlo. ¿Será posible que? detengo mis pensamientos ahí.
-gran cabrón! Fuiste capaz de tirártela- digo en tono amargo y el me mira extrañado por mi repentino ataque de celos por una mujer que apenas conozco y para arreglar la situación digo a tono de burla para quitarle tinta al asunto- tu, el fiel más fiel del planeta, ¿fuiste capaz de serle infiel a su esposa embarazada con la arquitecta que ella misma contrató?.
Suelta una carcajada mientras yo abro la puerta de mi apartamento y me tranquilizo al ver que olvidó mi repentino ataque de celos.
-No querido amigo, es solo que una vez la vi en el parque trotando, llevaba ropa muy ajustada obviamente y valla que se le veía un cuerpazo, porque colega estoy casado mas no ciego- mueve las cejas sugerentemente y me hace reír…
Charlamos un rato mas hasta que se hace la hora de cenar y decide irse, su familia lo espera. Yo por el contrario no hago más que pensar en unos ojos color avellana que me tienen loco.

********
-

Pero que alegriaaaaa….- grito por la emoción que me da al volver a ver a mi amigo del alma de nuevo en la ciudad.
- ¿Manuel cuando volviste?, por fin estamos todos juntos otra vez- digo esto porque somos inseparables de la secundaria. Nos unió mucho cuando le toco defenderme de personas que me hicieron mucho daño, eso lo hizo totalmente especial para mí.
-Mi querida Kathy volví en la madrugada, solo dormí un rato porque tenía muchas ganas de verlas de nuevo, ya por fin termine la especialización estoy todito entero para las dos así que no se peleen.
Todos reímos de las ocurrencias de mi amigo, doy gracias a todos los dioses que existen porque él y solo él podía hacer este horroroso día mucho mejor.
-Y cuéntame ¿cómo te fue hoy con el mega proyecto que tienes? - mierda!  No debí dar las gracias tan rápido. Pero es mejor enfrentar el tema de una buena vez y por todas.
-Fue un total y completo fiasco- digo con voz cansada, y me siento en el sofá entre mis dos mejores amigos.
-Pero ¿Por qué? - sara fue la primera en hablar
-Mi reina ¿no te dieron el trabajo? ¡cuéntanos que pasó, pero ya! - Dice Manuel echo todo oídos.
-El viejito, calvo y regordete no le gusto lo que hiciste- pregunta sara recordando las palabras que dije de como imaginaba al misterioso Señor Spencer.
Me sonroje de solo recordar lo sexi que es.
-No amiga, no es eso. ¿Por dónde empezar? - me rasco la cabeza buscando una manera de contar lo que pasó sin parecer tonta.
-No es viejo, ni calvo, ni gordo. Por el contrario, es supremamente atractivo, joven, con un cuerpo para morirse y unos ojos que…- no pude terminar, solo fue ver la cara de pasmo de mis amigos para callarme de inmediato.
-Wow! Pervertida se ve q le diste una buena repasada al hombre tanto, que los has descrito tan bien que de solo imaginármelo me dan ganas de besarlo y eso que no soy gay- solo a mi amigo se lo ocurriría decir algo así.
-Pero vamos a ver, necesito conocerlo para ver quién es el hombre que por fin le quitará el celibato a sor Kathy. - mis amigos no podían parar de reírse, yo por el contrario estaba enfadada, quien me mando a abrir mi bocota.
¡Pasó un largo rato en que mis amigos no hicieron más que burlarse a costillas mías! Y lo único que sus comentarios hacían era revivir un pasado que quería mantener como lo que era, pasado.
-Ustedes mas que nadie saben porque me he mantenido al margen con los hombres, no porque sea una monja como dices tu pedazo de tonta, ni porque sea ciega, solo que un estúpido hijo de la gran puta-y no pude seguir hablando. Manuel fue el primero en abrazarme y pedirme disculpas luego Sara me guiño el ojo con eso entendí que luego tendríamos una conversación.
Manuel se fue minutos después debido a lo sucedido y sara que me conoce muy bien me hizo señas para que tomara asiento a su lado.
-A mi no me engañas dime lo que realmente sucedió, nunca sacas a relucir esa etapa tan dolorosa de tu vida nada mas por las burlas de nosotros, no es la primera vez que nos burlamos de tu poca interacción con los hombres, ¿Por qué hoy reaccionaste de esa manera, que fue lo que paso en aquella reunión? - su cara es toda preocupación
-Sara no quiero hablar de eso ahora, estoy cansada.
-Ósea que si sucedió algo y quieras o no me vas a contar, espérame aquí voy a traer algo para relajarnos- se para rápidamente y la veo venir con una botella de vino y dos copas, se está asegurando de que hable ya sea por las buenas o por la borrachera que va a hacer que pille si no quiero hablar.
Suspiro con resignación, será mejor que hable ahora. Me centro en contarle todo con lujo de detalles desde mi nula capacidad de hablar, su proposición y todo lo que paso, no pase por alto nada.
Cuando termino espero q este tan indignada como yo me sentí cuando Jeremy me propuso lo que me propuso, pero no, la muy imbécil no hacía más que reírse, solo cuando vio mi gesto de enfado fue que como pudo se recompuso.
-Pero vamos a ver- me dice enarcando una ceja- me dices que el hombre esta para comérselo completico.
-Si.
- ¿A pesar de parecer tonta y poco profesional ha decidido darte la oportunidad de tu vida permitiendo que sigas trabajando con él?.
-Si. -Respondo un poco confundida por éste interrogatorio
- ¿Y aparte de todo te dijo que intuyendo que eres casi virgen estaba dispuesto a enseñarte todo lo que sabe acerca de sexo sin cóbrate un peso? - dice casi riéndose a carcajadas.
-Perra, no se para que te conté todo esto sí solo querías burlarte- lo dije con toda la rabia que tenía en el momento.
-Calma amiga solo es una broma no te pongas en plan mártir que no te queda, vamos a ver, ya es hora que te olvides de ese pasado que te atormenta y no te deja vivir, ya es momento de que le des un gustito al cuerpo y mas si ese gusto esta como tú lo pintas, ósea, para comérselo enterito- por fin sonrío con las ocurrencias de mi amiga.
-Sara tu sabes muy bien lo que ocurrió por dejarme llevar por la calentura del momento, además, eso me enseño que no puedo ser el juguete de nadie, y si accedo a acostarme con él, eso es justamente lo que sería, no quiero agrandar más su ego que seguramente es más grande que su miembro- nos miramos un momento y soltamos una carcajada.
-No te quiero presionar solo piensa un poco, ¿sí? Tienes 23 años no has vivido mucho y no quiero que desperdicies tu vida solo porque un infeliz te hizo lo que te hizo.- me mira con gesto triste y me manda un besito con la mano.
-Está bien me lo pensare, pero me voy a dormir quiero desconectarme de todo, te quiero amiga, hasta mañana.
Los 5 días días siguiente pasaron volando y llegaba de nuevo el momento de estar frente al hombre que me intimida hasta el punto de dejarme sin habla.

Ardiente deseo (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora