Dicen que entre parejas tienen una conexión. Una conexión que les permite entender los pensamientos y sentimientos del otro con sólo mirarse a los ojos.
Y esa conexión es la que acababa de sentir MinHo cuando vió a JiSung entrar por la casa completamente exhausto y abatido. Algo no tan habitual en él. Cuando miró sus ojos y vió la tristeza en ellos, supo que algo no andaba bien.
—¿Cómo te fue hoy, JiSung?—preguntó Felix quién pasó justamente al lado del pelizul y le miró de pies a cabeza.
—Bien, me explotaron en el trabajo pero fuera de eso, todo normal—le dedicó una falsa sonrisa.
—Oh bueno, trabajaste duro Sunggie, mejor ve a descansar—Felix le sonrió verdaderamente y palmeó su trasero antes de continuar con su camino.
JiSung sonrió un poco y después suspiró temblorosamente para comenzar a subir las escaleras. MinHo quién estaba en la cocina no dudó en dejar todo lo que estaba haciendo para seguir a su novio al ver claramente sus ojos llenarse de lágrimas.
¿Qué había pasado?
Desafortunadamente no logró alcanzarlo a tiempo pues cuando llegó a la segunda planta, la puerta de su habitación ya estaba cerrada. Se acercó a ella y la golpeó unas cuentas veces.
—JiSung, ábreme por favor—pidió con voz suave y apacible.
—MinMin, ahora no. Estoy cansado, bajaré más tarde a cenar.
Siguió tocando.
—Por favor—insistió con voz más seria.
Hubo un corto silencio antes de que la cerradura de la puerta fuera abierta. MinHo se introdujo lentamente en la habitación y suspiró al no ver a JiSung allí y comprobar que se había encerrado en el baño, al ver su luz encendida.
Muy astuto, pensó.
A continuación cerró la puerta detrás de él y caminó hasta el baño.
—JiSung... —tocó la puerta—sé que estás ahí, porfavor sal.
Después de unos segundos, JiSung abrió la puerta y MinHo pudo contemplar perfectamente sus ojos rojos y llorosos. Inmediatamente avanzó hacia él y este se refugió en sus brazos.
—¿Qué pasó, amor?—preguntó Lee, preocupado.
JiSung comenzó a sollozar fuertemente en su pecho lo que le hizo asustarse y angustiarse muchísimo más. Intentó alejarle de él para poder ver su rostro pero el peliazul se aferró más a su cuerpo y le dijo:
—Los vi... Vi a mis padres.
MinHo se quedó inmóvil, intentando procesar lo que acababa de oír para después parpadear varias veces confundido.
—¿Qué dices?—los separó un poco para mirarle a los ojos—¿A qué te refieres con que los viste?
JiSung sorbió su nariz roja y limpió inútilmente sus lágrimas. MinHo no dudó en levantar su mano y pasar delicadamente su pulgar por la mejilla del peliazul, ayudándole y diciéndole con la mirada que podía confiar en él.
—Estaba... —comenzó pero de repente su voz se quebró y sus ojos se aguaron nuevamente para después negar repetitivas veces con la cabeza—No puedo—dijo alejándose mientras cubría su rostro.
El cuerpo de MinHo se movió automáticamente a su dirección, observando como el Peliazul se sentaba a la orilla de la cama y comenzaba a sollozar en silencio. Se sentó a su lado y le envolvió en un tierno abrazo mientras le hacía pequeños mimos para que se calmase.
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❝Pride Club❞ ❥『•MinSung•』
Romance❝Donde MinHo duda seriamente de su sexualidad y acude a un grupo de ayuda LGBT.❞ ❥MinHo Tops ; Bottom JiSung ❥Angst | smut | drama | fluff. ❥Mención de otros ships. ❥Algunos miembros de Stray Kids como parte de la comunidad lgbtq. ❥Portada y separa...