Una linda pareja | Kiba x Naruto Yaoi

Reconciliación

Pov. Naruto

No tengo mucho tiempo, iré a ver a todos mis amigos hoy. Creo que también debería...

*En el espacio mental de Naruto*

Nar: Oye...Kurama...
Kur (desinteresado): ¿Y ahora qué quieres?
Nar: L-lo siento, no debí tratarte así, solo que estaba molesto por lo que hiciste y yo q-
Kur (interrumpiendo): No digas nada cachorro, fui algo egoísta y no te tome en cuenta. Perdón por todo lo que te hice.
Nar: ¿Qué? Nono te preocupes. Te quitaré eso ahora.

Naruto deshace las puertas que inmovilizaban el cuello y las colas de la gran bestia. Haciendo que el zorro pueda ahora moverse con libertad.  Seguido a esto, Naruto abraza la enorme pata del Kyubi y se queda inmóvil.

Nar: Lamento eso...

Kurama se transforma en un ser humano con orejas y una cola de zorro, y sigue el abrazo del rubio.

Kur: Yo también...
Nar (asombrado): ¿Q-qué? ¡¿Puedes convertirte en un humano?!
Kur: ¿Dudas de mi poder?
Nar: Jajaja ¡Tus orejas! *acariciando las orejas que yacían en su cabeza* ¡Incluso tienes una cola!
Kur: Bien bien, tú no me puedes decir nada *señalando por sobre la cabeza del Uzumaki*
Nar: ¿Qué? *tocando su cabellera* ¡¿EH?!

El jinchuriki ahora tenía dos orejas de zorro encima, al igual que su acompañante.

Nar: ¡¿Qué me pasó?! *observando su reflejo en el charco del suelo*
Kur: No es nada jajaja *apuntando su dedo hacia él*
Nar: ¿Qué? ¡Desaparecieron!
Kur (riendo): Era una broma.
Nar (fastidiado): Muy gracioso...
Kur (sonriendo): Pero si te ves tierno. Bien, será mejor que vuelva a mi forma normal.

Kurama vuelve a su exhorbitante forma, dejando a Naruto atento a su cambiante figura.

Naruto: Antes de irme.

Naruto levanta el puño hacia la bestia de nueve colas, la cual responde con un dejo de confusión.

Kur: ¿Eh?
Nar: Es solo chocar el puño.

El Kitsune sigue las instrucciones del muchacho y junta su puño con el del genin.

Nar: Te veo luego.
Kur: Adiós cachorro.

Pov. Kurama

El muchacho es alguien especial, tiene un gran corazón, hace de todo por los demás sin esperar nada a cambio. Puede que incluso me caiga bien...

Y así Kurama volvía a descansar en el interior del pequeño Naruto.