¿Cómo pedir matrimonio?

♦️O3 - Secretos milagrosos.

Luego de la tarde alocada en Wedding Street; Erza, Gajeel, Natsu, Happy y Gray llegaron al gremio con un poco de rubor en sus rostros. Habían estado discutiendo en el camino sobre como iba a ser el discurso emocional con el que propondrían matrimonio a sus respectivas parejas, pero antes que ayudarse mutuamente y ponerse de acuerdo, terminaron absolutamente molestos entre todos —Sin mencionar que Erza ya se había equipado la armadura Fairy—

La bochornosa actitud de los amigos no fue pasada por alto por ninguna de las chicas, las cuales estaban sentadas juntas en una mesa.

—¡GRAY-SAMA!— Como era esperado, la primera en recibir a su novio y amor de su vida fue Juvia Lockser, que tenía los ojos llorosos y una sonrisa creciendo cada vez más en su rostro al igual que un vivido color rojo asomándose por sus mejillas. —¡JUVIA LE EXTRAÑO TANTO, JUVIA QUIERE QUE VAYAMOS A SU CUARTO AHO-

—¡B-BASTA, LOCA!— Gray puso su mano de por medio, haciendo que Juvia se chocará con ella, pero inmediatamente la peliazul hizo un movimiento estratégico con el que apartó al Gray del resto hasta que sus siluetas se desaparecieron por la puerta del edificio.

—¿No les parece que Juvia está demasiado emocionada hoy?— Natsu se acercó con un poco más de calma hasta Lucy.

—Son cosas de chicas...— Soltó Lucy con una sonrisa tímida. —¿Dónde estuvieron todo el día?

Entonces sin saber que responder, se sonrojo con violencia, recordando que dentro de los bolsillos de sus pantalones estaban los anillos de compromiso.

—F-F-Fu-Fuimos a... a... ¡Fuimos a la veterinaria porque Happy tenía piojos!

—¡Oye!— El gato azul frunció el ceño y jalo un mechón del cabello del pelirosa.

—...¿Seguro?— La rubia arqueó una ceja con recelo.

—¡Seguro! ¿Quieres ir a por un helado? ¡Vamos, yo pago!— Entonces Natsu tomo a Lucy de la mano, dejando a Happy junto al resto y la llevo a rastras fuera del gremio.

—¿No vas a preguntar donde estaba, Levy?— Gajeel se sentó junto a su novia, quien inmediatamente evadió su mirada.

—¡Ya escuche que Happy tenía piojos!— Levy sonrió demasiado nerviosa para el parecer de Gajeel. El exceed rodó los ojos. —¡S-Si no te molesta, tengo que ir a mi casa porque compre otra promoción de 500 libros a 100,000 Jewels y tengo que acomodarla en los estantes!— Antes de que el Dragon Slayer pudiera decir algo, Levy se levantó de la mesa no sin antes inclinarse hasta la altura de Gajeel y depositar un suave y rápido beso en sus labios, el cual ni siquiera le dio tiempo de corresponder. —¡Nos vemos mañana!

Y cuando su pequeño cuerpo se marchó del gremio dejándolo a solas con Erza y Happy, Gajeel no tuvo más remedio que dar un grito de exasperación.

—¡¿Lo ven, Titania, gato?! ¡Es así todos los días! ¡No hace otra cosa más que evitarme! Lo peor de todo es que ni siquiera parece estar molesta conmigo... ¡Simplemente se ríe, se excusa con algo, me besa y se va!

—Tal vez comió un pescado malo.

—¡¿Y ESO QUE DEMONIOS TENDRÍA QUE VER CONMIGO?!

—¿En serio no tienes ni una mínima idea de que podría ser?— El morocho negó con la cabeza y Erza paso su mano por su quijada, en ademán de que estaba pensando. —Escucha, ella al igual que yo vive en Fairy Hills y hoy tomaremos la ducha comunitaria como acostumbramos.

—Demasiada información que no me interesa.— Murmuró con un sonrojo en sus mejillas. —¿A quién le importa si se bañan juntas?