¿Cómo pedir matrimonio?

♦️16 - Una tormenta que no existe.

—Con estos anillos estoy seguro de que haré llorar a Juvia de la emoción.— Una sonrisa boba se escapo de los labios de Gray Fullbuster, que tal como los dragones gemelos lo habían prometido, se encontraba de regreso al atardecer, con el cielo coloreado de anaranjado y más brillante que nunca.

Caminaba por The Wedding Street, pues acababa de descubrir también que era una ruta de entrada a Magnolia muchísimo más rápida y sencilla de atravesar, puesto a que solo quedaba a cinco minutos de la estación de trenes.

—Ahora solo tengo que ir a visitarla y listo, seré un hombre comprometido.

Y con una extraña tranquilidad y felicidad creciendo en su interior, camino como si estuviese en un videoclip, contoneandose con los ojos cerrados y silbando lo más fuerte que podía.

Pero en medio de su distracción, se tropezó con alguien.

Vaya alguien.

—¡¿G-GRAY-SAMA?!

—¡¿J-JUVIA?!

Y ahí estaban ambos, mirandose como si nunca en su puta vida se hubiesen visto, pero el sentimiento empeoro en ambos cuando se dieron cuenta del lugar en donde se encontraban.

Por supuesto, la colonia de las bodas.

—Mierda... ahora pensará que le quiero pedir matrimonio.— Pensó Fullbuster, con sudor corriendo por todo su rostro.

—Juvi-juvi-juvi-juvi— Las mejillas pálidas de la maga de agua se sonrojaron tanto que parecía que en cualquier momento iba a estallar.

—Actúa normal, no seas como Natsu o Jellal.— Gray trago saliva y luego carraspeo, retomando su postura relajada de siempre. —¿Qué haces por aquí? ¿Buscas un obsequio para Gajeel y Levy?

—Ah... s-¡Si! Juvia buscaba un... un obsequio... pa-para Gajeel-Kun y Levy-San...— Juvia estaba tan nerviosa que repitio exactamente lo mismo que su novio, mirando hacia el lado opuesto para evadir su mirada.

Cuando todavía no eran novios ,poco le importaba a Juvia demostrarle al nudista que quería compartir el resto de su vida con él, pero en ese momento era diferente.

En especial luego de que él la rechazo el día que le propuso tener hijos.

O mejor dicho, cuando intento violarlo.

—Yo vengo de regreso de una misión.— Gray intentaba con todas sus ganas no dejar que el ambiente se pusiera incomodo. —Y me encontre a los dragones gemelos.

—¿Huh? ¿Sting-San y Rogue-San?— El rubor de las mejillas de Juvia desaparecio de inmediato al escuchar los nombres de los chicos.

—Si y fuí de visita a Sabertooth. Todos te mandan saludos, en especial Yukino y Frosch.— Al mencionar al exceed del emo, el rostro de Juvia lucio molesto por unos instantes.

—Rival del amor...

—Y bueno— Gray se apróximo hasta su amada Juvia y la tomo de la mano, dejando sus notables celos de lado. —Ya que la casualidad nos unio por aquí... ¿No quieres ayudarme a buscar un obsequio para los tortolos también?

Y cuando Lockser vio al stripper sonreír, se enamoró otros 8/4 de él.

—¡P-POR SUPUESTO QUE JUVIA ACOMPAÑARÁ A GRAY-SAMA HASTA EL FIN DEL MUNDO SI ES QUE ASÍ LO DESEA!— La peliazul, sin previo aviso, se colgo del brazo izquierdo de Gray y desprendio corazones, paz, amor y alegría por todos lados.