La hermana mayor de Meliodas 3: Pandemónium

Capítulo X

Una semana. Hace una semana que peleamos. Una semana que descubrí quien era en realidad y él descubrió quien soy yo.Una semana que vivo con Coloradito. Una semana que no he vuelto a casa.Unasemana desde que me enteré quién era él y él se enteró quien era yo. Una semana desde que mi mundo se me vino abajo. Nunca pensé que él me dijera tantas cosas feas. "basura, vulgar y despreciable demonio" entre muchas otras cosas. Estaba caminando hacia

Estaba caminando a la casa de Ludo hizo hacer para cuando nos casáramos, vine a arreglar las cosas.

No se si pueda hacerlo- dije muy insegura en la puerta de esa pequeña casa en el medio del monte, me di la vuelta para irme, pero me detuve y cerré los ojos- ¡no!,Coloradito tiene razón, hace una semana que no vuelvo a casa, mis hermanos deben estar muy preocupados, pero al mismo tiempo no estoy actuando como siempre y si voy en este estado ellos sabrán que algo pasa y si supieran lo de Ludo y yo...- apreté los dientes y me llevé una mano al corazón- ¡Bendición!( así decimos los demonios, es como cuando los demás dicen Maldición)¡¿Por qué tengo que amar a ese estúpido, arrogante, narcisista, petulante... amable, valeroso, protector, cariñoso, romántico y...-decía muy enojada pero cada vez bajaba más la vista y la voz mientras me sonrojaba y sonreía un poco- y cabeza de chorlito- suspiré- Tengo que resolver esto,- me voltee hacia la puerta de nuevo- Tengo que para de llorar, cuando me vi reflejada en el estanque de Coloradito mis ojos estaban rojos del llanto y eso no me está haciendo bien. Tenemos que solucionar esto. Ambos dijimos cosas que no pensábamos. Nuestro amor no puede terminar de un día para otro. Yo lo sigo amando a pesar de quien es y estoy segura que a él le pasa igual. Se que si nos sentamos a hablar tranquilamente podemos resolver cualquier cosa, nuestro amor podrá resolver cualquier cosa- dije con una sonrisa esperanzada.-... tal vez...quien sabes... quizás hasta la guerra.- abrí la puerta poco a poco

Todo estaba oscuro y un poco sucio. Parece que no usan mi casa muy a menudo. Con ese pensamiento una gran sonrisa se me formó en el rostro. Mi casa. Nuestra casa... Como no lo encontré en ningún lugar me dirigí hacia la habitación, seguramente estaría durmiendo. Pero cuando estuve frente a la puerta empecé a escuchar unos ruidos extraños. ¿Esos son gruñidos? ¿ Acaso fue un gemido de mujer? ¿ y qué es ese ruido que parece un tipo raro de aplauso?

-OOOOOH.....AAAAAAHHHH ....SIIIIII....MI SEÑORRR....MMÁS- gritaba una voz de mujer que yo conocía muy bien y eso me congeló en mi lugar y me hizo abrir mucho los ojos

"¿Nerobasta?¿Pero qué está...? ¿No me digas que está...- mis mejillas se sonrojaron de vergüenza y de ira- haciendo "eso" en mí casa?! ¡¡¿Pero quién se cree?!!" "¡¡¡¡¡Es una cualquiera!!!!!!! ¡¡¡¡¡una prostituta!!!!!!!!!"

- OOOOh.... Qué bien te sientes....tan estrecha como siempre Nero- dijo una voz masculina que aunque era más gruesa que de costumbre yo podía reconocerla entre miles

¿Alguna vez sintieron que el corazón se les partía en mil pedazos? Pues eso fue lo que sentí al escuchar al hombre que yo amaba haciendo el amor con otra mujer. Mis rodillas se aflojaron y caí al suelo de rodillas. Pero lo que empeoró de verdad fue lo que pasó después

- Aaah verdad que con "ella" no puedes tener esto? - le dijo en burla la arpía

- esa maldita.. se las daba de puritana... quería llegar ah ... virgen a-al matrimonio ¡y mira! Una vil demonio, seguro es una súcubo- escuché que dijo él

Eso fue el puñal que atravesó mis corazones, metafóricamente hablando.

- oh mi señor que caliente me pone que hable así de ella.... ya estoy próxima- dijo la muy perra

Una ira gigante se apoderó de mi en ese momento y me hizo actuar de una forma que hoy me arrepiento. Me levanté de golpe y con un manotazo me sequé las lágrimas. Después hoce lo in pensado abrí la puerta de una patada.'