Cuenta Pendiente

¿Ir o no?

Dulce

¿Ir a su casa? ¿Podría hacerlo? Me quedé callada, mi interior se debatía entre ir o no, porque esto era algo arriesgado podría descubrir muchas cosas que me ayudarías, mi plan empezaría sin necesidad de hacer mucho más pero también estaba esta parte aún no me sentía lista para estar con alguien más, no se si podría hacerlo, lo miraba a los ojos pero sin responder nada y su mano acariciaba mi mejilla con un tocó sensual en sus ojos veía el deseo...

-¿Entonces? ¿Mi casa?- dijo mirándome mientras su mano bajaba haciendo una caricia en mi cuello haciéndome cerrar los ojos y gemir- Vamos a casa, Joaquín- y sin darme tiempo a decir o negarme en algo capturó nuevamente mis labios mientras sus manos bajaban lentamente por mi cuerpo-

Puse mis manos sobre su cabello, se sentía tan suave mientras mi lengua jugaba en su interior buscando mas, las manos de él fueron hábiles no me di cuenta de lo rápidas que fueron hasta que su mano está dentro de mis bragas, muerdo su labio para separarme y soltar un gemido siento como sus dedos se meten en mi interior y yo me aferró a sus hombros mientras mis paredes se contraen placenteramente mientras comienzo a gemir más y más sin importa que el hombre que maneje al frente me escuché, muevo mis caderas en un vaivén delicioso al ritmo de sus dedos para alcanzar la gloria, aprieto su ropa mientras comienzo a venirme sobre sus dedos. Mi respiración se agita y siento como la respiración me falta mientras me muevo desesperada hasta que caigo en ese abismo de placer que me hace desear mas, cuando vuelvo a mi cuerpo me lanzo a sus labios y mis manos buscan desabrochar sus pantalones, no pienso en nada solo en que necesito sentirlo en mi interior pero antes de que pueda seguir el auto se detiene y el beso urgente de deseos también, me baja de sus piernas para salir por la puerta, mis pies se detienen en el asfalto cuando tengo frente a mi una torre de departamentos, solo sentí cuando sus manos me empujaron hasta tocar en mármol del recibidor, los hombres que estaban en la entrada nos saludaron con un movimiento de cabeza, llegamos frente al elevador, las puertas se abrieron y lo vi tocar el botón PH, cuando las puertas se cerraron Christopher se lanzó a mis labios, mis manos no esperaron para intentar quitar su ropa, no se cuánto duro el pase en elevador lo único que sabía era que los dos nos estábamos tocando por todas partes, salimos sin besarnos del aparato de metal no regrese a mi hasta que senti mi espalda sobre la madera, él se separó y entonces intenté recomponerme un poco todo, observé cómo tecleaba algo en un pequeño panel, me sonrió y después acaricio mi mejilla haciendo que me estremeciera fue cuando mi mente me dijo que tal vez debería detenerme. Metió la mano detrás de mí espalda y después abrió la puerta, me sostuvo por la cintura para que no cayera entonces nuestras miradas se cruzaron, tal vez este era el momento de decir que me iría pero ni mis piernas, ni mi boca tenían el valor de hacer algo, así que solo deje que me llevará. Pasamos de largo todo el lugar a obscuras hasta su cuarto que solo estaba iluminado por una luz tenue pero no pude apreciar algo más porque las manos de Christopher estaban desnudándome y en abrir y cerrar de ojos me te la sobre la cama, observé cómo se quitó la ropa mientras yo solo emitía gemidos de ver lo que había debajo de ella antes de que pudiera pensar más tenía los labios de Christopher sobre mi boca, sentía mi cuerpo arder en cada una de las partes que me tocaba, su mano se deslizó entre mis piernas hasta encontrar mi centro, las abrí para él sin reparo alguno

-Eres tan caliente- susurro sobre mis labios que después empezó a deslizar por mi cuello-

Cerré los ojos dejándome llevar, beso cada uno de mis pechos hasta saciarse y dejarme tan mojada que estabag delirando, lo único que se escucha a era el ruido de mis quejidos, sus labios bajaron más hasta que su cabeza quedó entre mis piernas, sentí su lengua deslizarse de arriba para abajo para después succionar mi clítoris con fuerza, mis piernas se movieron mientras que mis manos se aferraban a las suaves sabanas que abrazaban mi cuerpo, solté un jadeo cuando sentí uno de sus dedos entrar en mis pliegues los movió lentamente mientras mi paredes lo abrazaban, mi corazón bombeaba muy rápido, mi garganta se sacaba y yo me había perdido en el placer, cuando pensé que no podía pedir más otro de sus dedos resbaló con mi humedad hasta mi trasero sentí como mi cuerpo se abrió para el y su dedo entro entonces perdí por completo el conocimiento mientras mis jadeos pasaban a gritos y su lengua hacia maravillas sobre mi clítoris hasta hacerme desfallecer, senti como me elevaba hasta perderme por completo, me aferre más fuerte a las sabanas y sentí como me corría de una manera que ni yo misma reconocí, Christopher beso la cara interna de mis muslos y después subió poco a poco hasta colocarse entre mis piernas, antes de que pudiera recuperarme él entró en mi de un solo golpe haciendo que abriera los ojos para tomarme con los suyos, comenzó a moverse dentro de mi suavemente mientras no despegaba su mirada con la mía. Intentaba sostener la mirada pero mis ojos se cerraban solos del placer descomunal que experimentaba, empezó a moverse más rápido haciéndome gritar mientras apretaba las sabanas, Christopher soltó mi mano de la sábana para ponerla entre las suyas, apreté mi interior para envolverlo en mi cuerpo cuando estaba apunto de correrme se detuvo y sonrió