Su cabello hondeaba junto al viento, sus lágrimas se mezclaban con su sudor y su manos se aferraban con fuerza al caballo que había robado de los establos.
Contenía su odio pero no sus sollozos, su corazón dolía y eso le impedía pensar con claridad.
Que error estabas cometiendo Nur
Hürrem miraba a sus sobrinos dormir, odiaba verlos llamar a su madre todas las noches, una vez ambos se quedaron profundamente dormidos salió de sus aposentos y se dirigió hacía los suyos pero unas voces la hizo detenerse.
—Mañana ambos morirán, la sultana Meleksima y Cihangir dejarán de ser un estorbo —aseguró Neylam hatun a Afife.
—No quiero errores hatun, esos bastardos tienen que morir pronto—dijo Afife sonriendo.
Hürrem sintió su corazón latir fuerte y su vista se nublo, ella prometió que ambos niños estarían a salvo y lo cumpliría.
La castaña regresó a los aposentos de sus sobrinos y los miró dormir plácidamente, se acercó a ambos y se recosto con ellos.
Nur bajo del caballo con cuidado y entro al palacio en la pequeña entrada secreta, su corazón se aceleró con cada paso, sus ojos demostraban odio y su mano dejo de temblar cuando se acerco a los aposentos de su objetivo.
Le pidió perdón a sus hijos, a Nurbanu, a sus amigas de toda la vida, y sobre todo a sus hijos, haría eso por ellos, acabaría con la causante de su dolor por ellos.
Cuándo vio que las criadas que custodiaban las puertas se fueron entró con cuidado y se acerco a dónde descansaba ella.
Creyó que todo iba a salir bien, pero sus ojos se abrieron y ambas comenzaron a forcejear.
—Esto es por mis hijos, eran inocentes, maldita, asesina—le gritó
—Eran los tuyos o los míos, y decidí que eran mis hijos primero—dijo tratando de quitarsela de encima.
—Mataste a mis nietos, Tenían tres y cinco años, no tienes corazón—gritó
—Estaba dispuesta a todo, aún lo estoy— un gritó se escucho.—en la guerra no siempre se gana.
El cuerpo de Nur cayó a un lado del de Gevherhan, la valide miró con horror lo que había hecho, y escucho un fuerte sollozo a lo lejos.
—No,no, no allah—negó Gevherhan
—Esperó que el sultanato de tu hijo sea maldito, deseo de corazón que quedes en la miseria, morirás sola—dijo Nur cerrando sus ojos, Hürrem que escucho sus gritos la miró con dolor y se acercó a Nur.
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Guerra por el trono©
Historical FictionLas Sultanas son el pilar del Imperio otomano, ellas no sólo dan a luz Príncipes y Sultanas, sino que también se encargan de que el şehzade suba al trono y sea el dueño del mundo. Ahí es donde entran ellas, cada una llego de distintos lados del mund...