Gatillo Fácil

Un río de lágrimas

La mano de esa mujer era muy suave. Le dije que estaba bien, que había estado peor en otras ocasiones, entonces una pequeña sonrisa se creaba en mi boca. De repente el niño de la habitación salió corriendo y abrazo a aquella chica, supongo que eran hermanos. Mientras la chica abrazaba a su hermano me miró y me pregunto que que era ese humo que salía de la cicatriz del ojo a lo que contesté que era una historia larga. Me fui a ver a un espejo y mi ojo derecho, donde tenía la cicatriz, se iba haciendo de color rojo mientras el otro seguía verde. Salí al salón y le dije a la mujer: Lo siento por lo de tu madre, cuando llegué ya no podía hacer nada. Entonces la mujer dijo: Tranquilo, se que no es tu culpa. Entonces le ofrecí acompañarla a la ciudad y explicárselo todo. Dijo que sí mientras hacía una sonrisa, también dijo: Vale, por cierto, tu ojo me mola (soltó una carcajada).Yo también le seguí con una pequeña carcajada. Nos montamos al caballo, el niño aun seguía un poco asustado. 

En el camino de ida fui explicándole todo, los diferentes bichos que habían, sobre las serpientes y lo de mi ojo. Después de explicárselo todo me pregunto (dialogo): 

Mujer- Por cierto, me llamo Annah.

Clay/Ghost - Yo me llamo Ghost, bueno soy conocido por ese nombre.

Annah- No parece ser un nombre que le pondrían a un niño, ¿cual es tu nombre de verdad?

Clay/Ghost- Lo siento, pero nadie conoce mi pasado ni nada sobre mí y me gustaría seguir así. 

Annah- A vale, ¿podría preguntarte si tienes familia?

Clay/Ghost- Todos muertos, solo estoy yo.

Annah- Voy entendiendo porque te llaman Ghost.

Cuando ya llegamos al pueblo le acompañe a un hotel, donde podrían pasar unos días. Les cogí una habitación y los llevé a ella. Les di la llave y me despedí diciendo: Estaré por aquí durante un tiempo, si necesitáis algo avísame. Dinero, comida, lo que sea. Eduard aun estaba asustado, se escondía detrás de Annah, así que me arrodille y dije: Ven Eduard, tengo algo para ti(Eduard se acercó poco a poco), toma, esto es para ti (le dije mientras me desabrochaba la estrella de metal de mi padre), esto me lo dio una persona muuuy importante para mí y ahora quiero que lo tengas tu. Eduard hizo una sonrisa mientras se lo abrochaba y grito Mira Annah, ¡ya soy un vaquero! Annah hizo una pequeña sonrisa, me dio las gracias y fue a cerrar la puerta. Yo me puse el sombrero y me dirigía fuera del hotel hasta que Annah me llamo y me dio un beso en la mejilla. Sin decir nada se metió en la habitación y cerró la puerta. Se me puso una sonrisa de oreja a oreja.

Salí feliz del hotel y me dirigí hacia el bar. Entré y el camarero me dijo: Hombre Ghost, ¿lo de siempre? A lo que conteste: No Robert, ponme solo un vaso de agua. De repente al bar entró Eric, decía que había escuchado que estaba en la ciudad y quería verme. Entró y al verme vino corriendo a darme un abrazo, decía que pensaba que estaba muerto. Empezó a preguntarme de todo, que me había pasado en el ojo, que porque tenía tantas cicatrices y porque había estado tanto tiempo fuera. Iba a preguntar muchas cosas pero paro para estar tosiendo un buen rato, le toqué la frente y vi que tenía mucho frío, le dije: Eric, estas muy frío, debes ir a casa y hacerte algo caliente, estas fatal. De repente, me vinieron las palabras de aquel Indio 'No te fíes de nadie si su cuerpo esta muy frío'. Estaba preocupado, de repente Eric se cayó al suelo y empezó a moverse de una manera muy extraña hasta que de la parte trasera le salieron unos pinchos, parecían patas de araña. Poco a poco se fue levantando con esas patas, su pelo le tapada los ojos. Una de sus patas pillo a Robert y le perforo el pecho y lo tiró contra la pared haciendo un agujero enorme en ella. Yo empecé a correr y esquivar todas las patas de Eric lanzándose hacía a mi. Pude coger una silla y lanzarse la a Eric. Pude esconderme un poco, me perdió de vista y me escondí detrás de un piano, Eric se ve que no podía ver, debía jugar con eso. Cerca tenía un vaso, lo cogí sin hacer ruido y lo lancé a la otra punta de la habitación. Eric se dirigió allí. 

Me di cuenta que desde el segundo piso podría caer encima de Eric, no parecía buena idea, pero era la única que se me ocurría. Las escaleras para subir estaban un poco destruidas, pero aún podía subir escalando un poco. Me preparé para escalar rápido, sabía que haría sonido así que debería hacerlo rápido. Salté, empecé a escalar, un trozo de madera cayó al suelo, Eric lo escuchó y vino hacia allí, pero antes de que llegará me dio tiempo a subir, me subí a la barandilla y salté encima de Eric. Lo tumbé al suelo, le agarré fuerte porque sus patas me estaban estirando para que me alejara de él. Saque mi cuchillo de bota, levanté la mano para acuchillarle pero antes dije: Lo siento Eric, espero que me perdones. Bajé el brazo para acuchillarlo pero las garras me alejaron de él, me levantaron, empecé a intentar cortar una de las patas pero una de ellas se me metió en la barriga, no se metió muy profundo, pero dolía. Pude cortar una, Eric gritó de dolor y sus patas me soltaron cayendo encima de él y haciendo que mi cuchillo se metiera en su boca. Poco a poco las patas se iban metiendo dentro de él y poco a poco Eric se iba petrificando. Una lágrima suya cayó de sus ojos antes de petrificarse por completo. 

Y allí estaba yo, encima de Eric, todo el bar destrozado, con un pequeño corte y un rió de mis lágrimas. 

Continuará...