vida

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La vida cambia tan rápido
como tú decides cambiar con ella.
Le das la mano,
y te coge todo el cuerpo.

No es una decisión sin vuelta atrás,
ahí está el peligro.
Precisamente por ello debemos evitar caer
en las mismas piedras que nos hicieron heridas.
Pero somos humanos,
y nos equivocamos.

Tememos al daño
pero somos nuestros causas principales.

Dicen que el ser humano
es el único animal que cae en su misma herida más de dos veces.
Yo ya he perdido la cuenta
de las veces que me he abierto
y cosido la misma cicatriz en un año.
Y no descarto posibilidad de abrirla de nuevo.

La vida te va sorprendiendo a veces.
Te da la oportunidad que mereces,
pero es cuestión de aceptarla o no.
Y andamos demasiados ciegos
para reconocer los nuevos caminos que se nos ofrece.
Pero no paramos de quejarnos
de la mala suerte que nos rodea.

La vida no es justa,
pero es uno mismo quien la hace más dura.

florecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora