Capítulo 13

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     🐞🐞🐞🐞Marinette🐞🐞🐞🐞

Siempre se había llegado a escuchar que la familia real era la mas noble y humilde que una persona pudiese conocer y eran pocos los que decían que la realeza podía ser variable dependiendo en que situación se encuentre su reino al que regularmente es cuando hay crisis monetarias, malas cosechas o simplemente por guerras; pero a como vive París actualmente lo dudo completamente por óptimas razones, simplemente, un rey tirano que no le interesa si el reino muere de hambre mientras continúe cobrando sus impuestos y un príncipe mimado, caprichoso, engreído, y arrogante que desquita su ira con los empleados solo porque su padre lo reprende.

>No me sorprende que el reino se encuentre en esta situación.<

Y por si fuera poco las principales amistades del palacio son los feudales mas adinerados que desde luego tenían que actuar como si ellos fuesen los reyes de todo y no quien realmente es el rey.

—Marinette hola ¿Cómo estuvo el día para ti? —Dijo Alya asomándose en mi habitación.

—Terrible... ¿Qué hay de ti? ¿Trabajaste el día completo en la mansión Bourgeois?

—Hay si no me lo recuerdes Nathalie nos mando a Nino y a mi ahí después de atender al príncipe. —Se quejo mientras se tumbaba en mi cama. —La niña Bourgeois hace que el día se vuelva imposible de aguantar.

—Es alguien bastante pedante así que no me sorprende que sea una insoportable aunque siempre hay alguien peor. —Dijo recordando lo ocurrido con el príncipe.

—Lo dudo mucho, hasta ahora no a habido alguien mas insoportable que ella, bueno por ahora me iré. —Dijo Alya poniéndose en pie. —Mañana tendremos mas trabajo y tu tienes que terminar esos vestidos así que te dejo. Buenas noches Marinette.

—Buenas noches Alya.

Me hubiese gustado decir que no seria así pero Alya tenia razón en que para mañana tendríamos mas trabajo puesto que desde que llegue aquí, cada día hay mas trabajo pesado por hacer y si me hacia consiente en que yo no recibiría paga durante diez años porque toda iría para cubrir mi deuda, todo se volvía mas pesado para mi. Por suerte los vestidos estaban casi completos y ya solo quedaría darles los últimos retoques y eso lo podía hacer mañana con mas paciencia.

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Desperté con la ayuda de los primeros rayos de sol que cruzaban por mi ventana hasta llegar a mis ojos, ya me empezaba ha acoplar a los horarios para despertar por lo que apenas desperté me di prisa en lavarme para no lucir con tan mal aspecto, había terminado de arreglarme con el uniforme y peinar mi cabello para iniciar a trabajar cual ando Alya llamo a mi habitación para despertarme, cosa que ya no le funciono puesto que ya me encontraba levantada y lista para comenzar el día.

—¿Sucedió algo o aun estoy dormida?

—Ninguna de las dos cosas pero si no nos daos prisa entonces si sucederá algo.

Dicho eso Alya y yo no tardamos en ir a la cocina para que Nathalie comenzara la asignación de deberes aunque a lo que era hoy parecía mas estresada de lo normal.

—Hoy estaremos un tanto mas atareados de lo normal, el rey aun continua un poco débil de salud y además el príncipe también os encuentra enfermo por lo que alguien tendrá que cuidarlo mientras dos mas lo atenderán, por ahora Nino se encuentra atendiéndolo así que requiero de dos mas para que se encarguen. —Aquello pareció tomar por sorpresa a todos puesto que se miraban los unos a otros. —Marinette y Nathaniel se encargaran del príncipe, vayan ya mismo a sus aposentos y atiendanle, los demás comenzare asignarles sus deberes, retirence ustedes dos.

Entre el amor y la corona. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora