En picada

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La ví como nunca la e dejado de ver, como el amor de mi vida; me sentía emocionado al saber que otravez tendría unas grandes vacaciones, al saber que estaría al lado de ella; no dejaba de pensar en lo que podría suceder y en lo que quería que sucediera.

Al momento de encontrarnos, sentí nervios, pues vería a mi amor verdadero; la llamé y le pregunto qué si nos podíamos ver, ella afirmó con una sonrisa en su rostro, esa pequeña sonrisa significaba mucho para mí, porque demostraba que aún me quería; (¿Te acuerdas donde nos vimos?) Estuvimos cara a cara, pude sentir su olor, su delicada respiración; estaba ahí, con el amor de mi vida, sintiéndome como el hombre más afortunado de este inmenso universo. Pero nada iba a ser igual, la vida no da unas segundas oportunidades o si las da y debes aprovecharlas, o si no te arrepentirás toda la vida; yo la seguía amando con tal intensidad que era para mi imposible pensar que no íbamos a amarnos; nos vimos pocas veces, y aproveché cada uno de ellas para decirle y darle todo mi amor; llegó el 24 de diciembre, quería que fuera igual que antes, pero fue eternamente imposible, aunque nos vimos, ninguno de los dos sentimos lo mismo.

Quería pensar que todo iba a ser igual, que volveríamos a ser ese mismo amor del principio, pero esta vez no era, depronto sería la próxima, si hay una próxima. Llegamos a un punto que nos veíamos y no nos saludábamos, nos veíamos y pasábamos de largo, pero los dos con el mismo sentimiento de amor.

Me encerré en ese problema, no quería salir y ver la realidad, pero me tocó, asumí que ya no te iba a tener o al menos por un instante más; de nuevo sucedió te fuiste sin previo aviso; pasaron meses enero, febrero, marzo y todos sin información tuya, siguieron pasando los meses, abril, mayo, junio ,julio, agosto pero sin imprevisto alguno llego septiembre, acontecía un día normal, la rutina me tenía cansado, pero un lunes escuché "Ella se vino a vivir aquí" y quedé impresionado pues quería verla.

Saliendo de mi casa, siempre estaba pendiente pues ya no aguantaba, necesitaba verla,y a lo lejos la pude ver, estaba con alguien, era una mujer, creo que tomando fotos, lo importante fue que la ví, y pude notar que aun al verla me hacía sentir eso, eso que me emocionaba, ese sentimiento de amor, esa irracionalidad que me causaba, era ella; el amor de mi vida. La verdad como la anterior vez que nos vimos nada era igual ahora me daba pena acercarme y hablarle.

Todo era más difícil.

Y una tarde decidí no volver a pensarte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora