Un verso y un recuerdo

Magdalena

Tú, de mi amor la preferida,
La vida de mi vida.
Alma de mi alma.
Quimera de paz y calma.

Te quiero con loco frenesí,
Con inefable ternura.
¿Que quieres de mí?
Si todo es para tí, hermosura.

Si lo que suena es tu voz,
Es música para mis oídos.
Melodías preciosas, acordes bellos
Que al no escucharlos es un sufrimiento atroz.

Dame la oportunidad de bailar un vals,
Al son de un violín.
Dar mis pasos a tu lado,
Ser feliz contigo al fin.

Le pido al cielo,
Una felicidad eterna.
Y después de tres metros bajo suelo,
Seguirte acariciando nena.