Capítulo 25: Agujas afiladas

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¿Cuáles son los tres continentes y la mayor parte de un planeta entre yo y la propiedad, eh?

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Cuerdas de desplume

"El entusiasmo lo es todo, debe estar tenso y vibrando como una cuerda de guitarra". - Pelé

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Luchar contra Mukade se estaba volviendo agotador. No era que el tipo fuera particularmente duro, sino todo lo contrario. De esta forma, era pesado e incómodo, claramente no estaba acostumbrado a sus muchos apéndices. Era un juego de niños para Naruto confundirlo, simplemente haciendo que sus títeres se movieran a su alrededor en amplios arcos, salpicándolo con fuego. Era el hecho de que, a pesar de lo fácil que debería haber sido, el hombre simplemente no iba a caer.

Él movió a Ramia, asegurándose de que ella estuviera posicionada frente a la cara de Mukade antes de soltarse con un estallido difuso del cañón de arena. Las reservas se estaban agotando, por lo que ya no podía permitirse usarla como herramienta de corte. En cambio, extendió una amplia nube de arena para distraer al hombre, dándole a Minato suficiente tiempo para caer sobre su cabeza desde atrás con otra de sus técnicas de Chakra. Esas cosas fueron particularmente devastadoras, y combinadas con la técnica más famosa del hombre ... Naruto pudo ver cómo se ganó su reputación.

O ... al menos lo haría. La batalla que le dio el apodo de Flash amarillo fue en los últimos días de la Tercera Guerra Shinobi.

El viaje en el tiempo le dolió la cabeza.

Mukade rugió enojado, a tientas como Naruto había esperado que lo hiciera. En el momento en que cualquiera de sus manos tocaba una superficie, Arakune estaba allí, pegándolas en su lugar con su adhesivo. Nunca sostuvo a la criatura títere por mucho tiempo, y a menudo arrancaba trozos del piso y el techo para liberarse, pero cualquier cosa que funcionara como una táctica dilatoria era bienvenida. Solo necesitaban mantener a este bruto ocupado hasta que Sāra pudiera cerrar el Ryūmyaku. Entonces sería vulnerable y Naruto podría pagar esta irritación diez veces.

"Eres una plaga ..." llamó Mukade, arrancando uno de sus brazos de la mano, aunque regenerándolo irritantemente momentos más tarde, y golpeando con fuerza el suelo "... se están convirtiendo en una molestia". La sala entera tembló, trozos de mampostería suelta y maquinaria cayendo a su alrededor. Naruto se vio obligado a esquivar un trozo de piedra y fue sorprendido por uno de los títeres fabricados en fábrica de Mukade.

Afortunadamente, Minato era mucho más ágil de lo que era y ya estaba allí, aplastando la construcción de madera con su técnica. Naruto estaba preocupado por eso; La pura manipulación de Chakra no podía ser tan simple como el hombre la hacía parecer, y estaba lanzando a esos 'Rasengan' como si fueran kunai. Efectivamente, el hombre tuvo que tomarse un momento para recuperarse antes de recurrir a Naruto.

"Esto no está funcionando".

Él estaba en lo correcto. A pesar de sus mejores esfuerzos, Mukade continuó avanzando. Al ritmo civil que Sāra se limitaba, si vacilaban por un momento, él los atravesaría y la atraparía en poco tiempo. Hinata puede haberse vuelto más fuerte, pero él todavía no creía que a ella le iría mucho mejor que a los dos.

"Necesito una distracción", murmuró Naruto, haciendo una mueca ante la estúpida cosa que estaba a punto de hacer.

Minato asintió sin siquiera preguntarle, lanzándose de vuelta hacia el títere desenfrenado y dibujando algunos de sus únicos kunai.

"¡Shuriken Kage Bunshin no Jutsu!" Llamó, y los cinco o más kunai se multiplicaron en cientos en un instante, desgarrando a Mukade como si estuviera enfrentando a una compañía entera de shinobi.

Tirando de las cuerdasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora